El Festival Jóvenes Realizadores de Granada celebra su 30º aniversario con un homenaje a la actriz Natalia de Molina

En el marco de la inauguración del 30º Festival Jóvenes Realizadores de Granada, la actriz Natalia de Molina ha recibido de manos del cineasta Isaki Lacuesta el Premio Especial 30º Aniversario. Un reconocimiento a su trayectoria en un festival que exhibe todo el potencial del futuro cine español.

Mafo y Cristalino, protagonistas de ‘Segundo premio’, presentaron la gala y acercaron el festival al público. Los dos músicos, reconvertidos en actores, desgranaron la programación, destacando el encuentro con realizadores de Jonás Trueba e Itsaso Arana y la masterclass de Víctor Erice, que tendrá lugar el miércoles en la Facultad de Comunicación y Documentación de la Universidad de Granada. También dieron a conocer la Sección Oficial del festival, que reparte más de 5.000 euros en premios entre la Competición Internacional, la Competición Aguaespejo y la Competición Vibraciones.

Festival Jóvenes Realizadores de Granada

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Antonio Miguel Arenas, director artístico del festival, puso en valor la diversidad de una programación que «el público puede hacer suya». Hizo especial mención a todas aquellas personas que le precedieron y a las instituciones y patrocinadores que con su apoyo y colaboración, desde hace años, han hecho posible que el festival celebre su 30º aniversario; en sus palabras, «casi un milagro». Y afirmó, además, que debemos intentar que «el cine forme parte de nuestras vidas», y que este festival es el espacio idóneo para ello, pues da lugar a expresar la libertad y el talento.

El momento más destacado de la noche lo protagonizó Natalia de Molina, que recogió su Premio Especial 30º Aniversario. «Es muy importante que crean en ti cuando nadie te conoce», afirmó, emocionada. Se refirió a su profesión como una profesión bella, vocacional y, a su vez, muy dura, y destacó la importancia del trabajo y la constancia. Además, lanzó un importante mensaje: «Abracemos el riesgo, que para conservadurismos ya está el mundo que nos rodea.»

Isaki Lacuesta dedicó unas palabras a Natalia de Molina antes de otorgarle el premio. Mencionó su entrega, su talento, y sobre todo, su humildad y generosidad. Además, el cineasta confesó que su sueño era «escribir un papel a la altura de su talento», dando paso a la foto de familia con Antonio Miguel Arenas y Juan Ramón Ferreira, concejal de Cultura del Ayuntamiento de Granada.

Como cierre de la inauguración, se proyectó la primera sesión de la Competición Vibraciones dedicada al cortometraje andaluz más original e innovador. Todos los directores subieron al escenario para presentar su trabajo al público, que llenó un Teatro Isabel la Católica que durante el resto de la semana se convertirá en un espacio abierto a la experimentación, el cine, música, poesía y podcasts en directo. El Palacio Condes de Gabia, la Filmoteca de Andalucía y el Espacio V Centenario serán otros de los espacios del festival.

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