Andrés Santana recogió el Premio Elías Querejeta en San Sebastián, la ciudad en la que conoció a principios de los años noventa «al gran productor que siempre he admirado y ha sido mi gran referente», y que da nombre al premio que le entregó Fernando Méndez-Leite, presidente de la Academia de Cine.
«Decía Querejeta que hay que elegir bien los proyectos fílmicos en los que uno se embarca, porque un trozo de la vida se va con ellos. Los productores saben bien las angustias y los desvelos que encierran las historias que llegan a la gran pantalla; también la creatividad, el talento y el buen hacer que requieren. Los cineastas necesitan un acompañamiento a la altura de sus sueños, y la Junta Directiva de la Academia tuvo claro que, si hay un productor en activo que representa ese compromiso, es Andrés Santana», destacó Méndez-Leite en el acto de entrega que tuvo lugar en el marco del Festival de San Sebastián.
Emocionado, Santana, que agradeció a la institución que el primer Premio Elías Querejeta –un reconocimiento a los productores que asumen riesgos en el desarrollo creativo de su oficio, apostando por la internacionalización del cine español y la carrera de cineastas noveles- recayera en su persona, recordó la comida en la que el productor vasco le preguntó cómo había llegado al cine, medio del que se enamoró viendo ‘El ruiseñor de las cumbres’, con Joselito, aunque la película por la que decidió dedicarse «a eso de hacer cine» fue ‘Las uvas de la ira’, de John Ford.
Cuando Santana le contó que, por su pasión por el séptimo arte, dejó su tierra natal, Canarias -en sus cines vio películas del Oeste, de romanos, comedias, y en las salas de arte y ensayo descubrió el neorrealismo italiano y películas «que muchos llamaban raras» del cine francés, japonés, chino, etc.- y se trasladó a Madrid, donde desempeñó numerosos oficios -vendedor de libros, camarero, figurante, ayudante de producción, productor asociado, jefe de producción, etc.-, Querejeta le dijo: «me recuerdas un poco al niño de ‘Cinema Paradiso'».
«Le comenté que éramos muy diferentes. Pero en 2012, al día siguiente del homenaje que me hicieron en mi pueblo, un periódico publicó el titular ‘Ayer vi al niño de Cinema Paradiso’, y pensé que tal vez Elías tenía razón. No éramos iguales, pero si teníamos los mismos sueños: hacer películas», manifestó el productor de ‘El rey pasmado’, ‘Días contados’, ‘El viaje de Carol’, ‘Secretos del corazón’, ‘Mararía’, ‘Blackthorn: Sin destino’ y ‘Nadie quiere la noche’, entre otros títulos.
Para Santana, que también figura en los créditos de ‘Bajarse al moro’, ‘Después de tantos años’, ‘El viaje a ninguna parte’, ‘Laberinto de pasiones’, ‘Los santos inocentes’, ‘La fuga de Segovia’ y ‘Ópera prima’, el premio concedido también es «para mi madre, a la que pedí perdón por el daño que le hice cuando me fui a Madrid sin decirle la verdad -momento en el que se quebró su voz-; para Elías; para mis dos hijos; para las mujeres que han compartido mi vida; para toda mi familia por su apoyo incondicional; y para las personas que he conocido en este maravilloso mundo y a quienes debo lo poco que soy al lado de Elías Querejeta», indicó el premiado, que citó a Diego Galán y a Manuel Pérez Estremera, «dos buenos amigos de este festival que se han ido».
Montxo Armendáriz, Enrique González Macho, Puy Oria, Mariano Barroso, Cristina Zumárraga, Marta Miró y los vicepresidentes de la Academia de Cine, Rafael Portela y Susi Sánchez, entre otros, se sumaron al homenaje a Andrés Santana, que, vía vídeo, recibió las felicitaciones de Imanol Uribe, Manolo Gutiérrez Aragón, Gracia Querejeta, Isabel Coixet, Mateo Gil, Goya Toledo y Sigfrid Monleón.
La Academia de Cine reúne a los participantes de sus programas de desarrollo
Integrantes de las distintas ediciones de los tres programas de desarrollo de la Academia de Cine –Residencias Academia de Cine, Campus de Verano y Rueda– se reunieron este lunes en el marco del Festival de San Sebastián bajo el enunciado ‘Contar con tiempo’.
El acto contó con la participación de tres creadores que han formado parte de los programas –Guillermo García López, Anna Marchessi y Mariona Guiu-, que compartieron su experiencia con los asistentes, entre los que se citaron cerca de cuarenta de sus compañeros.
«Elías Querejeta siempre supo que una parte indispensable de su misión consistía en dar primeras oportunidades. El sí o el no de la apuesta y la voluntad de un productor frente a un proyecto de alguien que empieza es lo que determina la carrera de esa persona y el mapa del cine de ese momento. Residencias, Campus de Verano y Rueda reman a favor de esos proyectos a los que los productores actuales, los Elías Querejeta y Andrés Santana del futuro, deberán conceder esa oportunidad», señaló Susi Sánchez, vicepresidenta de la Academia.
34 proyectos por venir
La próxima semana comenzará la quinta edición de Residencias Academia de Cine, que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Madrid y permitirá a veinte cineastas desarrollar sus proyectos en esta ciudad, en contacto permanente con la industria, hasta junio del 2024. «Es un placer trabajar con la Academia en las Residencias, que se ha convertido en una cita anual ineludible para creadores que quieren desarrollar su proyecto audiovisual», aseguró Matilde García Duarte, Coordinadora General de Alcaldía del Ayuntamiento de Madrid.
Con la colaboración de Netflix -servicio de entretenimiento con la que la Academia ha renovado el acuerdo para la organización de la tercera edición del Campus de Verano y el desarrollo de otras actividades que se anunciarán a lo largo del año- y el apoyo del Ayuntamiento de Valencia, el Campus de Verano acoge durante dos semanas del mes de junio a ocho creadores de colectivos minorizados o cuyos proyectos representan de alguna manera la diversidad.
«Estamos encantados de continuar trabajando con la Academia en el apoyo a nuestro sector y a sus profesionales. Seguiremos colaborando para promover una industria inclusiva, diversa y accesible a todo el talento del cine español», aseguró Mariano Barroso, director de Contenido del área de películas para España y Portugal en Netflix.
José Luis Moreno, concejal de Cultura del consistorio valenciano, declaró que «Valencia quiere seguir siendo una ciudad de cine. Para ello, seguirá colaborando en convenios con la Academia para poder realizar actividades como el Campus de Verano y en otras actividades que al final repercutan en la cultura, la sociedad, el cine y en nuestra ciudad».
En las próximas semanas, se iniciará la segunda convocatoria del Programa Rueda. Seis creadores disfrutarán durante siete meses de este programa financiado por el ICAA y la Unión Europea, a través de los fondos NextGenerationEU, que apuesta por el apoyo a la conciliación de la creatividad con las obligaciones familiares o laborales para que los cineastas no se queden fuera del sistema.
