Uno de los objetivos más apasionantes de la vida universitaria es el descubrimiento. Aprender, sin duda, es el resultado esperado de toda enseñanza, pero, previamente a la adquisición de cualquier tipo de conocimientos, competencias o habilidades, en las aulas se buscan, se exploran universos que al principio resultan ignotos para el alumnado hasta que, de repente, surge una revelación.
En este primer año escaso de la Cátedra FlixOlé-URJC de Cine Español, hemos presenciado en muchas ocasiones ese instante en el que se descubre algo importante: durante proyecciones de películas que nos han desvelado géneros, autores y etapas de nuestro cine que permanecían ocultas; durante talleres y seminarios que han animado a las nuevas generaciones a adentrarse en más de 120 años de historia audiovisual para desear formar parte de su futuro; durante encuentros con profesionales de nuestra industria que han puesto en relación el mundo laboral con el ámbito educativo; o durante la celebración de unos galardones anuales en los que, precisamente, se premia la investigación y difusión continuada de nuestro cine.
FlixOlé y la Universidad Rey Juan Carlos pusieron en marcha la primera cátedra de investigación especializada en cine español con esa emocionante misión de enseñar, estudiar y transmitir nuestro legado fílmico. El fundador de FlixOlé, Enrique Cerezo, y el rector de la URJC, Javier Ramos, coincidieron en manifestar en el acto de presentación del proyecto que las universidades españolas no pueden dar la espalda a lo que tienen más cerca, a nuestra industria, a nuestro arte, y que las facultades de ciencias de la comunicación son un espacio privilegiado para mantener vivo nuestro patrimonio fílmico y formar a los nuevos narradores de historias.
Con este propósito, la Cátedra FlixOlé-URJC de Cine Español, dirigida por Sophie de Mac Mahon y por mí, ha llevado a cabo actividades muy heterogéneas tanto para estudiantes y docentes como para profesionales y amantes del cine en general: un cinefórum mensual en el que han tenido cabida obras de Luis García Berlanga, Eloy de la Iglesia o Gracia Querejeta, entre otras; organización de jornadas temáticas específicas sobre José Luis López Vázquez, Juan Antonio Bardem o el “fantaterror”; impartición de clases magistrales sobre las plataformas de streaming y diversos oficios del cine o talleres de restauración de películas presenciales y online. En esa línea, la celebración en noviembre de 2022 de los I Premios de Investigación del Cine Español ha supuesto una iniciativa innovadora en nuestro campo para distinguir a los mejores trabajos de fin de grado, trabajos fin de máster, tesis doctorales, artículos científicos y publicaciones, además de reconocer la labor divulgativa de programas de televisión como ‘Historia de nuestro cine’, nuevos medios como Cine con Ñ o trayectorias de críticos como Juan Pando u Oti Rodríguez Marchante.
A su vez, la Cátedra FlixOlé-URJC es consciente de que el aula se ha expandido a los entornos virtuales de internet y ha apostado por la creación de contenidos audiovisuales que analicen y difundan el cine español en plataformas y redes sociales. Así, se está elaborando un diccionario en vídeo de lenguaje fílmico (guión, dirección, fotografía, música, etc.) con inolvidables ejemplos de nuestro cine; un formato televisivo de mesas redondas de comentarios de películas; un blog multimedia de análisis abierto en el que tienen cabida investigadores, historiadores, críticos, etc.; y varios podcasts temáticos (‘Nuestra banda’ y ‘La lengua de las mariposas’) con entrevistas y obras destacadas de compositores de bandas sonoras.
En este segundo año de singladura, la Cátedra FlixOlé-URJC va a redoblar su esfuerzo por acercar el cine español a las nuevas generaciones; por ayudar a formar a los futuros profesionales de nuestra industria, como, por ejemplo, con la celebración de la I Jornada de Montaje y Postproducción en marzo; por llevar el cine nacional, a través de los alumnos y los docentes extranjeros, más allá de nuestras fronteras hasta Europa, Latinoamérica, Estados Unidos o China; por realizar actividades permanentes que conecten la cultura universitaria con la sociedad; por lanzar convocatorias de premios que valoren el trabajo de jóvenes investigadores y reconozcan a los medios de comunicación que contribuyen en la tarea de dar a conocer nuestro patrimonio; por crear contenidos audiovisuales que trasladen la ciencia y el arte del cine a las plataformas virtuales y las redes sociales.
En definitiva, seguir compartiendo experiencias que nos permitan continuar disfrutando de lo que más nos fascina: descubrir nuestro cine.