El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha aprobado el anteproyecto de Ley del Cine en Andalucía, que dotará por primera vez de un marco jurídico a la producción cinematográfica y audiovisual en la comunidad. El texto inicial, elaborado con la participación y el consenso del sector, tiene como principal objetivo fortalecer y respaldar una actividad que genera más de 7.000 empleos y cuenta con más de 1.500 empresas.
Entre otras novedades, la norma incluye la puesta en marcha de la Estrategia Andaluza para el Impulso de la Industria Cinematográfica y Audiovisual; la habilitación de un marco de apoyo económico estable a través de una cartera única de recursos de financiación, y la creación de instrumentos de colaboración con el sector, como el Consejo Asesor de Cinematografía.
Asimismo, se disponen medidas para impulsar la alfabetización audiovisual, acercar la creación cinematográfica a las aulas, incrementar la presencia activa de las mujeres en la industria, favorecer los rodajes en la comunidad, incorporar al sector en las políticas autonómicas de internacionalización, mejorar el acceso de las personas con discapacidad y reforzar la protección del patrimonio vinculado a la actividad.
La Estrategia Andaluza para el Impulso de la Industria Cinematográfica y Audiovisual, con una vigencia de seis años, será el principal instrumento de coordinación de las políticas públicas recogidas en la ley. Deberá formularse en el plazo máximo de un año desde la entrada en vigor de la ley y contará con la participación de organismos y entidades públicas y privadas vinculadas con la actividad.
En el marco de esta estrategia, y atendiendo a una de las principales reivindicaciones del sector, el anteproyecto prevé la creación de un sistema de financiación estable a través de la Cartera de Recursos Económicos para la Cinematografía y la Producción Audiovisual. Este instrumento se nutrirá de los presupuestos autonómicos, del Fondo de Apoyo a las Pymes Culturales y de los fondos estatales para el cine cuya gestión corresponda a la Junta, así como de donaciones, transferencias y aportaciones, entre otras fuentes. Su labor se centrará en incentivar la creación, el desarrollo y la producción cinematográfica y audiovisual; mejorar las condiciones de exhibición, y fomentar la atracción de rodajes y la distribución, la promoción y el acceso a festivales y mercados nacionales e internacionales.
Otro de los objetivos de la Cartera será el apoyo a la exhibición y a la creación de nuevos públicos, ámbitos en los que se incluirán ayudas novedosas como las destinadas a apoyar la digitalización de las pantallas de cines y a respaldar la creación de una red cultural de salas de cine, de adscripción voluntaria, para la difusión de obras andaluzas y europeas de calidad.
En una línea similar, la futura ley implantará estrategias de alfabetización mediática para favorecer el acceso a la cultura cinematográfica en la escuelas y en el entorno educativo. Estas iniciativas se centrarán en la formación tanto de los docentes como de los profesionales del sector.
El desarrollo de las previsiones de la ley contará con nuevos instrumentos de colaboración entre los poderes públicos y la industria del cine. Entre ellos destacan el Consejo Asesor de Cinematografía, órgano consultivo y de asesoramiento en el que participarán profesionales de reconocido prestigio, y el Centro de Información y Seguimiento de la Actividad Cinematográfica y Audiovisual, que se encargará de realizar trabajos estadísticos y de tratamientos de datos relacionados con esta industria.
En el ámbito de la ordenación administrativa, destaca la creación del Registro Andaluz de Empresas Cinematográficas y Audiovisuales. Entre otras funciones, este censo facilitará el acceso a incentivos y a la calificación y certificación de nacionalidad de las obras. También se prevé la constitución de una red de archivos con el fin de conservar el patrimonio en este ámbito.
El anteproyecto que inicia su tramitación ha sido fruto de dos años de trabajo y consenso con los profesionales del sector y con entidades como la Asociación de Empresas de Producción Audiovisual y Productores Independientes de Andalucía (AEPAA-APRIA); la Plataforma de Empresarios y Creadores del Audiovisual Andaluz (PECAA); la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA); la Asociación Andaluza de Mujeres de los Medios Audiovisuales (AAMMA); la Asociación de Empresas de Distribución Audiovisual de Andalucía (AEDAVA); la Asociación Profesional de Técnicos Audiovisuales y Cinematográficos de Sevilla (TESEA); la Asociación de Escritores y Escritoras de Cine en Andalucía (ASECAN); la Asociación Empresarial de Cines de Andalucía (AECA); la Asociación de Festivales Audiovisuales de Andalucía (ASFAAN), y la Andalucía Film Commision.
La futura norma, centrada en los ámbitos creativo y de producción, difusión y protección patrimonial, se complementará con la Ley del Audiovisual de Andalucía, cuyo proyecto fue aprobado por el Ejecutivo andaluz el pasado mes de septiembre con el fin de regular la actividad en el medio televisivo y radiofónico.
Según los últimos datos disponibles, correspondientes al año 2014, Andalucía cuenta con 1.582 empresas del sector audiovisual y multimedia, de las que 710 están centradas en actividades cinematográficas (cine y televisión). El sector emplea a más de 7.000 personas, de las que 3.000 corresponden al cine. Un total de 13,1 millones de espectadores acudieron en 2014 a las salas andaluzas, donde se exhibieron 542 títulos. Estos datos sitúan a la comunidad como la tercera en respuesta del público, sólo por detrás de Madrid y Cataluña.