En marzo de 2021, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciaba el plan de impulso del sector audiovisual, #SpainAVSHub, dotado de 1.603 millones de euros para el periodo 2021-2025, con el objetivo de aumentar un 30 por ciento la producción audiovisual realizada en España al final de ese periodo.
«Queremos promover los cambios para convertir a España en el principal centro de producción audiovisual del mundo», dijo entonces Sánchez. Los recursos financieros de este Plan procedían de los Presupuestos Generales del Estado y de fondos de la Unión Europea, Next Generation.
El presidente del Ejecutivo enumeraba además los seis objetivos fundamentales del plan: 1. Aumento de contenidos producidos íntegramente por empresas españolas. 2. Más ventanas digitales de distribución y comercialización que potencien las actividades de los operadores tradicionales. 3. Aumento del nivel de ingresos económicos del sector, hasta conseguir una industria rentable, sostenible, autosuficiente, resiliente a los embates que puedan surgir en el futuro. 4. El compromiso y la obligación de apoyar a las creadoras, en la participación de los derechos de propiedad que generen sus propias obras, como paso trascendente y transformador de reconocimiento a la creación en España. 5. Aspirar a ofrecer a los ciudadanos y ciudadanas una oferta de contenidos audiovisuales producidos en España, mucho más abundante, mucho más variada y de mayor calidad. 6. Queremos que la industria destaque en el mercado audiovisual como se merece, ser el espacio para que otros produzcan en nuestro suelo, con nuestras capacidades y que nuestro talento alcance la máxima proyección en el mundo posible.
Pues bien, dos años después el Festival de Málaga ha sido el lugar escogido para hacer balance del España Hub Audiovisual, a través de una mesa redonda con el título «Dos años de impulso al sector audiovisual: Impacto y retos».
La sesión ha contado con la presencia de María González Veracruz, secretaria de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, que ha asegurado que de los 1.600 millones de euros del plan en el que participan 13 ministerios ya se han ejecutado ya 1.200 millones de euros, lo que significaría el 75 por ciento de lo presupuestado, casi nada. Y todavía quedaría una adenda de 425 millones de euros que se está negociando actualmente con la Unión Europea, una cantidad adicional en forma de préstamos que llegaría para una nueva etapa del Plan.
El desglose definitivo de cantidades se plasmará en un informe que el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital tiene previsto presentar en las próximas semanas. Pero en estos 1.200 millones de euros ejecutados se incluyen todas las líneas de ayudas directas para el sector audiovisual, las antiguas y las nuevas, incentivos fiscales, créditos (ICO, Enisa…), aportaciones directas a entidades como Spain Film Commission, ICAA e ICEX… Pero que el 75 por ciento ya se haya ejecutado no significa que todo su impacto haya llegado a la industria audiovisual española, todavía hay mucho camino por delante.
Según, González Veracruz, el informe señala también que las 15 medidas previstas en los cuatro ejes maestros del Plan ya se han puesto en marcha. Asimismo, España aparece como el país europeo con mejores previsiones de crecimiento en la producción de contenidos audiovisuales e ingresos para el sector. Los contenidos crecerían un 5,7 por ciento y los ingresos para la industria un 7,2 por ciento. Además, España es actualmente el segundo país de la UE en la producción de contenidos para cine y televisión.
María Peña, consejera delegada de ICEX, ha contado lo que ha supuesto la inyección de fondos del Plan para el ICEX, que ha sido capaz de duplicar las actividades para el sector audiovisual, que han pasado de 25 en 2021 a 55 en 2022, lo que supone un notable incremento de empresas impactadas.
Además de reforzar la presencia en los principales festivales internacionales y las campañas de comunicación de obras españolas en los Oscar, el proyecto estrella del ICEX ha sido la puesta en marcha de una ventanilla única, denominada ‘Spain Audiovisual Hub Bureau’, para facilitar a las empresas españolas interesadas la internacionalización de su actividad. Desde ella, también se proporcionará asistencia a compañías internacionales que estén interesadas en acometer proyectos de producción audiovisual o establecerse en España.
Por su parte, Santiago Yerga, director General de Migraciones del ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, ha destacado la capacidad para facilitar a los profesionales extranjeros su entrada en España para los rodajes internacionales: «ahora pueden venir a trabajar a España sin visado durante 180 días y si se alarga la estancia se puede dar un permiso especial de residencia y trabajo», ha declarado. Igualmente, se ha pensado en la reagrupación familiar para que estos trabajadores internacionales del sector audiovisual puedan venir a España acompañados de sus familias.
Natalia Jaquotot Garre, subdirectora general de Impuestos sobre las Personas Jurídicas del ministerio de Hacienda y Función Pública, ha querido poner el acento en la importancia del sector audiovisual, un hecho valorado por la propia agencia tributaria para no eliminar los incentivos fiscales a la producción audiovisual, al igual que también mantiene los relativos a I+D+i. Jaquotot ha apuntado como otros de los logros de este periodo la creación de la figura del «financiador», que a su juicio facilita la aplicación del incentivo fiscal a los productores y ofrece una mayor seguridad jurídica.
En 2019, hubo 345 beneficiarios del incentivo fiscal a la producción de obras españolas, por un importe de 19,5 millones de euros. En 2020, con la pandemia en pleno apogeo, los beneficiarios fueron 270, por un importe de 16,5 millones de euros. Las estimaciones para 2021 es llegar a 248 beneficiarios, por un importe total de 90,95 millones de euros, mientras que en 2022 serían 608 los beneficiarios del incentivo fiscal a la producción, por una cantidad que alcanzaría los 153 millones de euros en deducciones fiscales.
Finalmente, Tito Rodríguez, director de Políticas de Marketing del ICAA, explicó lo que han supuesto los fondos del plan para el crecimiento del organismo cinematográfico. Entre otras cuestiones se han ampliado los importes de las ayudas a la producción. Por ejemplo, en el caso de las selectivas han pasado de los 15 millones de 2021 a los 30 millones de 2023, ampliables en seis millones de euros más. Las generales, en su ultima convocatoria de 2022, llegaron a 54 millones de euros.
También se ha potenciado la igualdad de género y la producción de animación en las convocatorias y se han creado líneas nuevas como la destinada a laboratorios e incubadoras o la relativa a exhibición cinematográfica. En materia de internacionalización, de la mano de ICEX, se han incrementado las actividades en los principales festivales internacionales y la culminación a esta apuesta ha sido la presencia este año de España como país invitado al Marché du film del Festival de Cannes. También cabe destacar la redacción de la nueva Ley del Cine y la Cultura Audiovisual.
El objetivo de las instituciones implicadas cuando los fondos europeos mermen en los próximos años es mantener la situación actual: «Tenemos que poner las bases para que no haya marcha atrás cuando no haya tantos fondos», aseguró la consejera delegada de ICEX, una idea que comparte Tito Rodríguez, que además piensa que hay que intentar recuperar las cifras de público en las salas de cine. Para Hacienda el reto a partir de ahora es intentar mantener la estabilidad normativa para así lograr una mayor seguridad jurídica en el sector audiovisual.
