En el marco del Festival de San Sebastián se ha escenificado la firma del nuevo acuerdo de coproducción entre España y Argentina. Los encargados de dar oficialidad al convenio, que se gestó durante el pasado Festival de Berlín, han sido el presidente del Instituto de Cine de Argentina (INCAA), Ralph Haiek, y la directora general del (ICAA), Beatriz Navas.
Más que un nuevo acuerdo se trata de una actualización del convenio bilateral de coproducción con Argentina, que estaba vigente desde el año 1969 y que contenía varias carencias y anacronismos. Los institutos de cine de ambos países han escuchado las demandas de la industria para acabar con este desfase y como consecuencia se han incluido ahora las coproducciones financieras y se ha extendido su ámbito a las series de televisión y TV Movies. Así, se incluye a todo tipo de obra cinematográfica o audiovisual, cualquiera que sea su formato, duración o soporte y no sólo a los largometrajes.
En el caso de las coproducciones financieras, proyectos de acreditada calidad artística y con un presupuesto superior al millón de euros, el porcentaje mínimo de participación será el 10 por ciento y el máximo el 20 por ciento. Se limita a seis las coproducciones financieras al año por empresa. El convenio también define las empresas coproductoras que pueden beneficiarse de la colaboración entre países y actualiza lo referente a la gestión de los derechos de las obras resultantes.
En el caso de las coproducciones normales, aquellas que no son financieras, se estipula que el porcentaje mínimo de participación esa del 20 por ciento, mientras que el máximo queda fijado en el 80 por ciento. Además, la participación de los equipos debe ser proporcional a dicho porcentaje. También pueden intervenir en las coproducciones hispano-argentinas terceros países pero nunca con una participación que supere el 30 por ciento.
Se establece el régimen de aprobación de la coproducción por las dos autoridades competentes adecuando los requisitos a la realidad actual del sector audiovisual. También recoge el derecho de las películas en coproducción a acceder a las ayudas previstas en los dos países. El nuevo acuerdo tendrá una vigencia de cinco años, renovables por un periodo similar. «Las coproducciones permiten sacar adelante muchos proyectos, pero no solo se trata de una manera de poder financiar películas sino de enriquecer la producción de los países, de ampliar su público, de intercambiar talento y conocimiento, y de establecer vínculos para futuros proyectos. Sin duda, Argentina es un socio natural, y merece la pena apuntalar nuestra colaboración con la puesta al día de este convenio. Confiamos en que gracias a él ampliemos el alcance de nuestro sector, lo hagamos más dinámico y surjan producciones culturalmente interesantes», ha apuntado Navas.
Para España, Argentina es el principal coproductor de cine. En los últimos cinco años se han realizado medio centenar de coproducciones cinematográficas. Ahora, los efectos del nuevo acuerdo parece que se empiezan a notar, ya que según ha comentado la directora general del ICAA, «en lo que va de 2018 ya se ha coproducido 21 títulos entre España y Argentina».
En 2016 se produjeron en España un total de 254 largometrajes, cantidad muy similar a 2015 y 40 se realizaron en régimen de coproducción con otros países, con Argentina (6), Francia (5) y Estados Unidos (5) como principales socios. Los datos de 2017 arrojan que se produjeron en España un total de 241 largometrajes de los cuales 117 fueron de ficción, 120 documentales y cuatro películas animadas. De esos 241 títulos producidos el año pasado 42 eran coproducciones internacionales y 10 contaban con la participación de Argentina. En detalle, cinco fueron bilaterales entre España-Argentina, dos de España, Francia y Argentina, otras dos de España, Argentina y Uruguay y una entre España, Argentina y Brasil.
