La residencia de guion CANNESERIES Unlimited ha celebrado su cuarta edición en 2021 con siete talentos emergentes de Europa, entre ellos un español. Alejandro Cortés ha estado inmerso durante meses en el desarrollo de ‘1999’, serie de ficción concebida como “un coming-of-age de época”.
Ante la necesidad de introducir nuevos talentos en la industria europea de la ficción, Francia ha puesto en marcha varias iniciativas destinadas a guionistas. Si Lille cuenta con Series Mania Institute, la ciudad de Cannes lanzó el programa ‘Cannes On Air’, con la colaboración de Vivendi, Canal+ y Université Côte d’Azur. Dentro de este programa, se incluye la residencia de guion CANNESERIES Unlimited, cuya cuarta edición se ha desarrollado en formato híbrido por la pandemia.
Así, en este 2021, han sido siete guionistas procedentes de Italia, Inglaterra, Portugal, España y Francia los que han tenido la oportunidad de dedicarse en cuerpo y alma al desarrollo de sus ideas originales bajo la mentoría de Benjamin Harris y Michaela Sabo de Serial Eyes, la guionista Elizabeth Schub-Kamir, y el guionista y productor Alexander Perrin. Este año, la residencia buscaba proyectos de formato corto que giraran en torno a dos temáticas: historias de amor y futuro cercano, o adolescentes, sueños y empoderamiento. En esta última encajaba ‘1999’.
Alejandro Cortés presenta la historia de Aura, una adolescente, hija de inmigrantes, que huye de su ciudad tras cometer un crimen racista con el que pretendía entrar en la banda de skinheads de su novio. La joven termina en el parque de atracciones de la costa mediterránea makinera de finales de los 90 que tanto visitó de vacaciones durante su infancia. Aunque allí encuentra una nueva familia elegida de inadaptados, su pasado autodestructivo la persigue para impedir que se reconcilie con su propia sangre extranjera.
Durante CANNESERIES Unlimited, los residentes han podido implementar los métodos de escritura que siguen la Université Côte d’Azur, Serial Eyes y el Deutsche Film und Fernsehakademie Berlin (DFFB). El CNC francés también ha participado en el programa, así como el festival Canneseries, que acaba de celebrarse en paralelo a MIPCOM. Además, el equipo creativo de Canal+ que trabaja en las producciones originales del grupo, en Studio Bagel y en Studiocanal ha acompañado a los residentes paso a paso.
¿El resultado? Una biblia y el guion del piloto, todo escrito en inglés, y un posible acuerdo de desarrollo con Canal+ que, como socio de la residencia, elegirá uno o más proyectos. La ganadora de la tercera edición de CANNESERIES Unlimited fue la británica Lara Barbier y su serie ‘Sparrowhawk’, un thriller de espías dirigido al público juvenil. En las próximas semanas se conocerá el veredicto de Canal+ sobre la edición de 2021.
Nacido en Zaragoza en 1983, Alejandro Cortés se ha formado entre su ciudad natal, Barcelona, Madrid y Buenos Aires, donde pasó siete años estudiando (en la Universidad del Cine de Buenos Aires y con docentes de la Escuela Internacional de Cine y TV de San Antonio de los Baños de Cuba) y rodando en festivales, videoclips y publicidad. Su primer largometraje, ‘Refugios’, coproducido entre España y Argentina en 2015, fue seleccionado y premiado en varios festivales internacionales. Le siguió el largometraje documental ‘Carrasca’ en 2018, y entre sus trabajos más recientes figura la dirección de investigación y documentación en el documental sobre Héroes del silencio producido por Netflix.
A sus 38 años, Cortés ha conseguido algo poco habitual entre los guionistas españoles: ser seleccionado en una residencia internacional. En conversación con Audiovisual451 cuenta cómo ha sido la experiencia y cuáles son sus próximos pasos.
-La convocatoria para CANNESERIES Unlimited de 2022 ya está abierta. También la de CANNESFILMS Unlimited, para proyectos de largometraje.-
Audiovisual451: Alejandro, cuéntanos cuál es el origen de ‘1999’.
Alejandro Cortés: “Hace unos años presencié una agresión racista en un parque de España. Me hizo pensar mucho y me llevó de vuelta a mi juventud. En ‘1999’ me hago eco de un odio que perdura y que ha resurgido en los últimos años, me hago eco de una época en la que todavía no había nombres oficiales para los atentados que se cometen contra los derechos humanos, no se hablaba de acoso escolar o bullying, simplemente había “patio de recreo”, no se hablaba de diversidad, se hablaba de “los diferentes” y de forma agresiva. Ahora podemos percibir que muchas cosas estaban mal y que no nos dábamos cuenta. En ‘1999’ huyo de moralina, no pretendo dar lecciones, simplemente atrapar al público con personajes, con sus conflictos de identidad.
Creo que estamos en un momento en que mi generación ya está en posición de contar historias con distancia y con una mirada crítica sobre finales de los 90 y principios de los 2000.”
A451: Entonces, ¿cuándo empiezas a escribir ‘1999’?
A.C.: “Empecé a pensar en la historia de ‘1999’ en 2017, preparé un tratamiento, escribí sobre el universo y los personajes, y empecé a mover el proyecto en 2019, primero me seleccionaron para VLC Pitch Forum, lo cual fue el punto de partida, después participé en varios concursos de guion que me dieron de comer y me permitieron seguir enfocándome en el desarrollo de la historia. Gané uno de los doce premios Santa Isabel de guion audiovisual de la Diputación de Zaragoza a primeros de este 2021, también la beca Ibermedia del Laboratorio Internacional de Guión de Colombia, no pude viajar a Medellín por la pandemia, pero todo el contacto que he mantenido por videollamadas con script doctors de diferentes partes del mundo ha sido muy útil.
Animado por mi entorno, me presenté a la residencia de CANNESERIES Unlimited y, después de ir superando muchas fases, porque se presentaron centenares de proyectos de muchos países, en enero de 2021 me comunicaron que había sido uno de los elegidos.”
A451: No es muy habitual que los guionistas españoles se animen a presentarse a programas internacionales…
A.C.: “Sí, es verdad, yo puedo decir que la experiencia ha sido fantástica, es muy importante la visión exterior que te pueden dar profesionales que se pasan el día leyendo guiones, tratamientos, acudiendo a sesiones de pitching… De la residencia de Cannes me llevo una biblia y el guion del capítulo piloto de ‘1999’, todo escrito en inglés, en mi caso lo tengo también en español. Desde que empecé a participar en foros y laboratorios, he recopilado muchas visiones sobre mi proyecto que me han permitido encontrar el personaje más atractivo, el que más gustaba a personas distintas. También he podido observar que el gancho de ‘1999’ está en mantener ese personaje en un universo auténtico y real.
Además de las mentorías en sí mismas, hemos podido acudir a clases magistrales que se han celebrado durante el festival Canneseries, como la de Mike White, creador de ‘The White Lotus’, porque los residentes hemos podido participar en CANNESERIES Writers Club, otro evento para unos 50 guionistas internacionales. Ha sido muy enriquecedor entrar en contacto con escritores de tantos países y con tantos proyectos, me llevo muchas lecciones.”
A451: ¿Crees que ‘1999’ ha cambiado mucho desde su concepción inicial a ahora, después de pasar por la residencia?
A.C.: “Hoy en día ‘1999’ es un drama coming-of-age, de época, honesto, realista, de ocho capítulos de 25 minutos. También tengo preparada una versión en formato largometraje. Gracias a la residencia, he podido encontrar los puntos fuertes de la historia y desarrollarlos. La protagonista de ‘1999’ tiene que entender que, por mucho que huyas cientos de kilómetros, no puedes huir de ti mismo.”
A451: Me comentabas que en principio erais ocho residentes seleccionados, pero uno de ellos decidió no continuar…
A.C.: “El desarrollo es una etapa solitaria, pero creo que la residencia es un acierto, la inmersión es necesaria para encontrar tu camino, para generar confianza en ti mismo, estamos en un programa que fomenta los proyectos de autor porque la residencia trata de impulsar nuevos talentos, nuevas voces, ya sabes que hay mucha necesidad de nuevas historias y para eso hay que formar a nuevas generaciones de guionistas. Durante la residencia te das cuenta de que te obliga a estar full-time y un compañero tenían otros trabajos que no podía desatender.”
A451: ¿No es peligroso, siendo guionista, ver otras series y películas y plagiarlas sin querer?
A.C.: “Parto de experiencias personales que después encuentran su forma, así que tengo que ser muy honesto con lo que estoy escribiendo, necesito hacer mucha investigación antes de plasmarlo. Empiezo con un cuento, pienso en imágenes icónicas que siempre van a ser el punto de partida y a las que volveré cuando sienta que estoy perdiendo el camino, o que me estoy contaminando de otras series y películas que estos viendo. En mi corcho tengo muchas fotografías y dibujos que he hecho yo mismo que me sirven para recordarme a mí mismo qué colores y qué texturas quiero para mi serie.
De todas formas, estoy de acuerdo con ver todo lo que puedas, malo y bueno, que te guste y que no te guste. Si lo que estás escribiendo no es original, habrá quien te lo diga. Durante los meses que he pasado en Cannes, he tenido que prescindir de muchas cosas, pero no he dejado de ver Netflix.”
A451: ¿En qué otros proyectos estás trabajando?
A.C.: “Estoy desarrollando el guion de un thriller, el largometraje ‘Mirada de vidrio’, tiene por protagonista a un oscuro vigilante de cámaras de seguridad que se obsesiona con su vecina de enfrente, procedente del sur de Asia. Presenté el tratamiento a un concurso de guion que celebran todas las universidades y escuelas de cine de Latinoamérica, lo presenté desde Argentina y quedé finalista. Además, conseguí la ayuda al desarrollo del gobierno de Aragón, como pasó ya con ‘1999’.”