Es claramente una debilidad, de Raimundo Hollywood y de Ovedito, el oso cinéfilo. Hablamos de la Comic-Con. Pero no es tan fácil decirle adiós a tal convergencia de frikismo y entusiasmo como la que anualmente se produce en San Diego. Así que aquí os dejo con nuestras recapitulaciones de este año.
1.- No hay nada como las fiestas de la Comic-Con: Por ejemplo, la que le hicieron a Nikolaj Coster-Waldau en el Hard Rock Café de San Diego. Allí estuvieron todos sus compañeros de ‘Juego de tronos’ para cantarle el cumpleaños feliz además de Samuel L. Jackson y Channing Tatum, que pasaban por allí y les va la juerga. ¿Qué le regala uno a un Lannister? Un pastel en forma de pene. Y como guinda, se le felicitan los 50 aunque el bueno de Coster-Waldau sólo cumplió los 44.
2.- Los zombis son peligrosos: O que se lo digan a la mujer que resultó atropellada durante el “zombi-walk” o paseo de zombis que se celebra anualmente en las inmediaciones de la convención. Una familia de sordos se vio sorprendida por la marcha mientras conducían. Los golpes de los zombis contra los cristales del coche no hicieron más que asustar a sus ocupantes que intentaron darse a la fuga de esta muchedumbre con pinta de muertos acelerando y golpeando a la víctima en el brazo en su huida.
3.- Hay que pensar cuanto antes el disfraz para el año que viene que la competencia es dura. Daniel Radcliffe se paseó por los puestos de cómics vestido de Spider-Man, lo mismo que Maisie Williams, mientras que Peter Jackson lo hizo vestido de The Jester. Y encima lego las publicaron en sus cuentas de Facebook e Instagram. Pero el mejor sigue siendo el disfraz de Bryan Cranston del año pasado cuando se disfrazó de Walter White. Genial.
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