Fin de año intenso para la televisión en España. El Tribunal Supremo acaba de confirmar que la sentencia del pasado año debe ejecutarse tal cual: nueve canales de TDT tendrán que cesar sus emisiones por haberse concedido su licencia sin concurso público. Ni la intención del Gobierno de negociar con los operadores, ni los esfuerzos de las televisiones por mantener sus negocios tal cual han aplacado la sentencia que cerrará tres canales de Atresmedia, dos de Mediaset España, dos de Veo TV y dos de Net TV.
«Deben cesar los canales no comprendidos en los acuerdos del Consejo de Ministros de 28 de mayo y 11 de junio de 2.010 de transformación de concesiones en licencias en aplicación de lo dispuesto por la Ley General de la Comunicación Audiovisual», explica el Tribunal en el auto. Las emisiones podrán continuar hasta que culmine el proceso de liberación del dividendo digital, al que el Gobierno aún no ha puesto una fecha concreta a pesar de que su intención era tenerlo terminado en enero de 2014.
El proceso contra las últimas licencias de TDT concedidas por el gobierno de Rodríguez Zapatero fue comenzado por la empresa Infraestructuras y Gestión 2002, que ha interpuesto varios recursos en España, con éxito destacable en Cataluña, donde logró tumbar 37 concesiones de emisión local.
Una vez más, el panorama de la televisión en abierto en España se modificará en los próximos meses tras la promesa de ofrecer al espectador la mayor pluralidad de contenidos y la mejor calidad de imagen. Desde que se produjeran las fusiones primero entre Telecinco y Cuatro y los canales aledaños, y entre Antena 3 y La Sexta con el resto de frecuencias de los grupos, la competencia en España se ha centrado en estos dos gigantes, que han replicado el modelo de la televisión de pago poniendo en marcha canales temáticos dirigidos a targets concretos de la audiencia. El partido se juega entre Mediaset España y Atresmedia Televisión más aún desde la eliminación de la publicidad de TVE. Son ya varios los cadáveres que se han quedado por el camino, cabe recordar Veo7, Marca TV, Libertad Digital… ahora todo indica que MTV volverá a la televisión de pago y los trabajadores de Interneconomía han iniciado una protesta en forma de huelga por las pésimas condiciones laborales que arrastran desde hace meses, impago de las nóminas incluido. Y es que la tarta publicitaria, disminuida a niveles de 1997, no da para más de 30 canales en abierto en un país con un mercado de 47 millones de habitantes y una tasa de desempleo que supera con creces el 26 por ciento de la población.
¿Es necesario que una sentencia tenga que decidir que algunos canales de televisión deben cesar sus emisiones?
