Ha comenzado el rodaje de ‘Federica Montseny, la mujer que habla’ (Frederica Montseny, la dona que parla), una TV movie dirigida por Laura Mañá y protagonizado por Màrcia Cisteró y Emilio Gutiérrez Caba. El telefilme cuenta la historia de la líder anarcosindicalista que aceptó el cargo de ministra de Sanidad durante la Segunda República, lo que la convirtió en la primera mujer ministra en Europa.
El rodaje, que durará cuatro semanas, tendrá lugar en Valencia, Sueca y San Isidro de Benagéber. La película habla del conflicto interno de una mujer valiente e idealista que se deberá cuestionar a sí misma hasta convertirse en poderosa y pragmática. El film quiere rendir homenaje a una mujer extraordinaria del pasado, con unas convicciones muy actuales.
Completan el reparto de ‘Federica Montseny, la mujer que habla’: Óscar Muñoz, Miquel Gelabert, Ivan Benet, David Bagès, Fran Nortes, Pep Ambrós y Candela Moreno. El guión es de Rafa Russo y Mireia Llinàs, mientras que la producción corre a cargo de Miriam Porté y Pedro Pastor.
Se trata de una producción de Distinto Films en coproducción con TV3 y Voramar Films, con la participación de À Punt Media, el apoyo del programa MEDIA y del Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya y la colaboración del Instituto Valenciano de Cultura y el Instituto de la Mujer y por la Igualdad de Oportunidades.
Sinopsis
Hasta qué punto vale la pena traicionar los propios ideales al parecer un bien mayor? En plena Guerra Civil española, la influencia del anarcosindicalismo lleva el gobierno de la República a incluir ministros anarquistas, entre ellos Federica Montseny, una de las dirigentes más influyentes del movimiento. Montseny acepta el cargo a regañadientes, porque no cree en las formas de poder, pero lo ve como la única opción efectiva para evitar el auge del fascismo. Esto la convierte en la primera mujer ministra de la España. Pero la guerra acaba ganando Franco y Montseny se exilió en Francia. Allí se enfrenta a un juicio de extradición, en el que, si quiere ganar, debe mostrarse como ávida defensora de la República. Ella se niega, ya que se arrepiente de su decisión de entrar en el gobierno. Pero, si pierde el juicio, devolverá a la España franquista, donde será ejecutada. Frederica debe decidir entre ir en contra de sus convicciones o conservar la vida.