‘Entre tierras’, serie original de Atresmedia, ha arrancado las grabaciones de su segunda temporada. La ficción, que se convirtió en la más vista de la televisión en 2024, continuará su historia en el prime time de Antena 3, y también podrá verse en atresplayer.
Megan Montaner vuelve a ponerse en la piel de María, protagonista de la serie. En esta
temporada, también formarán parte del elenco principal Silvia Abascal, Rodolfo Sancho,
Ginés García Millán, José Pastor, Itziar Miranda, Clara Garrido, Germán Alcarazu, Marina Guerola, Helena Ezquerro o Carlos Serrano-Clark, entre otros.
Producida por Atresmedia en colaboración con Boomerang TV, la segunda temporada de ‘Entre tierras’ contará con 10 capítulos de 50 minutos cada uno. Su rodaje tiene lugar durante estas semanas en localizaciones de Almería, Castilla-La Mancha y la Comunidad de Madrid.
Montse García y Luis Santamaría son los productores ejecutivos de la serie, que está dirigida por Humberto Miró y Salvador Garcia Ruiz. Lucía Alonso-Allende y Humberto Miró ejercen como coproductores ejecutivos, mientras que Susana López Rubio, Juan Beiro y Joaquin Santamaría forman el equipo de guion, junto a la analista Raquel Busca.
Diego Polo es el director de producción de ‘Entre tierras’, Antonio González está al frente de la dirección de fotografía y Paco Redondo ejerce como director de arte. Eva Martínez y Raquel Martínez son las encargadas del maquillaje, mientras que Gualter Da Sá es el responsable de vestuario.
La nueva temporada de la ficción abordará temas como los conflictos familiares, el dolor de la pérdida, la diferencia de clases, la transformación del campo y, también, el amor imposible, pero inevitable.
Sinopsis
Han pasado casi dos décadas desde que María perdió a Manuel y se quedó sola al cuidado de Nicolás y de Manuela, la hija recién nacida que su marido no conoció. En estos años ha logrado sacar adelante la tierra de los Cervantes gracias a su coraje y al de Claudia, la jornalera rebelde e hija bastarda de D. Ramón.
María sufrirá nuevas pérdidas y tendrá que seguir luchando para evitar que se pierdan las tierras, pero sobre todo para que sus hijos no pierdan el arraigo y se mantengan unidos a la familia y a su patrimonio.
Los tiempos cambian, los campesinos migran y la falta de jornaleros propicia la llegada de
braceros de otras zonas más pobres, pero también de empresarios ambiciosos dispuestos a explotar, sin apego y sin vínculos, invirtiendo en maquinaria más que en personal. Por primera vez en mucho tiempo, María se fija en alguien, pero el recuerdo de Manuel hará mella en sus dudas; hará lo imposible por evitar lo inevitable.