Con el despiste que suele llevar encima Raimundo Hollywood, es imposible describir su felicidad, y la de su fiel compañero el oso cinéfilo de Ovedito, cuando fueron invitados un miércoles a la premiere de la serie de Tim Burton, ‘Miércoles’. ¡Qué perfecta forma de no hacerse un lío en el apretado calendario festivo de Hollywood! Como celebrar Jueves Santo en jueves en lugar de la típica pregunta de ¿en qué caen este año las Navidades?
Así que con el plan solucionado para el miércoles, viendo ‘Miércoles’, Raimundo estuvo más contento todavía porque le llevaron a un sitio nuevo en los andurriales hollywoodenses. Se trata del Legion Theatre, un lugar muy muy cerquita del famoso Hollywood Bowl, en su origen sede de una de las asociaciones dedicadas a los veteranos más grande en Estados Unidos y ahora transformada en un gran teatro con otras amplias salas para reuniones o fiestuquis dentro de un edificio que parece salido del universo de Norma Desmond (y si no sabes de quien hablamos y te gusta el cine ya puedes estar viendo ‘Sunset Boulevard’).
La felicidad habría sido completa si la fiesta de esta premiere mundial de la serie hubiera incluido gambas pero ya se sabe que no se puede pedir todo. Pero allí estaba Tim Burton para alegrarnos el día, con su despiste habitual (quizás por eso programaron la premiere de ‘Miércoles’ en miércoles) o cada vez peor porque parecía el perfecto combo entre Mariscal y Jeff Goldblum entre su gesticulación con los brazos y la cadencia de su habla.
Pero a todos nos encantó su presencia y Raimundo pudo ver cómo una de las protagonistas de esta nueva serie de Netflix, Gwendoline Christie, la altísima de ‘Juego de Tronos’, no hacía más que echarse a los brazos de Burton. También estuvieron Luis Guzmán, el nuevo Gómez que lo borda, y la nueva Miércoles, Jenna Ortega, aunque la antigua Miércoles -también parte de la serie- Christina Ricci brilló por su ausencia lo mismo que la nueva Morticia (Catherine Zeta Jones). Pero no fueron muy echadas en falta entre tanta gente porque la premiere también fue distinta en eso, totalmente dirigida a influencers y otros amos de las redes sociales como Raimundo que llegaron vestidos para la ocasión al estilo Addams y se pasearon sacándose selfies y otros vídeos con la vista puesta más en ellos que en el resto del talento de una serie que mezcla la obra de Charles Addams con una historia que recuerda a las aventuras de Harry Potter y otras novelas para jóvenes adultos.
Un ambiente “mi mi mi” bastante divertido que disfrutó del cóctel del momento (el Poe Punch con tequila y sidra además de cerveza de jengibre o el Woe What a Night a base de vodka) y tapitas vegetarianas o no que fueron un poco difíciles de pillar entre la muchedumbre. Una velada para el recuerdo.
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