El Festival de San Sebastián ha elaborado su cuarto informe anual de sostenibilidad, que detalla los resultados de la medición de la huella de carbono y la evaluación de la sostenibilidad medioambiental del Festival en su 72ª edición, celebrada entre el 20 y el 28 de septiembre pasado.
El Festival emitió un total de 2574079.65 kg de CO2 equivalente, emisión que ha sido compensada por completo a través del Fondo de Carbono Voluntario de Gipuzkoa, gestionado por Naturklima; es decir, por primera vez desde la elaboración de este informe, en 2021, el Festival ha celebrado una edición carbono neutral.
Los datos proporcionados por el Festival y verificados por la consultora medioambiental Creast detectan que las emisiones se han reducido un 27,6 por ciento en términos generales respecto al año anterior y que el problema principal del Festival en términos medioambientales se centra en la movilidad.
En esta categoría se analizan los desplazamientos del público, equipos de película, prensa e industria acreditada, organización, patrocinadores y proveedores, que suman 1753890.04 kg de CO2e, que representa el 68 por ciento de la huella total de carbono del Festival.
Realizar el cálculo de la huella de carbono supone el primer paso en la toma de conciencia de la necesidad de reducción y compensación de la emisión de gases efecto invernadero generados por la actividad profesional de cualquier empresa o corporación.
Este dato ha ayudado al Festival a establecer una hoja de ruta con la que se han ido aplicando diferentes medidas y cambios en los procesos de trabajo que han permitido reducir su huella como la alfombra roja reciclada y reciclable; la reducción del papel de un solo uso; priorizar el tren sobre otros medios de transporte en los viajes de la organización; la combinación en la flota de vehículos oficiales de coches híbridos, eléctricos y de combustible para los que se utilizan cargadores renovables; o el apagado temprano del Kursaal, manteniéndolo encendido solo las horas en las que es necesario.