Uno de los momentos más emotivos del pasado Festival de Málaga fue la entrega de la Biznaga de Plata a la mejor película española de la sección Zonzine del certamen, que recayó en ‘Lugares a los que nunca hemos ido’, de Roberto Pérez Toledo, el cineasta canario fallecido unos meses antes.
El filme también fue distinguido en el Festival Málaga con la Biznaga de Plata a la mejor interpretación masculina de Zonazine para los actores Pepe Ocio y Sergio Torrico. ‘Lugares a los que nunca hemos ido’ es una película íntima que propone al espectador un viaje a través de distintas formas de relacionarnos en la edad adulta.
Con guion del propio Pérez Toledo, el reparto lo encabezan Belén Fabra, Francesc Corbera, Pepe Ocio, Verónika Moral, Emilio Buale, Ana Risueño, Sergio Torrico, Miguel Diosdado, Laura Rozalén y Andrés Picazo. Corbera es además el productor de la última película de Roberto Pérez Toledo, a través de su nueva compañía Deep Entertainment.
Audiovisual451: ¿Cómo defines el concepto de producción de Deep Entertainment?
Francesc Corbera: “Deep Entertainment es mi proyecto personal que básicamente nace de la idea de construir un producto desde la mirada del actor y desde la personalidad del lenguaje de un director. Lo que queremos es poner todo el peso de la historia en el mundo interior de los personajes y luego buscar directores que tengan una personalidad especial o un lenguaje propio para proponerles un terreno menos común para ellos, que les suponga un reto. En esa idea se construye el proyecto Deep Entertainment, que es una productora que tiene vocación independiente en el sentido de creativo, porque nuestra idea es también poder hacer alianzas con otros productores y agentes del sector, vamos, que venimos a la industria para sumar. Se llama Deep porque queremos profundizar en aspectos humanos de la vida a través de las interpretaciones y los actores y Entertainment porque buscamos un lenguaje entretenido a través de la mirada de directores con entidad propia».
A451: ¿‘Lugares a los que nunca hemos ido’ es la primera producción de Deep Entertainment?
F.C: “Sí, es nuestra primera producción. Es un proyecto que hubiera querido hacer más adelante, pero la vida me ha obligado a hacerlo ahora. Tristemente, teníamos una segunda película planeada con Roberto Pérez Toledo”.
A451: ¿Cómo decides embarcarte en esta producción?
F.C: “Yo no pienso en términos de “hay que contar una historia”, yo pienso en términos de actor y entonces lo que pienso es: “tengo la necesidad vital de hablar de este tema y tengo la necesidad de investigar lo que me está pasando a través de un personaje”. A partir de ahí, surge la idea que me lleva a conceptualizar una película y esa conceptualización me lleva a un director determinado. Pensé que en la distancia corta Roberto Pérez Toledo era el mejor para esta película, porque tenía su propio lenguaje».
A451: La película es también un retrato generacional…
F.C: «Estoy en un momento vital donde necesito contar eso, tengo ganas de investigar sobre ello y me hago muchas preguntas vitales sobre lo que está pasando en mi entorno y a mi generación. De ahí nace la inquietud de querer retratar esa generación y de querer retratar este dilema existencial que está de fondo en la película: cómo enfrentarse a una realidad que poco tiene que ver con lo que uno había soñado. Roberto vibró también con la historia y la llevó hacia su terreno con sus propias inquietudes”.
A451: ¿Cómo levantas la financiación?
F.C: “Creo que la industria audiovisual está en expansión. Una industria en expansión es como una acordeón que se abre y tienen que aparecer nuevos agentes con nuevas miradas, nuevas empresas que cumplan nuevas funciones en el mercado y nuevas maneras de pensar. Tengo la impresión de que el sector privado está más predispuesto ahora a entrar en el audiovisual, entonces nosotros hemos diseñado un sistema a través de inversión privada para hacer películas con presupuestos ajustados. Por lo menos esta película la hemos hecho así, de manera independiente, y la hemos financiado a través del sector privado.
«Pero tenemos claro que no siempre vamos a poder hacer eso, ahora, por ejemplo, estamos pensando en la siguiente película, que es más grande y estamos abordándola de una manera más convencional, hablando con otros productores, con distribuidores o con la idea de hacer alguna preventa con alguna cadena de televisión. Yo creo que tener una mirada más abierta te ofrece nuevos escenarios y nuevas maneras de financiar”.
«Ahora están saliendo productos de muy buena calidad desde productoras y distribuidoras independientes. Realmente creo que las plataformas acabarán por tener mucho más en cuenta este tipo de productos, creo que estamos destinados a entendernos, será positivo para todos y sobre todo nos necesitamos mutuamente».
A451: ¿Tenéis ya distribución para ‘Lugares…?
F.C: «Los premios del Festival de Málaga son un buen espaldarazo y al final son un aval de calidad, pero no tenemos nada cerrado de momento. La exhibición en salas es el terreno mas castigado de la industria, estamos mirando opciones y esperamos que pronto podamos tener algo concreto».
«Nuestra estrategia fue ir a Málaga sin nada, porque yo estaba convencido de que ahí íbamos a reforzarnos. Si por ejemplo hubiéramos cerrado la distribución un mes y medio antes, creo que en la mesa de negociación estaríamos completamente vendidos y ahora tenemos el aval de un festival y la película está despertando muchísimo interés. Empresarialmente soy muy transgresor, pienso que no hay una manera correcta de hacer las cosas, hay que estar dispuesto a buscar nuevas maneras, pero eso también conlleva un riesgo grande y hay que asumirlo, sin embargo pienso que nos ha salido bien».
A451: Desde el punto de vista personal, después de la pérdida de Roberto, ¿qué supuso subir al escenario en Málaga para recoger un premio?
F.C: “Pues fue una sensación entre mágica y triste, mágica por todo lo que Roberto y yo conseguimos cumplir y mucha tristeza por no tenerle a mi lado. También de una gran responsabilidad por tener que dar un lugar a la mirada de Roberto, porque este era un proyecto donde habíamos juntado dos miradas, la suya y la mía. Si te soy sincero, disfruté más entre bambalinas, después de recoger el premio. A partir de ahí, ya me pude relajar y empecé a disfrutar. Me lo pasé muy bien en el Festival, pero sí que sentía un poco la carga emotiva, la responsabilidad… teníamos todos muy presente a Roberto, al mismo tiempo también fue mágico”.
A451: Y a nivel de público, ¿Cómo fue la acogida en el Festival?
F.C: “Espectacular. Una de las cosas que más nos sorprendió fue cómo gente tan dispar venía a compartir sus opiniones y veías cómo les había emocionado, cómo les había afectado la película”.
A451: ¿Teníais claro que la película debía estar compuesta por varias historias?
F.C: “Fue una especie de working progress. Teníamos la idea clara de que fueran varias historias, con varios personajes y una estructura diferente. A Roberto le encantaba hacer cortometrajes, pero no quería que la película fuera juntar varios cortometrajes, sino construir una película a través de los diferentes relatos. Entonces él y yo trabajamos muy a fondo para construir ese viaje».
A451. ¿Cómo fue esa construcción?
F.C: «Hicimos un bloque de rodaje por partes, para poder ir viendo ese viaje. Por ejemplo, tras grabar varias historias, descansamos, y después de un mes, grabamos el final. Teníamos una idea inicial, pero siempre estábamos muy vivos, dispuestos al cambio”.
A451: ¿Y cómo fue este rodaje en plena pandemia?
F.C: «Para que te hagas una idea empezamos a grabar en enero y terminamos en mayo, pero porque parábamos mucho. Le dábamos mucho tiempo a la preproducción, para luego grabar lo más rápido posible, porque estábamos en pandemia. Había mucho riesgo, de repente de un día a otro había que cancelar… había mucha presión. Lo que más nos presionó fue el tema del Covid, sin duda. En definitiva, fue un rodaje muy particular porque hicimos mucha preproducción para grabar lo más rápido posible y trabajamos con lo estrictamente necesario».
A451: ¿Y dónde se rodó?
F.C: “La película se rodó en Madrid. De hecho, es importante porque Madrid es el telón de fondo de la película y está muy presente sin estarlo. Era importante crear este personaje que no se ve visualmente, pero que está ahí y tiene su incidencia. El final lo rodamos en el parque del Oeste de Madrid, en la Rosaleda de Ramón Ortiz, que es uno de los más míticos de Madrid. Viendo el final de la película ‘El padre’, que termina con ese plano donde abre la ventana y acaba en el bosque, le dije a Roberto: “ya está, tenemos que grabar el final en la naturaleza”. Yo tenía la idea de que íbamos a grabar en un bosque, pero luego por producción no pudimos. Entonces le hablé a Roberto por esta localización y me dijo que tenía que ser ahí, porque había una estatua que se llama ‘Estatua de la Juventud’ y que nos iba a quedar genial. Creo que conseguimos un final muy sencillo y muy bonito que lanza un poco la película a la vida y da el sentido que queríamos. También el encuentro metafórico de las segundas oportunidades».
A451: ¿Y cómo llegáis a ese reparto?
F.C: “Una cosa importante que le dije a Roberto fue que en Deep Entertainment los actores son el centro de todo y que yo quería un tipo de actor muy concreto. Conocía mucho trabajo de Roberto y el me conocía a mí, entonces fue muy fácil porque los dos lo teníamos claro. De hecho, hay muchos actores que he elegido que ya habían trabajado con él, con lo cual eran siempre un sí rotundo. Y luego él me ofrecía actores que también pensaba que me iban a gustar. Lo hicimos entre los dos con mucho respeto».
«El puzle empezó conmigo, con Belén Fabra y Pepe Ocio, que eran dos actores de mi confianza absoluta y al mismo tiempo, Pepe había trabajado con Roberto. A partir de ahí, fuimos construyendo todo el reparto con el objetivo de encontrar esas diferentes miradas generacionales”.
A451: El hecho de que hubiera premios en Málaga para alguno de los integrantes del reparto hace pensar que habéis acertado…
F.C: “Sí, de hecho Roberto y yo teníamos la convicción de que a lo mejor algún actor se llevaba un premio. Hay una cosa unánime en el sector y es un reconocimiento al alto nivel interpretativo de la película. Además, creo que Roberto era un grandísimo director de actores”.
A451: ¿El estreno lo tenéis previsto para este año?
F.C: “Estamos viendo cómo hacerlo, nos gustaría para después del verano, encajarlo antes de final de año”.
A451: ¿Y la idea siempre sería estrenar en cines?
F.C: “Tenemos presente lo difícil que es ir a los cines ahora, pero siempre vamos a hacer un esfuerzo para tener una presencia en las salas aunque sea testimonial. Vamos a pelear por que se pueda ver esta película en pantalla grande. Otra cosa es lo que pueda pasar después, que nos pidan unos riesgos que no podemos asumir y que de repente la única opción sea un estreno online”.
A451: ¿Y va a ir a algún otro festival?
F.C: “Sí, se está presentado en algunos festivales y la idea es pasar por todos los posibles. El objetivo es que la película tenga la mayor vida posible en todos los frentes y en todas las ventanas. Porque si no hubiéramos roto todas las reglas, esta película no se habría hecho y al final creo que hemos hecho una película que merece la pena ser vista. No hay una sola manera de hacer películas, hay que trabajar mucho y tener cabeza para ello, pero hemos hecho una película muy sencilla, muy honesta y profunda, pero que es entretenida, tiene pulso y a la gente le gusta. Te hace pasar un buen rato y creo que te da más de lo que te exige. Tiene su personalidad y todo el mundo se ve reflejado de una u otra manera».
A451: ¿Qué será lo próximo de Deep Entertainment?
F.C: “Pues tenemos una película con la que estamos muy ilusionados. Se trata de un género completamente diferente. No lo tengo cerrado, pero estoy trabajando para cerrarlo en breve y si no, pues con calma, porque también sigo centrado en mi carrera como actor. No hay prisa, Deep Entertainment es un espacio que tiene que ir cogiendo su propio camino. No es una productora que viene a competir con nadie, cuando surja algo que tengamos la necesidad de hacer, pues se hará. Si eso surge dos veces al año, será dos veces al año y si eso surge una vez cada tres años, pues así será. No voy a forzar mucho, pero es verdad que ahora se están abriendo muchas posibilidades”.
A451: Y esa próxima película, ¿sería para rodar este año?
F.C: “Sí, sería para rodar a finales de año, porque ya la tenemos bastante armada, está bastante avanzada, pero todavía no lo tengo claro. Me tengo que recuperar emocional y anímicamente”.
