Corría octubre de 2018 cuando nacía en Gran Canaria Birdland, la aventura empresarial de Rubén Zarauza y Elena Catalán, dos profesionales que llevan años dedicados a los contenidos infantiles de animación. La compañía francesa Amuse, atraída por los incentivos fiscales de Islas Canarias, apostaba por ellos para expandirse y abrir un nuevo estudio.
Con una doble vía de negocio que pasa por dar servicio y por desarrollos propios, Rubén y Elena trasladaron sus vidas al borde de la playa y montaron en tiempo récord un estudio que ya cuenta con un equipo de más de 30 personas y ha presentado su primer desarrollo interno, ‘Shark Academy’. Birdland, con las plataformas digitales como objetivo inicial pero no exclusivo, se define como un estudio que está a medio camino entre la producción tradicional de animación y la producción de videojuegos, pegado a las tendencias, con capacidad de trabajo y de reacción.
Audiovisual451 habla con Rubén Zarauza y Elena Catalán para conocer más detalles sobre Birdland, cuya sede se encuentra en Infecar al lado de Ánima España y Koyi Animation, otros dos estudios instalados en Las Palmas de Gran Canaria con el apoyo total del Cabildo, de la Sociedad de Promoción Económica de Gran Canaria – SPEGC y de la film commission.
A451: Habéis acudido a MIPCOM 2019 con vuestra primera IP original, ‘Shark Academy’, ¿qué podéis contarnos al respecto?
Rubén: «‘Shark Academy’ es una serie de animación para el público preescolar ambientada en una guardería de tiburones. Allí cantarán, bailarán, jugarán, aprenderán… también se pelarán entre ellos y se reconciliarán, en definitiva, vivirán diferentes aventuras. Hemos planteado tres fases de contenido, empezando por clips con historias sencillas acompañadas de canciones populares. La historia y la letra de la canción serán independientes, no estamos haciendo coreografías de las canciones, simplemente queremos esas canciones porque son reconocibles. Tenemos pensado hacer unos 26 capítulos con sus 26 canciones.»
Elena: «Vamos a testar en plataformas digitales estos clips de la primera fase. El objetivo es ver cómo reacciona el público y crear una base de espectadores, antes de pasar a la fase dos, en la que desarrollaremos contenidos educativos.»
A451: Al relacionar niños y tiburores es inevitable pensar en el fenómeno ‘Baby Shark’…
Rubén: «Efectivamente hay ahora mismo un “fenómeno tiburón” y queremos aprovechar la ocasión para mostrar los diferentes tipos de tiburón que existen. En ‘Shark Academy’ también tenemos un pingüino que se cree tiburón y que tiene potencial para un spin-off.»
Elena: “Lo que está pasando con los tiburones no es más que una tendencia de mercado, está comprobado que los niños buscan contenidos sobre tiburones y desde Birdland queremos subirnos a la ola y que encuentren nuestro contenido. Con ‘Shark Academy’ les ofrecemos algo diferente a ‘Baby Shark’, que gira en torno a una única canción. Nuestro core está en producir contenido basándonos en lo que quieren los niños, en el caso de ‘Shark Academy’ vamos a la audiencia preescolar, y a partir de ahí buscamos las fuentes de interés para los niños, qué buscan, qué les interesa, qué quieren ver para dirigir nuestros desarrollos en esa dirección. Para llegar a tiempo a las tendencias, está claro que tenemos que ser rápidos produciendo.»
A451: ¿Contempláis una serie de televisión de ‘Shark Academy’?
Rubén: “Sí, de hecho en MIPCOM ha habido varios canales de televisión que han mostrado interés por ‘Shark Academy’ y quieren ver más contenidos. Incluso algunos ejecutivos nos han dicho que no parece una propiedad concebida para el entorno digital, como si producir directamente para digital fuera algo peyorativo. Actualmente, ya hay varios casos de propiedades que han tenido mucho éxito en Internet y que han dado al salto a la televisión, este proceso es una manera de apostar por algo testado. ‘Masha y el oso’ es un ejemplo, y nosotros mismos, en Birdland vemos las plataformas digitales como un vehículo para poner a prueba nuestras producciones, sin tener que esperar a terceros.»
A451: ¿Cuánto tiempo os ha llevado lanzar ‘Shark Academy’?
Elena: “Hemos invertido unos seis meses en el piloto, ten en cuenta que en paralelo estábamos poniendo en marcha el estudio. Nuestro objetivo es lanzar el contenido entre los tres y cuatro meses y a partir de ahí seguir nutriendo con un nuevo episodio cada semana. Esto supone optimizar muchos nuestros procesos de producción para conseguir calidad y cantidad.”
A451: ¿Y cómo se optimiza la producción?
Elena: “Todo se basa en tener una metodología. Lo que nos diferencia de productoras que se dedican a la producción para canales lineales es que tenemos presupuestos menos hinchados, así que exprimimos al máximo nuestros recursos y desde el origen decidimos qué es lo importante, qué es lo que quiere nuestra audiencia, no un canal de televisión.
También tenemos unas líneas de trabajo que hacen de tamiz para cada proceso de trabajo. Tenemos una hoja de ruta muy cuidada, cada persona que interviene en el desarrollo y en la producción sabe lo que debe hacer. La rapidez en el entorno digital es clave, aquí las reglas del juego son distintas a las de la televisión.”
A451: Se avecina un cambio importante para los contenidos infantiles en YouTube, ¿cómo os sentís frente a esto, cómo créeis que va a afectar a vuestro negocio?
Elena: «YouTube se está viendo obligado a cambiar. Estamos en un momento de incertidumbre porque a partir de enero cambiará la monetización de los contenidos infantiles en YouTube, no estará permitido incluir publicidad targetizada. Desde Birdland lo vemos como una oportunidad, seguramente el mercado infantil en YouTube ha crecido demasiado rápido y sin control, mucha gente se puso a producir contenido sólo para monetizar y beneficiándose del funcionamiento del algoritmo. Probablemente el próximo año haya una criba de contenidos infantiles en YouTube y pensamos que los que se adapten de la manera más creativa serán los que resistan. Luego, el mercado se recolocará y quedará la audiencia infantil, que es súper atractiva, las marcas seguirán interesadas en llegar a ellos y en Birdland seguiremos teniendo claro que lo mejor es hacer buenos contenidos, que guste a padres y niños. Además, no dependemos sólo de YouTube, ya hemos hecho nuestra previsión para diversificar el negocio.»
A451: ¿De dónde viene esa diversificación en Birdland?
Elena: «Somos productores, distribuidores y ofrecemos servicios. Además, distribuimos en diferentes plataformas, no sólo en YouTube, y nuestros contenidos, a pesar de nacer en digital, no son exclusivos digitales, son marcas 360 que pueden llegar a televisiones y demás ventanas. También somos flexibles en función de las reacciones de nuestra audiencia y somos capaces de introducir modificaciones sobre la marcha, nuestro objetivo no es producir cien capítulos como un bloque, preferimos estudiar cómo reacciona la audiencia, mantener un diálogo constante con ella y afinar nuestras producciones en función del feedback.»
A451: ¿Cuánto dinero puede dar un contenido en YouTube?
Elena: «Esa pregunta es muy difícil de responder porque cada visionado tiene un precio, depende de dónde venga. Lo que está claro es que para que el negocio sea rentable en YouTube necesitas miles de millones de views y mucha cantidad de vídeos.»
A451: Habladme del equipo actual de Birdland.
Rubén: “Tenemos profesionales que ya no desean trabajar en Pixar y que buscan otro tipo de trabajo, estable, indefinido, porque en Birdland estaremos en contínuo laboratorio. Y también tenemos a personas que están introduciéndose en el mercado laboral y que traen una energía brutal. Lo que sí vemos es que en Birdland se trabaja de una manera distinta y casi todo el que se incorpora tiene que pasar por ese cambio de mentalidad, creo que estamos entre la producción de animación tradicional y la producción de videojuegos, diría que es una forma de trabajo poco común en España, al menos por el momento.”
Elena: «Actualmente, tenemos un equipo de 34 personas en Las Palmas de Gran Canaria. Tenemos dos equipos distintos, uno dedicado a los encargos que recibimos, y otro para el desarrollo y la producción de nuestras IPs. Actualmente estamos trabajando en dos services en animación 2D para Millimages, y por el momento todos los desarrollos propios son en animación 3D, así que necesariamente tenemos que tener dos equipos diferenciados.»
A451: ¿Estáis buscando profesionales para incorporar al equipo de Birdland en Gran Canaria?
Elena: «Hemos puesto el estudio en marcha hace poco y rápido, queremos tener puestos intermedios en los que delegar temas y con los que gestionar el volumen que está tomando Birdland. Por ejemplo, una incorporación fundamental ha sido la de Carolina Pérez, es una pieza estratégica para crecer en producción, distribución y servicios.»
A451: ¿Qué otras IPs originales tenéis en desarrollo?
Elena: «Tenemos otros desarrollos en fase embrionaria y ahora mismo no podemos desvelar nada, pero estaremos listos para enseñarlos pronto, ya sabes que parte de nuestra filosofía de trabajo es mover ficha con rapidez.»
A451: Los dos vivíais en Madrid antes de formar Birdland. ¿Cómo ha sido la mudanza total a Gran Canaria, qué balance hacéis de este primer año en la isla y también de vuestra relación con Amuse, vuestra empresa matriz?
Rubén: “Tanto la relación con Amuse como el establecernos en Gran Canaria están siendo experiencias fantásticas. Amuse ha apostado por Birdland para diversificar, funcionamos como empresas independientes y a la vez dialogamos mucho, nos enseñamos los trabajos que estamos haciendo, hacemos críticas constructivas, nos aportamos los unos a los otros.
Por otro lado, no hemos podido tener mejor acogida en Gran Canaria. A nivel institucional la isla está volcada con todas las compañías que estamos instaladas allí. En cuanto a vida personal, puedo decir que la conciliación familiar es más sencilla que en Madrid, que es donde llevábamos años viviendo, además tenemos buen clima todo el año y la playa cerca. Dentro de Birdland y de las demás compañías instaladas en Infecar hay más personas como nosotros y también compartimos tiempo de ocio.”
Elena: “Creíamos que todo pasaba en Madrid y que íbamos a alejarnos del negocio, pero no está siendo así en absoluto, se puede trabajar perfectamente desde las islas, y cada vez más personas miran hacia Canarias como una posible vía de negocio.”