Eurodata TV Worldwide acaba de publicar un nuevo informe, esta vez centrado en la industria de las series de ficción, que lleva varios años al alza. La producción original, los títulos locales y la coproducción han ganado terreno durante 2017, el año en que las series estadounidenses se han visto más amenazadas que nunca por las europeas, especialmente las británicas.
No cabe duda de que el género de la ficción seriada impulsa los datos de audiencia en la franja de prime time en muchos países. Dinamarca, Estados Unidos y Turquía son tres buenos ejemplos de este hecho.
«El éxito de las series ha abierto una fuerte competencia entre los creadores de contenidos. Los espectadores demandan nuevos títulos, más originalidad. Nunca ha habido tantas nuevas creaciones entre lo más visto en televisión que en 2017» comenta Abed Laraqui, responsable de investigación en la consultora francesa Eurodata TV Worldwide.
En los últimos tres años el mercado de las series ha cambiado radicalmente, hasta el punto de que en 2017 tres de cada diez series son originales. El 70 por ciento de las series se emiten en canales principales, los títulos sobre crímenes se han convertido en las protagonistas por encima de las históricas y proliferan las ficciones con menos capítulos pero de mayor duración.
También se observa un crecimiento del consumo de series en otras pantallas que no son la televisión, como smartphones, tablets y ordenadores. Se ven online, una vía que se utiliza especialmente para ponerse al día y ver el último capítulo emitido en televisión, algo que sucede con este género de la ficción más que con cualquier otro. Por ejemplo, en Holanda la serie ‘Flikken Maastricht’ o ‘Clem’ en Francia ven aumentada su audiencia notablemente por estar disponibles online.
Aunque hay una gran circulación de series por todo el mundo, las producciones locales ganan con aprobado general en todos los territorios. Son las que más emisiones acumulan y las más vistas: en 2017 más de la mitad de las series programadas para el prime time en los principales canales analizados eran producciones nacionales. Incluso el fenómeno va más allá: casi todo el Top 10 de series de cada país del estudio se corresponde con series producida en el país. Dinamarca, Italia e Israel son los países donde más triunfa la ficción local.
Sin embargo, aun siendo líderes, estas series nacionales descendieron ligeramente durante 2017 en lo referente a cantidad de horas emitidas y a audiencia. La fragmentación sigue haciendo de las suyas.
Este leve descenso ha ido en favor de las series coproducidas por varios países, un formato de financiación que va ganando terreno, de hecho, el 10 por ciento de las series más importantes de 2017 son coproducciones, lo que supone un aumento de cuatro puntos con respecto al año anterior. Estas series son especialmente populares cuando los países que coproducen comparten idioma e incluso tradiciones culturales, porque les permite llegar a más audiencia y de una manera más natural. Por ejemplo, es el caso de ‘Als de Dijken Breken’, coproducción entre Bélgica y Holanda. Luego hay casos sorprendentes, como el de la serie ruso-portuguesa ‘Mata Hari’, con éxito en Pierviy Kanal.
Además de las series nacionales y las coproducciones, las series de terceros países siguen representando una buena parte del share en todo el mundo. Pero el origen de estas historias que triunfan internacionalmente va cambiando, dado que las series estadounidenses están seriamente amenazadas por las europeas, en concreto, por las británicas. Éstas son muy populares en los países nórdicos, por ejemplo, ‘The Halcyon’ ha sido un éxito en Suecia, donde ha ocupado la séptima posición del Top 15.
Europa Central sigue siendo muy fan de series estadounidenses como ‘NCIS’ o ‘Anatomía de Grey’, que pueden considerarse ya un clásico de centenas de parrillas de televisión de todo el mundo.