Ha tocado para emperadores y ha puesto en pie estadios llenos de fans del rock más heavy. Eso además de ser amigo personal de Ovedito, el oso cinéfilo. Hablamos de Yoshiki, el compositor del tema de los Globos de Oro, más conocido por ser el fundador y batería del grupo de heavy metal X Japan y que ahora comienza una gira mundial con su nueva faceta artística: pianista clásico.
En Asia es un fenómeno que no deja de reinventarse después de alcanzar la fama en la década de los 80. Su deseo: ser el batería de Mozart. Bueno también quería ser estrella del rock como dijo en su informe escolar cuando era todavía un chaval. Se rieron de él. Ahora la estrella japonesa es la que se ríe triunfal con su carrera con X Japan.
Tan sólo una faceta de su ecléctica discografía en la que ha colaborado con George Martin, productor musical de los Beatles, con el batería de Queen, Roger Taylor, y ha tocado en presencia del emperador nipón.
Sólo era cuestión de tiempo que probara su suerte en Hollywood, algo que lleva años haciendo sin necesidad económica, invirtiendo en su propio estudio de grabación donde produjo el tema que compuso para la entrega de los Globos de Oro.
Él lo llama empezar por la puerta grande, o ponerse el listón muy alto pero el reto le pone. Así que mientras espera que se materialicen sus planes de conquista de Hollywood se ha lanzado en una gira mundial por 10 países que concluirá su primera etapa en el Albert Hall de Londres con su concierto Yoshiki Classical.
Nos invitó a estar con él en el anuncio de su gira, en el museo Grammy de la música en Los Angeles y de nuevo compartimos con este “Liberace japonés” sus ensayos en los estudios Sony antes de salir de gira.
Que conste que además de ser un músico singular, Yoshiki también es un friki incomparable. Alguien que además de contar con su propio vino y su propio perfume, Larme, es amigo personal de Stan Lee, cuenta con su propio cómic y además es la única estrella que cuenta con su propia muñeca “customizada” de Hello Kitty o Yoshi-Kitty, como la llama. Una gatita de la que, para qué negarlo, Ovedito se quedó prendado.
Así que aquí os dejamos con una pequeña muestra de su música melódica.
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