La realidad suele desvelar, cuando nos acercamos, que no es sólo como la conocemos, a veces, incluso, ni siquiera como la imaginábamos. Para mostrar que existen otros mundos, otras necesidades, y personas comprometidas que generan oportunidades para quienes no las tienen, la Fundación Muñecos por el Desarrollo (MxD), gracias a la Junta de Castilla y León y al apoyo logístico de AECID y de diversas entidades públicas, presenta la serie documental televisiva ‘El Mundo de Fredo Fox’. Un programa educativo, destinado a niños de 6 a 12 años y a sus familias, en torno a la solidaridad y la cooperación española, que, hasta el momento, consta de 26 capítulos sobre diferentes proyectos en Nicaragua, Honduras, Guatemala, República Dominicana y El Salvador.
‘El Mundo de Fredo Fox’ es una aventura a través del mundo de la cooperación española protagonizada por Fredo Fox, un simpático zorro verde, de nariz colorada, chaleco corto y pajarita al que le encanta hacer amigos y que, con una mente curiosa y una actitud solidaria y comprometida, viaja como intrépido reportero a través de Centroamérica y España para conocer los proyectos que llevan a cabo personas e instituciones que trabajan con empeño para ayudar a los más desfavorecidos y cambiar sus condiciones de vida. Gente excelente, héroes del día a día que contribuyen a comprender qué significan la “cooperación al desarrollo”, el respeto a la infancia y los Objetivos del Milenio. Gracias a breves reportajes de 5 a 8 minutos que ponen en valor la solidaridad, Fredo Fox acerca a niños y adultos la realidad de cómo viven otros semejantes que no tienen recursos y bienes de primera necesidad. Fredo ha visitado lugares indispensables y ha conocido problemas que no pueden esperar, aproximándose como “uno más”, siendo testigo de cada proyecto, participando con una pregunta y, con una mirada sencilla y una mano siempre dispuesta, intentando poner el acento en los aspectos más prácticos y positivos del asunto.
La aventura de la cooperación
En sus viajes, Fredo Fox ha visitado una casa de acogida para mujeres maltratadas en Santa Rosa de Copán (Honduras), ha conocido un taller de carpintería dentro de una cárcel, donde Cáritas lleva a cabo tareas de reinserción social, ofreciendo a los presos la posibilidad de trabajar y recuperar el sentido de la dignidad. La “mascota de la solidaridad” también ha conocido una escuela infantil en Estelí, en la que niños pertenecientes al Movimiento Nacional de Adolescentes y Jóvenes de Nicaragua desarrollan, de la mano de Save the Children y de la cooperación española, su labor para luchar contra la trata humana y la explotación infantil. Con el mismo interés, ha llegado hasta la Bahía de Jiquilisco (El Salvador) para conocer las dificultades de vivir sin acceso al agua potable, descubrir qué es una “letrina abonera” y ver cómo AECID y ANDA desarrollan un proyecto para sanear aldeas rurales. Pero, Fredo también ha compartido una jornada de juegos y actividades dentro de los primeros campamentos de verano que disfrutaron los niños y niñas del batey Santa Rosa (República Dominicana), gracias a la ONG española 180 grados y la asociación dominicana Jóvenes de la Milagrosa Dispuestos a Superarse; ha conocido a las mujeres que lideran el Centro de Producción Piscícola Bombita en Barahona, un proyecto de piscicultura; ha estado en Arauco, comprobando cómo el proyecto Araucaria defiende el medioambiente y la naturaleza en Lago Enriquillo, una reserva de la biosfera única en el mundo en la que la cooperación española contribuye apoyando a las Asociaciones de Guías locales a través de la colaboración con el Ministerio de Medio Ambiente dominicano. En Guatemala ha visitado Olopa, donde la cooperación trabaja con la Mancomunidad de Copanchortí en la gestión de los residuos sólidos y en la difusión entre los niños de la regla de las 3R: reduce, reutiliza y recicla. Además, Fredo ha sido testigo de cómo el grupo de Jóvenes Activos Marcando la Diferencia pone en marcha una experiencia lúdica y educativa en una de las zonas más peligrosas de Ciudad de Guatemala, concienciando, a través del juego, de los peligros que conlleva formar parte de una banda, tal y como se aprecia en el capítulo “Jugando en paz”.
En un futuro próximo, este reportero infantil también grabará con ACNUR, Cruz Roja, el Banco de Alimentos, UNICEF y entrevistará a personalidades destacadas del mundo de la cooperación y de la educación, como ha hecho con Federico Mayor Zaragoza.
Fredo Fox habla con los protagonistas y participa de las experiencias, contando sus aventuras a través de un lenguaje sencillo y directo y de una herramienta peculiar, su propio ser: un muñeco de gomaespuma que permite, de una forma eficaz, aproximar al niño a una realidad lejana, sensibilizarle acerca de los derechos humanos y transmitirle por qué es necesaria la solidaridad, la generosidad y los proyectos de cooperación para construir un mundo mejor y más digno.
Fredo en los colegios y en la televisión
Concienciado con la infancia, Fredo Fox también llega a los colegios para ofrecer charlas sobre cooperación, qué significa, en qué condiciones se lleva a cabo y qué consecuencias tiene, profundizando en aspectos como qué es una ONG, objetivos del Milenio, implicación de las personas, etc. Con esta premisa, y durante el pasado mes de marzo, Fredo Fox realizó una gira por centros castellano-leoneses, hablando de estos temas a escolares de Primaria (de 6 a 12 años).
La Fundación Muñecos por el Desarrollo ha editado una Guía Didáctica que se puede descargar gratuitamente en internet (www.fredofox.org) para alumnos y profesores, con información sobre cada proyecto visitado y actividades relacionadas con cada experiencia. 26 fichas que aportan las pautas para un mejor aprovechamiento educativo de la serie. Junto a la información básica (título de la serie, capítulo y episodio) se amplían datos sobre los vídeos y los proyectos (Saber +), el Objetivo del Milenio tratado, la edad recomendada, se proponen tres actividades y se refuerzan conocimientos, posibilitando formular preguntas, encontrar respuestas, generar opiniones y nuevas ideas sobre temas tan importantes.
‘El mundo de Fredo Fox’ quiere ser una manera divertida y educativa de transmitir a los más pequeños, sus profesores y sus familias cómo transformar diariamente el mundo que nos rodea con ilusión y esfuerzo, con la esperanza de que es posible.
Con el comienzo del nuevo curso escolar, la Fundación MxD y UNICEF han firmado, además, un convenio mediante el cual Fredo Fox se pone a disposición de todos los niños de España a través de la plataforma Enredate.org, el portal educativo que trabaja para introducir los derechos de la infancia en el aula.
Fredo Fox acaba de inaugurar el Canal de Cooperación de la Televisión Educativa Iberoamericana (TEIB), donde forma parte de su programación, y en el que ha dispuesto sus contenidos al servicio de toda la plataforma de medios e instituciones que forman la Asociación de Televisiones Educativas y Culturales Iberoamericanas. Además, ha grabado un capítulo piloto que acaba de ser presentado en la Cumbre de Jefes de Estado celebrada en octubre en Panamá. Asimismo, ‘El mundo de Fredo Fox’ ya se puede ver en todos los Centros Culturales de España en el mundo gracias a la Filmoteca de AECID, en cuyo 25 aniversario, y durante los actos que se celebraron el pasado 11 de noviembre, se proyectaron varios capítulos de la serie.
Así nació Fredo Fox
Fredo Fox es fruto de un innovador proyecto de cooperación cultural al desarrollo, financiado por la Junta de Castilla y León en colaboración con la AECID y otras entidades públicas, que hace cuatro años la Fundación Muñecos por el Desarrollo puso en marcha en Segovia en el momento de su constitución. Un proyecto pionero que, a partir de un riguroso programa de formación, tenía como objetivo generar una red de productoras de contenidos de alta calidad que coprodujeran un programa de televisión infantil internacional. Al mismo tiempo, contribuiría al desarrollo de tejido industrial cultural y audiovisual en países con un bajo índice de desarrollo humano y escasez de recursos, que sin embargo, cuentan con una gran demanda de formación artística y técnica que proporcione una salida a su enorme riqueza y diversidad cultural. El programa no pudo hacerse realidad por falta de recursos económicos, pero sí la formación, de modo que 30 jóvenes procedentes de ámbitos artísticos, dramáticos y de creación audiovisual de cinco países en vías de desarrollo de la zona Centroamérica y Caribe (El Salvador, Nicaragua, Honduras, Guatemala y Rep. Dominicana) tuvieron la oportunidad de aprender, durante dos meses intensivos en la República Dominicana, a construir sus propios muñecos, a manejarlos frente a la cámara y a saber todo lo que implica una producción audiovisual con ingredientes tan especiales. De aquella convivencia, además, surgió el colectivo “¡Muñecos Arriba Centroamérica y Caribe!” y, actualmente, cada grupo intenta consolidarse en su país, atendiendo a la idiosincrasia de sus respectivas comunidades.
Tras la experiencia docente, MxD –cuyo principal objetivo es contribuir al desarrollo de los pueblos, utilizando los muñecos como una herramienta artística, formativa y divulgativa, principalmente a través del lenguaje audiovisual– quiso aportar un granito de arena más a este proyecto, a través de una producción audiovisual de pequeño formato, posibilitando una experiencia de producción a los participantes en el curso, y colaborando en la difusión y sensibilización de proyectos de cooperación al desarrollo que realizan diversas entidades españolas en los cinco países involucrados. Así nació ‘El Mundo de Fredo Fox’. Se localizaron 25 proyectos (cinco para cada país participante), en los que se podía ver la amplitud de asuntos que abarca la cooperación al desarrollo y, sobre todo, la calidad humana de los cooperantes y de las personas que reciben estas ayudas, y un pequeño grupo de profesionales de la Fundación se desplazó a estos países para grabar durante cinco semanas los episodios que hoy forman parte de ‘El Mundo de Fredo Fox’.
Fredo Fox tiene hoy 1.500 amigos en Facebook, 7.000 visitantes en YouTube, un blog sobre sus viajes y un Twitter muy activo.