Históricamente el sector audiovisual no ha sido demasiado proclive a los cambios estructurales, basta señalar que en el ámbito cinematográfico la cruz de Malta y el soporte fotoquímico han sido dos pilares inamovibles durante más de cien años. En una industria en la que las transformaciones tecnológicas han sido muchas veces más una evolución que una revolución, ni que decir tiene que los cambios de paradigma en otros ámbitos han sido excepcionales. Hasta hace solo unos años.
La entrada de nuevos jugadores en el negocio, las nuevas formas y hábitos de consumo de los contenidos audiovisuales, los cambios sociales en favor de la igualdad de género o la conciencia de protección medioambiente han sido algunas de las palancas que han dado origen a algunos de estos cambios estructurales, casi siempre transversales, que todavía no se han culminado.
A menor escala, pero no por ello menos relevante, nuevos perfiles profesionales han llegado a la industria audiovisual para quedarse, como puede ser el de consultor de sostenibilidad o más recientemente la coordinación de intimidad, un rol incorporado a las producciones de ficción nacionales tan solo hace unos pocos años. También los nuevos procesos de postproducción han generado algunos nuevos perfiles laborales, es verdad, pero Audiovisual451 ha querido fijarse esta vez en el que es quizá el perfil más joven y desconocido de todos los que ha alumbrado el sector audiovisual últimamente (al menos en España): la Coordinación de Intimidad.
Y ¿qué es la Coordinación de Intimidad? Pues ni más ni menos, la coordinación de intimidad se ocupa de la gestión del contenido íntimo de las producciones audiovisuales, desde la preproducción, pasando por el rodaje e incluso en la postproducción, así de fácil y así de complicado. Se refiere al control de aquellas escenas que contengan besos, sexo simulado, violencia sexual, desnudez completa o parcial de los actores y otro tipo de situaciones con alto contenido íntimo como pueden ser ciertas escenas ginecológicas, la recreación de partos, situaciones en baños…
“Nuestro trabajo opera bajo lógicas muy parecidas a los de los coordinadores de acción. Al igual que ya nadie dejaría que los actores improvisaran una escena de lucha, porque es probable que alguien se hiciera daño y no quedaría realista, lo que nosotras hacemos es poner en el centro en consentimiento de los intérpretes, a la vez que protegemos sus límites. Intermediamos y ayudamos a generar un canal de comunicación entre el reparto y la producción. Además ayudamos en la coreografía de las escenas sexuales, poniendo mucho el foco en el sentido narrativo de las mimas. Siempre apostando que lo que se rueda sea realista y desde un punto de vista creativo pero sin que nadie tenga una mala experiencia durante el rodaje y que se evite en todo momento el contacto genital”, explica Tábata Cerezo, cofundadora de IntimAct junto a Lucía Delgado, dos actrices que se han convertido en poco tiempo en dos de las coordinadoras de intimidad más solicitadas de España, con trabajos en 40 producciones en menos de tres años.
Y es que la coordinación de intimidad es un oficio principalmente llevado a cabo por mujeres, actuando como jefas de departamento en los rodajes, aunque no es un rol exclusivamente desempeñado por mujeres: “Sí, es un oficio mayoritariamente feminizado, aunque es cierto que en otros países sí tenemos compañeros ejerciendo esta labor. La realidad es que es un tema que se aproxima más a lo femenino socialmente. Este también es un rol que sirve para balancear el género de las personas que trabajan en el cine”, comenta Cerezo.
En 2021 ambas fueron seleccionadas por Netflix como parte de su programa de “Grow Creative”, para ser formadas y obtener una certificación internacional como unas de las primeras coordinadoras de intimidad en España por la compañía sudafricana Safe Sets.
La formación de nuevos profesionales será sin duda uno de los retos de este gremio en los próximos años, aunque ya existen maneras de formarse: “Existen cursos de formación para coordinación de intimidad y son fundamentales para abordar esta labor. Hay certificaciones internacionales que cubren las temáticas principales como trauma, teoría del consentimiento, trabajo con menores, coreografía sexual, diversidad sexual… Nosotras nos formamos con una compañía sudafricana de coordinación de intimidad. La formación va llegando poco a poco, porque es necesario contar con profesionales que se puedan formar con el rigor necesario”, sentencia Cerezo.
Tábata Cerezo y Lucía Delgado son además dos de las cinco pioneras de este rol en España, cofundadoras de la Asociación Española de Profesionales de la Coordinación de Intimidad. Cinco coordinadoras de intimidad que han trabajado en más de un centenar de producciones audiovisuales en España en los últimos tres años.
AESCI es un organismo sin ánimo de lucro fundado el año 2022 con el principal objetivo de representar al colectivo de coordinadoras/es de intimidad y promocionar sus intereses profesionales, económicos y sociales. En su carta de presentación se señala que la intención fundacional de AESCI es “profesionalizar la coordinación de intimidad en España y estandarizar el trabajo de escenas íntimas en la industria audiovisual y de las artes escénicas, desde una vocación de cambio hacia un sector más seguro, igualitario, feminista, libre de racismo, inclusivo y basado en la cultura del consentimiento”.
Precisamente la Asociación Española de Profesionales de la Coordinación de Intimidad acaba de presentar la primera Guía para el Trabajo con Escenas Íntimas en el contexto del audiovisual español. Esta guía ha sido diseñada por profesionales con certificación internacional en coordinación de intimidad y amplia experiencia en el sector televisivo y cinematográfico español con el propósito de «ofrecer unos principios comunes a la industria audiovisual española para el trabajo con escenas íntimas, además de recomendaciones específicas para los departamentos, haciendo del rodaje de estas secuencias un lugar seguro y cómodo para todas las partes».
“Estamos en un momento importante de reflexión y autocrítica en el sector y creemos que era el momento ideal para lanzar esta guía con la que tratamos de generar un marco de trabajo que se adapte a la realidad de la industria audiovisual española y que además esté a la altura de los estándares internacionales. La idea es integrar las escenas íntimas como parte de la narrativa audiovisual asegurando que se respetan los límites para los actores, creando una red de seguridad para ellos”, expone otra de las pioneras de la coordinación de intimidad en España, Maitane San Nicolás, cofundadora de AESCI y que recientemente ha participado como coordinadora de intimidad en el filme de Lucía Alemany ‘Pídeme lo que quieras’.
La Guía para el Trabajo con Escenas Íntimas cuenta con el apoyo de CIMA, DAMA, la Academia del Cinema Català, Associació d’Actors i Directors Profesionals de Catalunya, Associació d’Actors i actrius Profesionals Valencians , Dones Visuals, Euskal Aktoreen Batasuna, (H)EMEN y AAMMA, entre otras entidades. En el texto queda claro que la base de todo es el consentimiento de los intérpretes, entendiendo esta noción como el hecho de que el actor haga este tipo de escenas íntimas con total libertad, escena por escena, y sin ningún tipo de coacción ni presión. Vamos, como se enfrentarían a cualquier otra escena de la producción. Este consentimiento debe asegurarse además a través de todo el proceso de producción, desde el casting hasta el rodaje.
“Nosotras, junto a otras compañeras, hemos sido bastante pioneras en España. En nuestro caso empezamos a trabajar en coordinación de intimidad a finales de 2021 y en todo este tiempo hemos participado en 40 producciones, casi todas españolas y alguna internacional. Este nuevo rol está teniendo muy buena acogida en el sector, es reciente, pero se ha incorporado de forma muy rápida y natural”, asegura Delgado, que comenta además que el mayor desafío al que se han tenido que enfrentar es precisamente este pionerismo en España, lo que les ha obligado a realizar una importante labor docente con la industria para mostrar cómo se trabaja la coordinación de intimidad y como se debe integrar en las producciones. También han tenido que desmontar muchos mitos derivados de ese desconocimiento inicial, “ha habido que generar un nuevo espacio para esta figura que no se contemplaba antes, pero por suerte la acogida y los resultados han sido muy positivos”, apunta Delgado.
Las dos fundadoras de IntimAct confesaron a Audiovisual451 que el desconocimiento del rol por parte del sector fue un obstáculo inicial aunque salvado sin excesivas complicaciones: “Al principio sí había una cierta falta de costumbre, aunque mucha gente ya había oído hablar de esta figura que se había utilizado en producciones internacionales como por ejemplo la serie ‘Euphoria’, pero una vez que los demás profesionales han visto en qué consiste este trabajo, lo han asumido perfectamente. Nosotros nos tomamos muy en serio la divulgación de la coordinación de intimidad, porque creemos que esto es muy bueno para la industria audiovisual”, dice Cerezo, que reconoce a Audiovisual451 que su interacción con el equipo en la producción suele ser sobre todo con los actores y sus agentes, la producción ejecutiva, el director, el director de fotografía, los responsables de vestuario y maquillaje. Pero estos no son los únicos miembros del equipo con los que se comunican y trabajan estas jefas de departamento, porque incluso su labor puede llegar a la postproducción, el montaje e incluso a la promoción de las obras. Todo tiene que estar de acuerdo con el consentimiento dado por los intérpretes.
Lucía Delgado insiste en la importancia de que la coordinación de intimidad se tenga en cuenta desde el germen de la producción para poder desarrollar su trabajo en las condiciones idóneas: “Normalmente nos llama la producción y nos incorpora al equipo desde el inicio, desde la preproducción, para poder trabajar en los ensayos y en todo el trabajo previo, incluso en el casting para llegar al rodaje con gran parte del trabajo hecho, que es lo importante. También hay ocasiones que son los propios actores los que solicitan a producción esta figura, cuando ven el contenido íntimo en el guion”.
De lo que ya no existe duda es que la coordinación de intimidad ha llegado para quedarse. En muy poco tiempo el nuevo perfil laboral se ha consolidado y ya nadie duda de su relevancia: “Ya es una profesión que de manera orgánica se incluye en los presupuestos de producción y en el esquema de los equipos, es un rol normalizado. Si hay una escena íntima en un set de rodaje se espera que haya una figura que desempeñe la coordinación de intimidad, eso es lo más positivo, al igual que no nos imaginamos un set de rodaje sin script”, apunta Cerezo.
“La industria ha entendido que había un vacío en este campo y por tanto una necesidad de llenarlo y nuestra intención es seguir mejorando. También queremos que se entienda que este es un rol creativo, que además de conseguir entornos seguros para los actores, hay una parte creativa que puede ayudar mucho a propiciar una mirada sobre la intimidad más diversa, que huye de estereotipos. Podemos ser un agente creativo en el equipo”, añade Delgado.
Las coordinadoras de intimidad de IntimAct, que cuentan con equipo local en Barcelona, Bilbao y también con sede en Lisboa, han participado en series y películas como ‘Élite’ (temporadas 6,7,8) ‘El cuerpo en llamas’, ‘Creatura’, ‘Selftape’, ‘Red Flags’, ‘Todas las veces que nos enamoramos’, ‘Las de la última fila’, ‘Zorras’, ‘Vestidas de azul’, ‘Bienvenidos a Edén’ (temporada 2), ‘UPA Next’ ‘Tú también lo harías’, ‘The eye’, ‘Mano de Hierro’, ‘El Gran Salto’, ‘La Mitad de Ana’, ‘Hamburgo’, ‘Ocho’, entre otras.
Su implicación en cada proyecto nunca es igual, porque no existe un patrón único que determine el tiempo de trabajo de las coordinadoras de intimidad en cada película o serie, siempre dependerá del número de escenas íntimas que aparezca en el guion de cada producción y “sin olvidar que el contenido íntimo es muy diverso y los cuerpos que participan en este contenido, también lo son”, apuntan.
“Depende de cada producción, hay producciones con mucho contenido íntimo como puede ser la serie ‘Elite’ y otras pueden tener una única escena. Lo que hay que dejar muy claro, insisto, es que es muy importante involucrar a la coordinadora de intimidad en preproducción, porque nosotros previamente tenemos que hacer mucho trabajo administrativo y desgloses. Puede darse el caso de que haya cinco secuencias y se hagan en una misma jornada. Al principio, en ocasiones, nos llamaban cuando el rodaje estaba en marcha, de hoy para mañana, y así es muy difícil poder hacer bien nuestro trabajo, es complicado mitigar los riesgos y ayudar. Por suerte, cada vez nos llaman antes y desde producción entienden la importancia de que estemos en los ensayos”, aclara cerezo.
No es extraño que las coordinadoras de intimidad sean además actrices en su gran mayoría, porque este colectivo es el gran beneficiado de la implantación de esta figura que vela por su seguridad y su comodidad en las escenas de alto voltaje sexual, besos o desnudez en rodaje.
El actor italiano Mario Ermito es uno de los protagonistas de la película (que pudo ser serie y ahora será una saga cinematográfica) ‘Pídeme lo que quieras’, que acaba de rodar Lucía Alemany, y que está basada en la saga de novelas eróticas superventas escrita por Megan Maxwell: “En todas las escenas eróticas hemos contado con el apoyo de nuestra coordinadora de intimidad que nos ha cuidado mucho. En ningún momento me he sentido incómodo, siempre se rodaban las escenas con un equipo reducido, con mucho respeto hacia mí y mi compañera Gabriela (Andrada) y solo puedo decir que en esta película nos sentimos muy cuidados por todos. Demasiado…”, declaró Ermito en una pausa del rodaje del filme de Alemany.
Como no podía ser de otra manera, el productor ejecutivo de Zeta Estudios, Xavi Toll, coincide en estos beneficios amplificados para las actrices y los actores, aunque no sean los únicos beneficiados: “Realmente los grandes beneficiados son los intérpretes, ellos son los que trabajan con las coordinadoras de intimidad y el resto del equipo siguen con sus funciones de forma normalizada y lo asumen con total normalidad. Hay protocolos que se siguen en escenas concretas dependiendo del grado de desnudez, por ejemplo, en el que el equipo técnico se reduce al mínimo. Creo que el sentimiento general de los actores es muy positivo, ahora se sienten más protegidos para desempeñar su trabajo en las mejores condiciones y con todas las garantías”, explica Toll, que ha sido el productor ejecutivo de la serie ‘Red Flags’, en la que participaron precisamente las coordinadoras de intimidad de la compañía IntimAct.
“En ‘Red Flags’ trabajamos con el equipo de IntimAct, con Tábata Cerezo y Lucía Delgado. Ellas participaron en rodaje, junto a su ayudante Violeta Orgaz. No te sabría decir el número exacto de sesiones pero han sido muchas. Su papel ha sido fundamental en esta producción en concreto”, apunta.
‘Red Flags’ es una serie original de atresplayer creada por Nando López (‘La edad de la ira’), que se estrenó en la plataforma de Atresmedia el domingo 7 de abril. Se trata de un drama adolescente centrado en las vidas sexuales y emocionales de cuatro jóvenes de la Generación Z. Los ocho episodios que componen la temporada son una producción de Atresmedia Televisión en colaboración con Zeta Studios. La serie cuenta con Montse García, Antonio Asensio, Paloma Molina y Xavi Toll en la producción ejecutiva y Lucía Alonso Allende como coproductora ejecutiva.
Toll incide en que la coordinación de intimidad ha sido una figura esencial en ‘Red flags’, a todos los niveles, “porque es una serie con adolescentes y con muchas escenas de intimidad. Para mí la coordinación de intimidad es tan importante como el director de fotografía o el diseñador de sonido. No concibo no contar con esta figura si la necesito”.
Zeta Studios comenzó a utilizar la coordinación de intimidad hace unos pocos años, desde las primeras temporadas de la serie ‘Elite’ y desde entonces se ha convertido en una figura indispensable cuando se enfrentan a escenas subidas de tono, como fue el caso de ‘Red Flags’. Las plataformas internacionales han sido impulsoras de la utilización de esta figura en España, como espejo de lo que se hacía antes en Estados Unidos, donde incluso la principal asociación de intérpretes obliga a que estén en los equipos por contrato.
“Yo no me había enfrentado antes a escenas de intimidad y desde el primer momento conté con coordinadoras, de hecho me cuesta mucho imaginar cómo se trabajaba antes sin ellas, lo complicado que debía ser afrontar estas escenas. Me parece una figura absolutamente clave para que los intérpretes estén cómodos en todo momento y sobre todo que tengan un espacio seguro donde poder comunicarse y construir estas escenas desde un punto de vista actoral, no solo en cuanto a preservar un espacio seguro de trabajo”, afirma Toll, que ha contado a Audiovisual451 cuál suele ser el modus operandi cuando se enfrenta a este tipo de escenas:
“Cuando en el guion ya te enfrentas a escenas de intimidad, directamente desglosas la coordinación de intimidad como una necesidad más de la producción. El trabajo de coordinación de intimidad empieza en preproducción, las coordinadoras leen el guion y realizan su propio análisis con las necesidades del proyecto en este sentido. Todo esto se pone en común con el equipo de producción y dirección y se pacta en qué momentos de la producción tendrán que intervenir y de qué forma”
“Una vez que todo está pactado –continúa Toll- se preparan las escenas en los ensayos previos. En preproducción se celebran las sesiones de trabajo con los actores, directores, las coordinadoras de intimidad… para que el día del rodaje no haya ningún problema y los intérpretes se encuentren cómodos y seguros”.
El productor ejecutivo de ‘Red Flags’ confirma también el buen recibimiento de este rol por parte del resto del sector audiovisual y no solo por el colectivo de intérpretes: “Al final estas escenas no dejan de ser coreografías y gracias a las coordinadoras de intimidad existe un protocolo y un metodología para trabajarlas. Creo que es un trabajo muy complejo y me alegro de que haya personas formadas para desempeñarlo”.
Aunque haya supuesto también un incremento de los costes de producción, no se olvida de los otros beneficios que ha traído la coordinación de intimidad a la producción audiovisual, como la optimización de estas secuencias delicadas: “Al final cualquier avance en este oficio incrementa el trabajo y el presupuesto, sin embargo creo que la coordinación de intimidad ayuda mucho incluso a optimizar el tiempo de rodaje de estas escenas. Son escenas que ya han sido muy trabajadas anteriormente y los actores están muy seguros y en un ambiente cómodo. Creo que van muy a favor de obra, estos incrementos de trabajo y presupuesto son positivos, porque mejoran claramente las obras”, puntualiza.
Toll recuerda que estas escenas tampoco afectan al plan de rodaje, “no las agrupamos en el tiempo, por ejemplo. El plan fluye igual que antes y la escenas de intimidad tocan cuando tocan”, concluye el productor ejecutivo.
De la misma opinión sobre la necesidad de este rol es el productor de ‘Pídeme lo que quieras, Alejandro Miranda, responsable de Versus Entertainment: “Claro, todo incrementa el presupuesto, todo es un suma y sigue, pero es necesario y más en películas como ‘Pídeme lo que quieras’. Tanto es así que las coordinadoras de intimidad siempre trabajan por escenas y en este caso trabajamos por proyecto, queríamos que estuviese en todos los ensayos, en la preproducción y durante gran parte del rodaje. Si no cuentas con la coordinadora de intimidad desde el principio en una película como esta luego en el rodaje es mucho más complicado”
En la adaptación cinematográfica de la popular novela erótica de Megan Maxwell, Mario Ermito encarna a Eric Zimmerman y Gabriela Andrada a Judith Flores. Se trata de una producción de Warner Bros Pictures España, Versus Entertainment, Lyo Media, 4 Cats Pictures y Guerreras Maxwell AIE, con el apoyo de MAX y Televisión Española, con Maitane San Nicolás como coordinadora de intimidad.
“Hemos trabajado con la coordinadora de intimidad Maitane San Nicolás, que creo que es de las mejores de España. También hemos utilizado documentos Nudity Rider, que es algo muy americano, porque además de contar la coordinadora de intimidad se han firmado todos los protocolos de intimidad antes y después de grabar las escenas eróticas”, confiesa Miranda, que para poner en valor la figura señala que San Nicolás fue una de las primeras personas que se sumó al proyecto: “Desde el principio, una de las primeras personas que llamamos para el equipo fue a Maitane San Nicolás. Básicamente contratamos a Lucia Alemany y acto seguido llamamos a Maitane. El libro ya viene con esa carga erótica y lo teníamos muy claro”, manifiesta.
El productor de ‘Pídeme lo que quieras’ ofrece también algunos detalles de cómo afronta en su caso la integración de las Jefas de Departamento de coordinación de intimidad en la producción y algunas medidas que se deben implementar, como los protocolos de set cerrado: “De alguna manera, hay que tratar que está figura se integre perfectamente en el equipo para que todo funcione bien. En este caso te aseguro que todo ha ido de maravilla, ha habido cero problemas, los actores estaban muy cómodos”
“Cuando se ruedan estas escenas -añade- el equipo se reduce al mínimo, nadie tiene acceso, la señal del combo se corta… Creo que ha habido escenas en las que ha podido haber unas siete u ocho personas del equipo nada más, dependiendo de la complejidad del plano, pero siempre con el equipo mínimo imprescindible”.
Si en el filme de Alemany la coordinación de intimidad ha tenido una presencia muy importante y larga, el responsable de Versus Entertainment constata que cada producción es mundo y nada se puede dar por sentado, excepto la realidad de que la esta figura ya ha encontrado su sitio en la industria: “Acabo de finalizar una serie para Amazon, ‘En fin’, en la que había cuatro escenas sueltas con contenido erótico y ya contamos entonces con una coordinadora de intimidad. No creo que esto hoy sea tanto una tendencia de mercado como una verdadera necesidad y más en una película como ‘Pídeme lo que quieras’, con dos actores tan expuestos”.
David Sainz (‘Grasa’, ‘Malviviendo’) y Enrique Lojo (‘El último show’) son los creadores de ‘En fin’, una serie original de Prime Video que previsiblemente se estrenará a finales de 2024. Con seis episodios de 30 minutos de duración, la serie es una producción de Versus en colaboración con Diffferent Entertainment, con Rafael Portela, Teresa Segura y Alejandro Miranda como productores ejecutivos.
Miranda define la coordinación de intimidad como “la forma que desde producción tenemos ahora para buscar la comodidad y la confianza de los actores en todo el proceso de este tipo de escenas delicadas”. El productor insiste en que no se trata de una moda pasajera, una idea que comparte al cien por cien el productor de Morena Films, Juan Gordon, que ha rodado este año ‘Cuerpo escombro’, con alguna escena de intimidad en su metraje.
El segundo largometraje dirigido por Curro Velázquez (‘Que baje dios y lo vea’) es una producción cien por cien de Morena Films, que cuenta con la participación de RTVE y Prime Vídeo, y con el apoyo del ICAA. La comedia será distribuida en cines por Buena Vista International, que la estrenará el próximo 9 de agosto.
“’Cuerpo escombro’ solo tiene una escena en la que contamos con una coordinadora de intimidad para facilitar el trabajo de los actores y crear un ambiente cómodo en el resto del equipo. Creo que esto es algo muy establecido ya en la industria y nos ayuda a todos, es una manera fantástica de afrontar este tipo de escenas y de quitarnos a todos ‘el susto’. Todos los implicados hablan y se prepara bien, independientemente del director. La coordinadora de intimidad habla con el director para saber lo que busca y a partir de ahí habla con los actores, los escucha, y buscan la mejor manera de hacerlo. Entre todos hay un acuerdo para hacerlo de la mejor manera y desde el respeto absoluto”, concluye Gordon.
Parece que ya nunca ningún intérprete volverá a estar en un set de rodaje con ‘el susto’ al que alude el productor de Morena Films por enfrentarse a una escena con alto contenido sexual o al menos es seguro que se podrán en marcha todas las medidas necesarias para que su comodidad sea la prioridad absoluta. Queda mucho camino por recorrer pero el trayecto más difícil ya se ha transitado.