Ben Fernández dirige ‘Mortelli, un cas perdut’, cortometraje de animación de 18 minutos producido por Beamos Producción y Jaibo Films. Disponible en dos versiones, valenciano e inglés, su protagonista es un detective jubilado que debe afrontar un último caso.
Luis Francisco Zaragoza encarna al descuidado detective Colombo, residente en Chicago, quien cree que su mujer le ha abandonado porque en los últimos tiempos se ha volcado en las apuestas y la bebida. Completan el reparto Fina de la Torre como Gloria, la severa esposa del protagonista; Leandro Mañana como el comisario Rowley, viejo amigo de Mortelli y pionero en su oficio; Dolores Cardona como Virginia Hill, una de las mujeres de negocios más importantes de la vida nocturna de Chicago; Jose Luis Jaén como Al Copone, el capo de la mafia por excelencia; y Sara López como Samantha High, una intrépida agente del FBI que viaja por el tiempo investigando casos no resueltos y que se infiltrará en la banda de Copone para eliminar de una vez por todas al criminal.
El guion y la animación de ‘Mortelli, un cas perdut’ corren a cargo del propio Ben Fernández, especialista en animación a partir de recortes fotográficos. En 2016, estrena el cortometraje ‘The Stunt Manual’ junto a la productora Jaibo Films, y dos años después, termina ‘Miss Mbulu’, un nuevo corto de animación a partir de la misma técnica, que consiguió la preselección a los Premios Goya y el premio al mejor corto de animación de la Comunidad Valenciana, de parte de la AVAV. Además de su pase en festivales nacionales e internacionales, sus cortos se han podido ver en Movistar Plus+.
En palabras de su director, «‘Mortelli’ es mi homenaje personal a todo el cine y series de televisión de detectives de los años 70 y 80. Cuando empecé a escribir la historia, no quería dejar escapar ningún detalle: el detective alcohólico y solitario, el jefe de policía cascarrabias, un asesinato en los bajos fondos… Más adelante, me di cuenta de que tenía que introducir algo nuevo, un giro que hiciera de ‘Mortelli’ un corto único y especial. Entonces, pensé que podría estar bien introducir los viajes en el tiempo.»
«El blanco y negro, a su vez, me dio la idea de aproximarme también al cine negro, otro de los géneros que me interesa homenajear, siempre relacionado con las escenas nocturnas, los gánsteres y los tiroteos, pero con un toque de humor y frescura», añade Fernández. «Creo que es importante mantenerme fiel a la técnica de animación que utilizo, basada en componer mediante el uso de retoques fotográficos extraídos de Internet. Su atractivo visual se basa en su aire disparatado, aunque pienso que puede ser muy apropiado para este corto un tono serio a la hora de narrar los acontecimientos. La banda sonora, basada en la música jazz, también juega un gran papel en esto.»
‘Mortelli, un cas perdut’ cuenta con la producción ejecutiva de Bea Martínez, Miguel Molina y Adán Aliaga. El equipo está formado por Daniel Ortega como jefe de animación, Cristina Vaello y Gema Amador como animadoras, Miguel Garví en el montaje, Miguel Zaragoza Mayor encolor, y Jaime Zaragoza Mayor a cargo de la banda sonora. La postproducción de sonido ha sido un trabajo de RCAudio.
En palabras de la productora ejecutiva Bea Martínez, «ha sido un placer poder apoyar la producción del tercer corto de Ben. Su técnica es muy laboriosa y particular, y hace que sus obras sean muy diferentes a lo que estamos acostumbrados. A diferencia de sus anteriores trabajos, esta vez, en lugar de tener un idioma imaginario, los personajes hablan y cuentan una historia. Esa elección hizo que los procesos fueran más largos, incrementando el metraje del corto y los procesos de animación y postproducción. Por ejemplo, primero se usó una locución básica para después realizar el doblaje final donde se tuvieron que ajustar las bocas (hay una versión para distribución nacional en valenciano y en inglés para la distribución internacional). Ha sido, a pesar de todo, un proyecto muy divertido porque fuera de los protagonistas, amig@s del director y compañer@s participamos cediendo nuestra cara para dar vida a todo el universo de personajes.»
‘Mortelli, un cas perdut’ comienza a tomar forma gracias a un premio de la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Alicante, “Visual Buit”. Posteriormente, obtuvo la ayuda del IVC-Institut Valencià de Cultura y el apoyo de la televisión autonómica valenciana À Punt Media.
«Creo que tanto mis compañeros de Jaibo como yo misma, creemos que es interesante apostar por este tipo de historias donde la animación es una herramienta que te da libertad para contar historias dirigidas al público adulto. Es un abanico de creación que permite cosas imposibles en la ficción. Es cierto que los tiempos son completamente diferentes al igual que los costes, pero el anime ya tiene muchos años de existencia, y en España también se pueden crear y producir este tipo de obras con éxito tanto cortometrajes como largometrajes y tenemos interesantes ejemplos como las obras de animación que ganaron el Goya en la pasada edición», reflexiona la productora ejecutiva.
Su recorrido en festivales
La obra ha pasado por los festivales de Málaga, Lanzarote, Alicante y Elche, en este último, el director repitió al ganar Mejor Cortometraje de Animación, como ya sucediera con su anterior trabajo. «La selección en festivales calificadores ha sido fundamental para lograr el pase a los Goya», comenta Martínez, a la vez que destaca la distribución en el catálogo de Curts de 2024, «un apoyo fundamental para dar visibilidad al corto a nivel nacional e internacional.»
‘Mortelli, un cas perdut’ ha recibido el premio SYFY en la Semana de Cine Fantástico y de Terror de Donostia, el tercer premio en el Concurso Nacional de Cortos del Festival de Cine de Rivas y a nivel internacional en Jakarta Film Week.
‘Mortelli’ se proyectará este jueves 21 de noviembre en la Academia de Cine en Madrid a partir de las 16.00 horas, dentro del ciclo que la institución está celebrando con los cortometrajes inscritos en la 39ª edición de los Premios Goya. Está también en Filmin.
Sinopsis
Al detective Mortelli, amigo del juego y el alcohol, no le está sentando nada bien la jubilación. Justo el día que su mujer le deja, recibe una llamada del comisario Rowley que le asignará un último caso, tal vez el más extraño y emocionante de su carrera.