Aragón TV se tiraba a la piscina en 2019 con la producción de su primera serie de ficción. El resultado ha sido ‘El último show’, una historia de ocho capítulos creada por Álex Rodrigo, el director de varios episodios de ‘La casa de papel’ o ‘El embarcadero’.
Todo en torno a ‘El último show’ suena arriesgado, casi imposible. Estamos ante una serie de ficción sobre Miguel Ángel Tirado, un nombre propio que apenas le dice nada a nadie, pero si dices «Marianico el corto», la cosa cambia. En pleno siglo XXI. Con la financiación de una televisión pública autonómica de presupuesto limitado que nunca antes ha producido ficción. Y encima se cierran los titulares con que la serie es adquirida por HBO España.
Una cadena de hitos y responsabilidades que ha sacado el lado más patrio de los aragoneses. El capítulo de estreno, a finales de febrero en prime time, fue visto por 116.000 espectadores y una cuota media de pantalla del 23,1 por ciento en la región, por encima del inicio de ‘Supervivientes’ de Telecinco. Además, Aragón TV ha vendido los derechos de emisión a otras cadenas autonómicas (TV3, TVG, EiTB, RTPA, RTVC, Canal Sur y Extremadura Televisión) y también a HBO España, plataforma en la que ‘El último show’ se puede ver desde el 17 de abril.
En la serie que Álex Rodrigo empezó a imaginar de niño y ha escrito junto a Sara Alquézar y Enrique Lojo, Miguel Ángel Tirado atraviesa una crisis personal, quiere huir del personaje que hace treinta años le dio la fama y repasa su infancia perdida. A la vez, su nieta adolescente vivirá su propia catarsis personal.
‘El último show’ está protagonizada por Miguel Ángel Tirado, Luisa Gavasa, Itziar Miranda, José Luis Esteban, Pablo Lagartos, los jóvenes Laura Boudet y Denis Cicholewski, Ken Appledorn y Laura Gómez Lacueva, con la colaboración especial de Armando del Río, María Isabel Díaz y Rubén Martínez. Cuenta además, con numerosos cameos e intervenciones especiales como las de Álvaro Morte, José Lifante, José María Rubio, el señor Barragán, Marisol Aznar, Chavi Bruna, Nacho Rubio, Manolo Kabezabolo o Luis Larrodera.
Zaza Ceballos se ocupa de la producción ejecutiva de la serie, junto al propio Álex Rodrigo, Jaime Fontán y Silvia Gómez Jordana. Carlos Val dirige algunos de los capítulos, mientras que Mario López ejerce de director de fotografía.
En entrevista con Audiovisual451, Álex Rodrigo comenta los retos y los hitos de ‘El último show’. El director forma parte de la cartera de talento de Alter Ego Talent House, agencia de representación de Anxo Rodríguez que acaba de lanzar la incubadora ESPotlight, protagonista de la actualidad estos días tras firmar un acuerdo con la compañía estadounidense Legendary Global.
Audiovisual451: Álex, tengo entendido que ‘El último show’ es tu proyecto soñado
Á.R.: «Sí, puedo decir que ‘El último show’ es un proyecto que nace en mi infancia. Siendo niño, el colegio nos llevó a visitar la televisión autonómica de Aragón y allí estaba Marianico el corto, es decir, Miguel Ángel Tirado. Por aquel entonces era una persona muy popular en Aragón porque estamos hablando de la época de ‘No te rías que es peor’. Recuerdo que un grupo de niños nos acercamos a él y en lugar de contarnos un chiste, se puso reflexivo y nos dijo: «Fijaos en lo inmenso que es el universo y lo pequeño que es el ser humano». A todos nos explotó la cabeza, a mí el que más y desde entonces le he dado muchas vueltas al personaje de Miguel Ángel Tirado. Así es como nace ‘El último show’.
En la serie he mezclado la metafísica con el surrealismo de Luis Buñuel, me resultaba más fácil tirar de esos recursos para construir un relato dramático en torno al personaje de Miguel Ángel Tirado. Este proyecto lo he contado muchas veces en mis círculos pero nunca pensé que pudiera tener suficiente interés por estar centrado en un personaje muy local y además es reconocible por una generación concreta.
El caso es que hace unos cuatro años me reuní con Miguel Ángel Tirado porque para poder sacar adelante el proyecto tenía que contar con su implicación, no quería ni siquiera escribir una biblia sin saber si él quería hacerlo o no. Nos pasamos tres horas hablando, me dijo que le encantaba tener un papel dramático, observé su forma de relacionarse con las fans, con otras personas del entorno y descubrí esa mirada tan tierna que tiene, esa alma tan blanca. Este encuentro me sirvió de mucho para escribir la serie y para reconducir mis ideas, dado que al principio yo tenía en mente una comedia gamberra al estilo de ‘¿Qué fue de Jorge Sanz?’, pero comprendí que iba a ser mejor centrarnos en la persona, que el propio Miguel Ángel Tirado era un diamante en bruto y el mayor valor que tenía delante de mí.»
A451: Las TVs autonómicas han invertido en ficción de manera muy tímida en los últimos años. De hecho, ‘El último show’ es la primera producción propia de ficción de Aragón TV. ¿Cómo llega el proyecto a este canal?
Á.R.: «Aragón TV es un canal que arriesga bastante, como ejemplo podemos hablar de ‘El viaje’, ese programa de slow TV que emitió hace un año. Creo que han entendido que, si hay un momento para que puedan hacer ficción, es el actual, dentro de sus posibilidades presupuestarias. Aragón TV contactó con diferentes empresas y creadores españoles pidiendo ideas para series de ficción y yo presenté ‘El último show’, pensando que sería lo último que se esperarían del director de ‘La casa de papel’. Hice hincapié en explicar el tono de la serie para que pudiera entenderse bien la premisa de «Vamos a hacer una serie de Marianico el corto en 2020″. El caso es que Aragón TV encargó varias biblias, fueron poco a poco y finalmente eligieron ‘El último show’.»
A451: ¿Cómo fue la grabación? ¿Cuáles fueron los principales retos?
Á.R.: «Uno de los retos de esta serie es reproducir con un presupuesto muy ajustado. Piensa que estamos hablando de un presupuesto que es 10 o 11 veces menor al de ‘La casa de papel’, y menciono esta serie porque pasé directamente de estar rodando la cuarta temporada a empezar los castings de ‘El último show’ en Zaragoza. Reconozco que sentía mucho vértigo, también mucha responsabilidad, no dejaba de pensar que es, probablemente, la producción más cara que ha hecho Aragón TV.
Uno de los requisitos que teníamos que cumplir es que casi todo el equipo técnico y artístico fuera natural de Aragón, lo cual no es nada fácil porque estamos hablando de una región pequeña que no está especializada en el audiovisual. Sin embargo, lo conseguimos en ambos casos, creo que los únicos actores que no son aragoneses son Ken Appledorn y María Isabel Díaz, porque sus personajes así lo requerían. Creo que buena parte de mi vértigo venía porque no había trabajado nunca con casi ningún miembro del equipo técnico y artístico.
También para Miguel Ángel Tirado era una experiencia bastante nueva, él había tenido algún cameo en alguna película pero no un papel dramático y de ficción tan protagonista como este. Por muy bien que pintara todo, hasta que no empezáramos a rodar no sabíamos cómo iban a encajar todas estas piezas. Creo que todo el equipo lo asumió como un reto y le puso mucho cariño, al fin y al cabo estábamos ante la primera serie de ficción de Aragón TV, además, rodada en la región.
Tuvimos nueve semanas de rodaje para los ocho capítulos, con cuatro semanas anteriores dedicadas a la preproducción, incluyendo ensayos con los actores.»
A451: Los responsables de Aragón TV mencionaron el casting para encontrar a la actriz que interepretara el papel de Claudia, la nieta de Miguel Ángel Tirado en la ficción. Supongo que también fue difícil encontrar a Laura Boudet…
Á.R.: «Pasaron 300 niñas por el casting para el personaje de Claudia. Yo necesitaba una adolescente con mucho mundo interior, con una mirada inteligente y reflexiva, a priori cualidades que no suelen darse en las actrices resolutivas y con desparpajo que suelen presentarse a los castings. Además era imprescindible que tuviera química con Miguel Ángel Tirado, de hecho muchas de las pruebas las hicimos en conjunto.»
A451: ¿A quién crees que le va a gustar ‘El último show’?
Á.R.: «Creo que ‘El último show’ le va a gustar a todo aquel que considere que los años 90 están muy cerca y muy lejos a la vez, que sienta de vez en cuando quiere volver a vivir en esos años.
Creo que también le va a gustar a aquellas personas que busquen una serie sin reglas ni plantillas fijas, una serie sin fórmulas de guion. Podemos decir que ‘El último show’ es una comedia dramática pero tiene más drama que risas, es una serie que escapa de muchas etiquetas empezando porque el protagonista es un hombre de 70 años. Las fortalezas de ‘El último show’ son el retrato psicológico del protagonista, el devenir de las tramas, el tono… No se puede decir que es la típica serie.»
A451: ¿Dirías que ‘El último show’ es una muestra de que no está todo inventado en televisión?
Á.R.: «El titular de «HBO compra la serie de Marianico el corto» parece de ‘El Mundo Today’. Precisamente, creo que ahí está una de sus fortalezas, el cómo coger una premisa, crear una expectación en el público y girarlo 180 grados.»
A451: Siendo un proyecto que ha ido evolucionando, cuando ves ahora ‘El último show’, ¿sientes que es la serie que querías?
Á.R.: «Está claro que si no hubiera plazos de entrega, retocas y retocas hasta volverte loco. Pero la realidad es que existe una industria que te obliga a entregar los materiales sin retocar ciertos detalles que en realidad solamente vas a apreciar tú. Ahí es cuando el producto está terminado, cuando no queda más cojones que entregar.
‘El último show’ es un proyecto que bebe mucho de Miguel Ángel Tirado y Laura Boudet, los cambios que se han realizado han sido muy a conciencia, no me he encontrado con ninguna sorpresa en la sala de montaje. Pero sí te puedo decir que yo hubiera planteado capítulos de 25 minutos, con la trama de Miguel Ángel Tirado ocupando el 90 % de la serie y no el 60 %. Una vez que asimilamos este cambio de formato y que la serie debía llegar a un público más familiar y amplio, he de decir que la serie crece.»
A451: Cada vez más personas de la industria comentan que la frontera entre series para la televisión en abierto y series para plataformas es más difusa. ‘El último show’ podría ser un ejemplo, dado que la ha producido Aragón TV y después la ha adquirido HBO España. ¿Qué opinas sobre esa frontera?
Á.R.: «Creo que la diferencia de espectador de una televisión en abierto a una plataforma de streaming es bastante notable. Quizá no sea muy popular lo que voy a decir, pero creo que somos los directores y las productoras los que queremos que esa barrera de la que hablas sea cada vez más difusa con el fin de no perder público.
Efectivamente, el ejemplo de ‘El último show’ sirve para pensar que es una serie muy de plataforma para un canal en abierto y a la vez muy generalista para HBO. Está en un limbo y no sé si eso es un acierto o un error. Creo que está bastante claro que el espectador medio de Aragón TV no está abonado a HBO, de la misma forma que una persona suscrita a HBO no suele ver Aragón TV.»
Próximos proyectos
A451: Álex, el estado de alarma por el Covid-19 te pilló en la grabación de ‘Veneno’, ¿no es así?
Á.R.: «He tenido que montar el último capítulo de ‘El último show’ en remoto, al igual que otros capítulos de ‘Veneno’. También estoy aprovechando para impulsar otros proyectos propios que tengo en desarrollo, cuatro series y dos películas. He de decir que al haber estado ocupado en las primeras semanas del confinamiento montando esos capítulos que te decía, es probable que no me haya afectado tanto psicológicamente como a otras personas. Pero sí siento que es difícil que la creatividad aflore con esta situación que estamos viviendo, me siento con más fuerza para retocar ideas en las que ya estaba trabajando pero no para enfrentarme a un folio en blanco.»
A451: Cuéntanos algo del proyecto que lleves más avanzado.
Á.R.: «Quizá esté más ilusionado con una road movie que estoy escribiendo sobre dos MENAs (Menores No Acompañados) que se escapan del centro de acogida. La idea es contar su viaje por la costa española como fugitivos y como desconocidos entre ellos, contar su forma de ver la vida y como su relación va evolucionando.
Estoy intentando generar ideas que tengan un componente entretenido y social a la vez. Como dice mi representante, Anxo Rodríguez, soy el Ken Loach divertido (risas).»
Álex Rodrigo ha facilitado la mayoría de las fotografías que ilustran esta entrevista.