La historia detrás de ‘La prima cosa’

Omar Al Abdul Razzak Y Shira Ukrainitz

El cortometraje de animación (y documental) nominado a los Premios Goya 2023, ‘La prima cosa’, de los directores afincados en Canarias, Omar Al Abdul Razzak (Madrid, 1982) y Shira Ukrainitz (Tel Aviv, 1990), está basado en la historia real de Johnny Khbeis, árabe cristiano ortodoxo israelí, que visita a niños sirios ingresados en los hospitales de Israel por la guerra, en su faceta de payaso, llamado Kookoo Rikoo.

Producido por Tourmalet Films, Amalia Studio y Midralgar, Los diálogos son reales, grabados por Omar y su equipo al protagonista de ‘La prima cosa’, convertido en un personaje de animación por Shira Ukrainitz, para que fuese posible contar su historia. Así lo explican sus directores en palabras de Omar:

Manuel Arango, productor, y los directores y productores Shira Ukrainitz y Omar Al Abdul Razzak.

A finales de 2016, cuando se le acabó la visa de turista a Shira, decidí ir tras ella y pasar una temporada en Israel. Ella es de allí, oficialmente judía secular, y creí conveniente conocer a su familia y sus costumbres.  Lo que para ella es Israel, para mí siempre había sido Palestina. Aún hoy cuando escribo o hablo con mi padre, él siempre me corrige: “- Palestina querrás decir. – Sí, eso claro.” Mi padre vivió la Guerra de los Seis Días. Y también vivió la Guerra de Yom Kippur; ambas guerras enfrentaron a Siria e Israel.  Como oficialmente soy sirio resulta que actualmente estoy en estado de guerra con Israel, y por lo tanto, con Shira.

Una vez allí me resulta muy extraño estar a muy poco kilómetros de la guerra de Siria, donde aún tenía primos y tíos viviendo. Traté de encontrar algo que me acercase a ellos y lo encontré en la frontera, cerca del Golán ocupado. Un hospital adonde una ONG había logrado traer niños heridos de la guerra. Y es allí donde conocemos al protagonista, Kookoo Rikoo, quien, al ser árabe se dedicaba a hacer de intermediario entre los médicos de Israel y los niños sirios.

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Lo cierto es que, en España, casi nadie sabe poner en el mapa a Siria, Líbano, Turquía, Palestina o Israel. Saben que por ahí pasan cosas pero tampoco saben bien qué. Entonces decidimos tratar de contar un poco lo que estaba ocurriendo de manera que la gente lo pudiese entender con facilidad.

Estuvimos yendo y viniendo varios años. Acumulando material real y entrevistas. Pero dentro del hospital no nos dejaban grabar con cámaras. Así que las ilustraciones que en principio fueron una solución práctica se convirtieron en una herramienta expresiva que nos ayudaba a llegar más allá del documental, traspasar la realidad y hacer un trabajo más personal. Shira es ilustradora y animadora así que la combinación resultaba natural.

El estreno en Annecy fue muy emocionante porque pudo venir Johnny, el payaso. Para él, era importante que esta historia fuese contada y que llegase a mucha gente. Pero también sentía que su trabajo era importante y que por lo menos nosotros se lo agradecíamos. Además, el cortometraje cuenta con banda sonora compuesta por Oliver Arson, habitual colaborador de Rodrigo Sorogoyen, ganador de un Goya y, este año, de nuevo, elegido para optar al premio.

Ahora, con la nominación de ‘La prima cosa’ como mejor cortometraje de animación, lo que más nos interesa es que esta historia llegue al máximo número de gente posible. Es complicado porque es en árabe y la gente no está acostumbrada a leer subtítulos, pero creo que es una historia que, aunque dolorosa, es esperanzadora.

*Omar Al Abdul Razzak y Shira Ukrainitz tuvieron a su hijo Noé en abril de 2019 y toda la historia que envuelve a Johnny Khbeis en La prima cosa, tomó más fuerza. Así lo cuentan:

Nuestro hijo podría tener tres pasaportes. Con el sirio, apenas puede viajar a ningún lugar; con el israelí́ no puede entrar a casi ningún país árabe, entre ellos Siria; con el español casi puede recorrer el mundo entero. Medio judío, medio musulmán, viviendo en un país cristiano… En cierto manera se asemeja a nuestro protagonista, Johnny Khbeis. Una persona real que, detrás de la identidad del payaso Kookoo Rikoo, esconde una gran cantidad de identidades religiosas y culturales.

De fronteras, de identidad, de la guerra. De las cosas importantes… de todo esto queríamos hablar en ‘La prima cosa’.

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