La nominación de ‘El buen patrón’ a los Premios de Cine Europeo llevó a Jaume Roures a Reikiavik el pasado 10 de diciembre. El socio fundador de Grup Mediapro y coproductor ejecutivo de la película subió al escenario junto a Fernando León de Aranoa, guionista y director del filme, para recoger el galardón a Comedia Europea 2022. Aunque ambos dudaron de que ‘El buen patrón’, protagonizada por Javier Bardem, se pueda considerar una comedia.
“Habéis premiado, seguramente, a las dos personas más serias de todo el auditorio”, comentaba en Islandia León de Aranoa, que mantiene el tándem director-productor con Roures desde hace casi 25 años. “La clave es que no nos complicamos la vida, compartimos vivencias y exigencias”, aseguraba Roures horas antes de recibir el premio.
Días después de pasar con éxito por los Premios de Cine Europeo y cerrar, de alguna manera, la gira de ‘El buen patrón’, el equipo recibía una alegría más: Barack Obama la incluía en su lista de películas favoritas de 2022. Una bonita manera de cerrar un año que para Grup Mediapro ha supuesto la remontada después de la pandemia, tal y como señala Jaume Roures en esta entrevista para Audiovisual451. El empresario comenta, además, lo que piensa sobre España, Hub Audiovisual de Europa, el plan del gobierno de Pedro Sánchez para convertir el país en un referente europeo de la industria del cine y la televisión. Y revela cuál es su proyecto cinematográfico soñado.
Audiovisual451: Termina el viaje de ‘El buen patrón’. ¿Cómo lo valorarías?
Jaume Roures: «Con ‘Los lunes al sol’ pasamos de los dos millones de espectadores. ‘El buen patrón’ se considera un éxito con 750.000 u 800.000. Ahora han entrado en juego factores como las plataformas de streaming y la pandemia, incluso hablaría de cierta frivolización social, el estreno en cines de ‘El buen patrón’ coincidió con el de ‘Venom’, que se llevó un millón de espectadores en su primer fin de semana. Estas cosas te hacen preguntarte qué es lo que lleva al público a las salas, me pregunto si el cine social en las salas se ha perdido. A medio plazo, el cine, tal y como lo hemos conocido, ya no va a existir, o, al menos, el tipo de cine que a productores como yo nos interesa y promovemos estará en otro sitio. Están pasando muchísimas cosas y preveo una escisión, una brecha que hará imposible que recuperemos las cifras de hace seis u ocho años, esto no tiene por qué ser necesariamente malo, simplemente es un escenario diferente, yo me planteo el cine como un elemento para llegar a mucha gente, no entiendo que alguien reciba un premio por una película y acepte de buen grado que nadie vaya a verla… Yo pienso al contrario y me agarro al positivismo de la plataforma que me permite llegar a un público más grande.»
A451: ¿Y cómo afecta eso al modelo de negocio y al productor?
J.R.: «Si hay más personas viendo una película, el productor debería tener más posibilidades de recuperación económica. La otra parte de trabajar con plataformas de streaming es la de la propiedad intelectual, una negociación siempre difícil, creo que nos vamos defendiendo bien y pienso que, a medida que estos servicios sean prácticamente el único canal de distribución, las cosas cambiarán. Pero, insisto, hoy por hoy me agarro a lo positivo que han traído las plataformas.»
A451: ¿Qué opinas del plan del gobierno para hacer de España un hub audiovisual?
J.R.: «El gobierno se ha equivocado. Los fondos se llaman ‘next generation’, ¿no? Su propio nombre indica que están destinados a construir futuro. Construir platós no es construir futuro. Es seguir con sol y sangría, me parece muy bien pero es insuficiente. El hub que ha prometido el gobierno se basa en 1.600 millones de euros para un plan de cinco años, de esos 1.600 millones, 1.300 son desgravaciones fiscales para quien venga a rodar a España, y 300 millones de euros para el sector. Un sector no se digitaliza ni se industrializa con 60 millones de euros al año. Tal y como está planteado el hub el sector seguirá en el siglo XX y seguirá sin entrar en el XXI.
Nosotros planteamos un plan que recuperaba Ciudad de la Luz, las Tres Chimeneas en Barcelona, otros espacios en Madrid, País Vasco y Andalucía. La respuesta del gobierno fue el hub audiovisual tal y como lo anunciaron. Creo que a este plan del gobierno le falta visión estratégica, global, de desarrollo industrial y digital del audiovisual en toda España, al final se resume en construir más platós en Madrid, me parece estupendo, no me quejo, pero esto no es el futuro. No sé si has comido calçots alguna vez, es una comida fabulosa que se consume por millones, pero la gastronomía catalana y española se conoce en todo el mundo por Arzak, Roca, Adriá… Pues para mí, ahí está diferencia.»
A451: Y, bajo tu punto de vista, ¿qué hubiera sido lo ideal?
J.R.: «Insisto, para mí lo ideal sería que el gobierno tuviera una visión estratégica global. Mismamente, los platós tradicionales ya se han quedado antiguos con la explosión de la producción virtual, así que lo suyo sería hacer converger todas las industrias digitales relacionadas con el audiovisual. Me refiero a los videojuegos, a las Fintech, a la realidad virtual, a la realidad aumentada, que tengan sus hubs que nos hagan competitivos a ese nivel y que nos abran la puerta a trabajar con todo el mundo.»
A451: En general, Europa, no solo España, tiene un gran problema porque no cuenta con empresas o grupos del tamaño de los estadounidenses en muchos terrenos… ¿no crees?
J.R.: «Europa tiene un problema por sus propias limitaciones. Por poner un ejemplo fuera del audiovisual, siempre recuerdo cuando China sacó un concurso para sus trenes de alta velocidad. Siemens, de Alemania, y Alston, de Francia, quisieron presentarse conjuntamente y la Comisión Europea no se lo permitió. El resultado es que ganó una empresa estadounidense. Bajo mi punto de vista, esto solo se puede calificar de estupidez. Europa no es capaz de tener plataformas que muestren toda la diversidad de su audiovisual porque no se permite crear una coalición de telecos y televisiones públicas y privadas que pudiera estar en un nivel razonable. Las leyes de la competencia son para proteger al ciudadano frente a monopolios y demás, no para frenar oportunidades de negocio, de creación de empleo, etc.»
A451: En los últimos años, en el sector audiovisual, se está dando una gran concentración de empresas, se está formando grupos paneuropeos y más allá…
J.R.: «Sinceramente, no veo movimientos a nivel europeo especialmente significativos. Los estadounidenses sí se han hecho más grandes, Disney, Warner… no veo una correspondencia a nivel europeo, ¡y ya te digo que si alguien lo intentase seguro que no se le permitiría!»
A451: Bueno, seguramente sea así, pero es innegable que está habiendo una oleada de adquisición de productoras pequeñas, de adquisición de talento. ¿Tiene pensado Mediapro adquirir alguna productora próximamente?
J.R.: «Siempre que se trate de productoras complementarias a las que ya componen el grupo. Nuestro objetivo siempre ha sido integrar profesionales que, en algunos aspectos, son mejor que nosotros. La última incorporación fue El Terrat, en diciembre de 2019, antes de la pandemia.»
A451: ¿Con qué te quedas de 2022?
J.R.: «Uf… ¿con qué me quedo? Esta pregunta es un atraco, no acostumbro a hacer balance. La pandemia nos mató, tuvimos que parar 56 rodajes en marzo de 2020, tardamos meses y meses en recuperarlos, además, en un escenario más precario y teniendo que invertir más dinero, con presupuestos más caros. En 2022, hemos recuperado la estabilidad, la invasión de Ucrania nos ha afectado, como a todos, pero sí hemos podido resolver los problemas estructurales que nos supuso la pandemia. Lo mejor hubiera sido no haber tenido que pasar por ahí.»
A451: Ha terminado, de alguna manera, el viaje de ‘El buen patrón’. ¿Qué planes tenéis en cuanto a cine?
J.R.: «Tengo una película pendiente desde hace… siglos. Se titula ‘Las madres de Elna’, Elna es un pequeño pueblo francés cercano a dos playas en las que se refugiaron muchos españoles a primeros de 1939. En Elna había una enfermera suiza que rescataba a mujeres españolas de los campos de concentración y las llevaba a la maternidad para que parieran en condiciones. Nacieron casi 600 niños, pero en torno a 1942 los alemanes cerraron la maternidad. Es un proyecto que llevo años queriendo producir y ahora lo voy a hacer sí o sí.»
A451: No suena barato…
J.R.: «No, no lo es, es recrear una época, necesita un casting potente… En 2023, voy a dejar de lado algunas cosas para centrarme en sacar esta película adelante. Como sabes, The Mediapro Studio aboga por la autofinanciación, esa es la verdadera independencia, después sí solicitaremos ayudas, como siempre. Daremos más detalles de esta película en cuanto los tengamos cerrados.”
A451: ¿Qué otros próximos proyectos de cine mencionarías?
J.R.: “Ninguno de la envergadura de ‘Las madres de Elna’. Estamos produciendo 23 series de todo tipo y condición, no es poco trabajo.”
A451: ¿Hasta cuándo calculas que seguiremos con estos volúmenes locos de producción?
J.R.: “Creo que quedan diez años, diría que hasta 2030 seguiremos con un volumen alto de producción. Acaba de empezar la guerra por los suscriptores, las plataformas están en 500 millones de clientes y calculo que querrán llegar a los mil, las grandes marcas como Disney, Prime Video o Netflix van a ir a por todas, algunos servicios se quedarán por el camino, pero se seguirá pidiendo cantidad y calidad, eso es bueno para todos y el papel del productor será fundamental en la industria.”