La televisión autonómica de Baleares, IB3, nació en 2005 y desde ese primer momento empezó a producir ficción, cuenta el actual director de la cadena, Joan Carles Martorell, que ocupa el cargo desde el 2016.
«En esos primeros años de bonanza económica – prosigue- el presupuesto de la autonómica rondaba los 150 millones de euros, actualmente cuenta con 30 millones para todo y de esa cantidad solo 7,2 millones de euros se destinan a la producción de contenidos».
En los primeros años el modelo del canal autonómico en el ámbito de la producción de ficción consistía fundamentalmente en coproducir con productoras de la península, «con mucha experiencia en el ámbito nacional», que se asociaban con productoras locales, pero todo ese cuento de hadas finaliza con la crisis económica de 2008, cuando se recorta de manera importante el presupuesto de la televisión autonómica, lo que lleva a la práctica desaparición de la ficción de producción propia durante unos años.
En 2013 entran en juego nuevas productoras más humildes, que se adaptan a los nuevos tiempos y a los nuevos presupuestos de producción, mucho más limitados. Comienzan a producirse entonces sitcom menos ambiciosas que tienen buena acogida entre la audiencia, como por ejemplo ‘Hotel Bellavista’. «Se trata de comedias familiares para el consumo exclusivo a nivel autonómico en las cuatro islas», explica Martorell.
En 2016 entra precisamente el nuevo equipo liderado por Joan Carles Martorell, que impone nuevas estrategias, como por ejemplo intentar mejorar la imagen del canal autonómico entre la opinión pública, con el objetivo último de poder llegar a todos los extractos de la sociedad balear. Dentro de las nuevas líneas estratégicas también estaba apostar por unos contenidos de ficción diferentes. Joan Carles Martorell cuenta a Audiovisual451 la situación actual de la producción de ficción en la televisión pública de Baleares.
Audiovisual451: ¿Qué iniciativas destacarías de esta estrategia continuada de IB3 en producción propia de ficción en los últimos años?
J.C.M: “Uno poco fijándonos lo que hacía otros como Amazon, en 2014 hicimos una convocatoria abierta de proyectos de piloto de series de comedia y recibimos 25 proyectos de los cuales seleccionamos tres, a través de una comisión técnica. Esos tres pilotos se produjeron por encargo y se emitieron una misma noche en el Teatro Principal de Palma y también se subieron también a Internet. Los ciudadanos tuvieron 72 horas para votar cuál de los tres pilotos era el que se convertía en serie. Ganó ‘Mai neva a Ciutat’, una comedia millennial”.
A451: ¿Solo se destinaba a empresas de Baleares?
J.C.M: “Todas nuestras convocatorias están abiertas a compañías de toda Europa, por Ley, no podemos discriminar. Pero como tenemos un presupuesto tan bajo -somos de las televisiones más pobres de España en ese sentido- a muy pocas productoras nacionales les seduce este tipo de convocatorias. Había alguna, pero sobre todo se presentaron productoras locales. Con esta convocatoria había una doble jugada, por una parte queríamos romper dinámicas de los productores habituales y a la vez abrir la puerta a nuevas empresas que demostraban mucha energía a pesar de su inexperiencia. Estamos muy satisfechos con los resultados y más teniendo en cuenta los costes del producto. Esto nos animó y pensamos que era un camino, pero no podía ser el único”
A451: ¿Por qué? ¿Qué otros caminos habéis explorado?
J.C.M: “Porque si haces solo este tipo de productos te puedes cargar las audiencias convencionales. La comedia ‘Mai neva a Ciutat’, producida por Nomad Vision y Espai Temps, tuvo mucha repercusión en un determinado sector de la población y consiguió que muchos jóvenes que no veían nunca IB3 se acercaran. Luego decidimos hacer un thriller policiaco como ‘Treufoc’, que también nos fue muy bien. En este caso ganó en 2018 el Premio Pello Sarasola como el Mejor Programa de las Televisiones Autonómicas que otorga FORTA. Y para tener un mayor abanico, hicimos un producto más familiar como ‘Amor de cans’, la primera vez que se adaptaba una obra literaria escrita por una mujer en IB3
A451: ¿Algo más para llegar a todos, tal y como como estaba previsto en la estrategia?
J.C.M: “El cuarto producto fue el contrapeso a todo esto, un producto familiar clásico pero con una mirada moderna en cuanto a temática: LGTBI, Alzheimer… Esto es ‘Pep’, una serie que desde el punto de vista audiovisual es la más convencional de todas, la menos arriesgada, pero la que más éxito ha tenido, sin lugar a dudas. Se convirtió en el mejor estreno de la última década en IB3”.
A451. ¿Y qué vida han tenido estos contenidos más allá de IB3?
J.C.M: “Pues ahora están funcionando en plataformas como Filmin, que ha sido la que más facilidades ha dado a las producciones en lengua catalana. TV3 también se interesó por ‘Mai neva a Ciutat’ y ‘Treufoc’ firmó contrato con la distribuidora francesa Federation Entertainment, por ejemplo”.
A451. ¿Y qué será lo próximo?
J.C.M: “Estamos empezando a experimentar con miniseries, por ejemplo ‘Fúria’ de Toni Bestard (se estrena el 19 de diciembre) y a partir del año pasado, después de hacer mucha pedagogía, conseguimos entrar en el mundo de la coproducción, porque hasta entonces todo eran encargos que se hacían. Pensamos que la búsqueda de alianzas puede ser una solución a la situación actual”
A451: ¿Cómo se presentan entonces los próximos meses?
J.C.M: “El año que viene vamos a estrenar ‘Mòpies’, que es una especie de ‘Stranger Things’ ambientada en Mallorca. En esta coproducción están Espai Temps, A Punt, TV3 y nosotros. Son cuatro episodios. Luego tenemos otra serie titulada ‘Sicília Sense Morts’, sobre corrupción política, una especie de ‘House of Cards’ a la balear, salvando todas las distancias, claro. También está basada en un libro de muchísimo éxito, en esta producción está Filmin”.
A451: ¿Cómo quedan enmarcados todos estos títulos en la estrategia de IB3?
J.C.M: “La idea es lo que te explicaba antes, intentar atender en la medida de lo posible el mayor número de necesidades, que quizá antes no lo estaban. En la etapa anterior se trabajaba solo el audímetro y con ello el target principal, entiendo que el mundo de la televisión es así y no soy nadie para cuestionarlo, pero como servicio público creo que una televisión tiene la misión de no solo dirigirse al espectador que más ve la televisión lineal en directo, también incluso a los que viven fuera de Baleares. Por ejemplo, con ‘Mai neva a Ciutat’ fue muy bonito porque empezamos a recibir mensajes de gente que vivía en Dubai, en Sevilla… estaban encantados con el producto”.
A451: ¿Cuántas series estáis estrenando al año?
J.C.M: “Intentamos hacer un prime time a la semana con nuestra producción propia, pero no nos lo podemos permitir, no nos da el presupuesto. Sí que hemos participado en otras producciones con FORTA, en series como ‘La sala’ y ‘Operación Marea Negra’. Vamos a entrar en coproducción con TV3 y A Punt en ‘Després de tu’, que están haciendo las productoras Albena Produccions y Minoría Absoluta. Pero sí, lo ideal sería poder tener un prime time semanal con ficción propia, en la época boyante de principios de los 2000 había dos prime time semanales y una tira diaria”.
A451: Recapitulando, ¿qué veremos próximamente en IB3?
J.C.M: “Estrenamos ‘Fúria’ en diciembre, el año próximo se estrenará Mòpies’, ‘Sicília Sense Morts’ y la tercera temporada de ‘Pep’, para enero, que finaliza”.
A451: ¿Cómo se puede acercar el sector de la producción a IB3?
J.C.M: “Nosotros tenemos un potencial importante que son las 10 millones de personas que entienden la lengua catalana. Es una realidad de mercado, es una lengua viva y los servicios públicos de estos territorios vemos una oportunidad. A parte de atender a nuestro territorio intentamos llegar un poco más allá, aunque apoyar nuestro tejido industria local sea la prioridad. En definitiva, tratamos de ver qué podemos hacer en lengua catalana en coproducción con otros territorios donde se habla, empoderando a las productoras de estos territorios para que den un servicio a todos. Este es un proceso que nació hace poco más de un año y la pandemia interrumpió un poco, por eso los estrenos vienen ahora para 2022. Si un productor quiere contactar con nosotros tiene que tener en cuenta, insisto, que nuestra prioridad es el tejido industrial regional, el territorio y el idioma local pero estamos abiertos a historias vinculadas con nosotros”
A451: ¿Tenéis una convocatoria concreta?
J.C.M: “No, estamos todo el año abiertos a hablar”.
A451: ¿Cómo se presenta el primer semestre en cuanto a mercados internacionales?
J.C.M.: “No viajamos mucho, la verdad, el presupuesto también nos limita, pero sí nos gustaría estar en los principales mercados. Somos conscientes de que el mundo ha cambiado, la ficción es cada vez más importante, hay muchos retos por delante para las televisiones públicas. Al fin y al cabo, la ficción explica tu propia historia, tu cultura… y ahora más que nunca tiene la capacidad de traspasar fronteras.”
A451: ¿Con qué parte de los derechos de las producciones os quedáis?
J.C.M: “Cada proyecto es un mundo, pero intentamos quedarnos con la mayor parte de los derechos. Como servicio público tenemos que garantizar que lo que pagamos esté accesible al ciudadano de todas las formas posibles, sin barreras. Al producir en lengua catalana a veces ya no tienes competencia en otros territorios del Estado, por ejemplo. Recientemente, hemos estrenado la serie ‘Piratas’ y nosotros tenemos el máster en catalán, pero Canal Historia tiene su parte en castellano. Un espectador de Sevilla quiere ver la serie en Canal Historia. Esto nos permite una frontera natural a la hora de repartir derechos y licencias”
A451: ¿Hay algún género concreto que estéis buscando actualmente?
J.C.M: “Está claro que la dramedia es un producto que funciona muy bien y es de los más complicados de hacer, pero la realidad es que no estamos buscando nada concreto. Lo que me gustaría es que lo que se ha sembrado pueda tener continuidad y estabilidad, ese es el reto. También en Baleares se está apostando mucho por traer rodajes de fuera y eso está muy bien, porque nuestros técnicos locales en verano trabajan para alguna plataforma y en invierno para IB3”.
Según datos del Programa MEDIA, España es el segundo país de la Unión Europea en cuanto a número de horas de ficción de televisión producidas, después de Alemania y por delante de Francia. El Gobierno ha puesto los ojos en este frenesí productivo, Pedro Sánchez presentó haces unos meses el plan de impulso al sector audiovisual, uno de los ejes de la agenda España Digital 2025. El plan tiene prevista una inversión pública de 1.603 millones de euros para el periodo 2021-2025 y su meta es aumentar un 30 por ciento la producción audiovisual realizada en España al final del periodo, además de convertir nuestro país en un polo de atracción de inversión internacional y talento y con un ecosistema de industria-servicios reforzado para exportar y competir en los mercados internacionales.
El efecto ‘Casa de papel’ ha puesto el foco casi exclusivamente en la aportación de las plataformas a este incremento de la producción de ficción, pero la realidad es que además de estas plataformas online y las televisiones generalistas en abierto que nunca han dejado de producir ficción, el papel de las televisiones autonómicas también es importante y muy pocas veces se valora. Es indiscutible que las Comunidades históricas con idioma propio como Cataluña, País Vasco y Galicia han puesto su granito de arena (y más de uno) para construir un tejido industrial regional que en muchos casos ha traspasado sus territorios.
Sin ir más lejos, el pasado 11 de diciembre ‘Hierro’ de Movistar+, una producción de la productora gallega Portocabo que comenzó produciendo exclusivamente para la Televisión de Galicia, se alzó con el Premio José María Forqué de EGEDA a la mejor serie del año. Es un ejemplo, quizá no el mejor pero sí el más reciente, de los cientos que se podrían dar sobre la importancia que han tenido y tienen las televisiones autonómicas en el ecosistema de la producción de ficción en España.
Y no solo los tres territorios mencionados, cada vez son más las cadenas públicas autonómicas que apuestan por unos contenidos de ficción más exportables. Un caso paradigmático es la propia IB3 de Baleares, que aquí se expone, pero tampoco se pueden olvidar otras regiones que nunca han dado la espalada de las series propias como Andalucía o Valencia. La localidad malagueña de Coin acoge desde el 8 de noviembre la grabación de ‘Desconocidas’, la nueva serie de ficción coproducida por las autonómicas públicas Canal Sur y À Punt. Asimismo, Telemadrid, Castilla La Mancha y Aragón Televisión ya han adquirido los derechos de emisión de esta serie. Por cierto, en este panorama sorprende que Telemadrid, la televisión autonómica de la Comunidad más importante a nivel audiovisual de España, no apueste por la producción de ficción propia como hacen sus compañeras de FORTA, otro de los enigmas del audiovisual español.
