Antes de que la noche del sábado 6 de abril se ponga el colofón a la primera edición de los Premios Quirino, con la gala de entrega, más de 250 profesionales de la animación iberoamericana debaten y comparten experiencias en la isla de Tenerife, un verdadero oasis para el sector de producción de la mano de sus suculentos incentivos fiscales. Después de que diferentes asociaciones sectoriales iberoamericanas y el Programa Ibermedia consensuaran un documento para tratar de adaptar las bases del fondo al sector de animación, los asistentes a las actividades profesionales de los Quirino han podido tomar el pulso al sector.
La Secretaria Técnica y Ejecutiva de Ibermedia se ha reunido con las principales asociaciones de productoras de animación en el marco de los Premios Quirino con el fin de adecuar las bases del Programa a la realidad actual del sector de la animación. El principal objetivo es impulsar y promover la formulación de candidaturas de proyectos de animación al Programa, con las especificidades propias de este sector. Los plazos de ejecución, presupuestos y la metodología específica para el campo de la producción de animación hace necesaria una revisión adaptativa que responda a la realidad de este ámbito. Una vez recopiladas las propuestas consensuadas entre los participantes, éstas se trasladarán a la próxima reunión del Comité Intergubernamental del Programa Ibermedia, para su consideración y en su caso aprobación, el próximo día 18 de abril, en el marco del Festival de Cine Español de Málaga.
El presidente de Diboos, la asociación que agrupa a las productoras de animación españolas, ha sido encargado de esbozar la situación del sector en España, Carlos Biern ha apuntado que en 2017 había 250 compañías trabajando en animación, con una facturación estimada de 654 millones de euros. El sector estima que la facturación supere los 1.100 millones en 2020. Estas 250 empresas generan 7.450 empleos directos y 26.000 empleos indirectos. En los últimos seis años España ha producido 40 largometrajes, mientras que se producen alrededor de 13 series de animación cada año, de hecho el 74 por ciento de las productoras españolas apuestan por producir series. El presupuesto medio de los largometrajes de animación españoles es de 12 millones de euros, tres millones para las series y 60.000 de media para los cortos animados. El 45 por ciento de las ventas internacionales de productos españoles de animación corresponde a Europa y solo el 29 al área latinoamericana.
La encargada de presentar los datos de un gigante como Brasil ha sido Marta Machado, de la Asociación Brasileña de Cine de Animación, una entidad de personas físicas más que de empresas: «en Brasil no existe una federación tan consolidada como Diboos», ha afirmado. El primer largometraje de animación brasileño de la historia data de 1951 y desde entonces el país amazónico ha producido 44 largometrajes, 19 de los cuales en los últimos cinco años. Actualmente, hay 25 largometrajes en diferentes fases de producción en Brasil, debido, sobre todo, a la política de incentivos fiscales. El principal coproductor de Brasil es Canadá, en el ámbito de las series y Brasil mantiene acuerdos bilaterales de coproducción con territorios como Alemania, Chile, Argentina, Canadá, España, Francia, India, Israel, Italia, Portugal.
El tercer territorio en el que se ha puesto el foco este primer día ha sido México, cuyos datos han sido compartidos por José Iñesta y Cuathemoc Senties, de la Asociación de Creadores Digitales de México. Cabe señalar que en el país norteamericano hay actualmente 15 largometrajes de animación en proceso, nueve de ellos en producción. Dada la magnitud del mercado cinematográfico mexicano, el cuarto con más espectadores a nivel mundial y que el año pasado logró una taquilla conjunta de 925 millones de dólares, el cine animado de México no está a la altura. En 2017 se estrenaron 89 películas mexicanas, de las cuales solo tres eran obras de animación. Eso sí, en los últimos cinco años se estrenaron 15 producciones de animación autóctonas en Méxicos y según datos de la ACD todos recuperaron la inversión. Por su parte, México mantiene acuerdos bilaterales 
de coproducción con países como Canadá, España, Senegal, Argentina, Venezuela y Francia.
Posteriormente, empresas, profesionales e instituciones tinerfeñas han contado a los asistentes las excelencias y beneficios de producir animación en Tenerife, donde se han traslado o han abierto sede varias compañías del sector y otras se mantienen activas desde hace varios años. Mondo TV; Salero Animation Studio, We Love Animation, La Casa Animada; Tomavisión o 3 Doubles Producciones, son algunos ejemplos. Blanca Rodríguez, de SAVE, la asociación de animación, videojuegos y efectos visuales de Canarias ha señalado que el objetivo es consolidar estos tres sectores como una industria en las islas. Tenerife, como todas las Canarias, ofrece una deducción fiscal por inversión en producciones españolas de hasta un 45 por ciento y el 40 por ciento para producciones extranjeras. Además cuenta con un impuesto de sociedades reducido del cuatro por ciento, por la Zona Especial Canaria (ZEC).
El sábado 6 de abril, veinticuatro obras provenientes de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, España, México, Perú y Uruguay optan a los Premios Quirino en sus nueve categorías. España, con 12 obras finalistas, es el territorio más representado, seguido de México y Colombia, con 5 cada uno. Entre los trabajos seleccionados se incluyen títulos celebrados a nivel internacional, como los largos “Tadeo Jones 2”, “El libro de Lila” (Colombia/Uruguay) y “Ana y Bruno” (México); las series “Puerto Papel” (Chile/Brasil/Colombia/Argentina) o “Pocoyó” (España), y los cortos “Cerulia” (México) o “Decorado” (España), entre otros.
