A sus 68 años, José Antonio Félez recibirá el sábado 11 de diciembre, en la ceremonia de entrega de los Premios Forqué, la Medalla de Oro de EGEDA por «ser un productor altamente comprometido con el audiovisual español, que se involucra en sus proyectos desde su génesis, y que está íntimamente ligado a la trayectoria cinematográfica de figuras clave en el cine y las series nacionales contemporáneas como Alberto Rodríguez, Daniel Sánchez Arévalo, Achero Mañas, Adolfo Aristarain, Rafael Cobos o Santi Amodeo».
EGEDA acierta de lleno una vez más al homenajear a uno de los productores españoles más importantes de las últimas décadas, uno de los principales continuadores de la tradición del «productor creativo» y que precisamente tuvo como maestro al gran gurú de ese perfil: Elías Querejeta.
Félez, que ha sido el productor de obras como ‘El bola’, ‘AzulOscuroCasiNegro’, ‘La isla mínima’, ‘Primos’, ‘El hombre de las mil caras’ o ‘La Peste’, es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y PDG por el IESE. Su primera experiencia en el sector audiovisual fue como segundo del Consejero Delegado de CBS/FOX en España a finales de los años 80. Entre 1995 y 1998, colaboró con Elías Querejeta y Prime Films. Durante esos mismos años, el productor también ostentó la secretaría general de la Unión Videográfica Española, además de la secretaría general de la Asociación de Distribuidores y Editores de Software de Entretenimiento (ADESE). Entre 2012 y 2018 fue presidente de AECine.
Sería en 1998 cuando realizaría su primera producción ejecutiva de un largometraje con ‘El faro del sur’, de Eduardo Mignogna, galardonada con el Premio Goya a la Mejor película de habla hispana en su 13ª edición. Ese mismo año, fundaría Tesela Producciones Cinematográficas. En el año 2009, fundó junto a Cristina Sutherland Atípica Films, la productora que lidera actualmente. Félez ha contado a Audiovisual451 su travesía en el mundo de la producción audiovisual.
Audiovisual451: ¿Qué te llevó hacia la producción audiovisual?
José Antonio Félez: “Mi llegada al mundo de la producción fue fruto de la casualidad. De siempre me había gustado el cine pero nunca me había planteado dedicarme a ello, sinceramente. Mi anterior etapa fue en el sector financiero, como directivo en varias empresas. En un momento determinado de esta etapa, el que fuera entonces consejero Delegado de CBS-Fox, Ele Juárez, me llamó para que llevase allí la parte financiera, como número dos de la compañía. CBS-Fox era un joint venture entre CBS, que entonces hacía bastante producción cinematográfica y tenían también un tercio de TriStar, y Fox, que era de 20th Century Fox. El cometido era comercializar las películas en soporte videográfico, porque era el gran momento del sector del vídeo, que era una máquina de hacer dinero. Ahí estuve cuatro años, pero una vez que todo estaba organizado dejó de ser un reto, porque solo comercializábamos títulos. Entonces volví a la dirección y la gestión empresarial”.
A451: Cualquiera pensaría que dabas por terminada de manera prematura tu carrera en el sector audiovisual…
J.A.F.: «A Ele Juárez le nombran poco después presidente de Polygram Ibérica y me llama para que me responsabilizase de la parte audiovisual. Lo que hacía Polygram era crear compañías en los principales países para producir y distribuir cine. En aquella época producen títulos como ‘Fargo’, ‘Cuatro bodas y un funeral’, ‘Priscilla la reina del desierto’… que son todas producciones paradigmáticas. Me incorporé a la compañía a finales de 1993 y en mayo del año 94, Philips, que era la dueña de Polygram, decide no continuar. Me voy y me planteo entonces montar mi propia empresa que tenga de algún modo relación con el audiovisual. Me nombran secretario general de UVE, la Unión Videográfica Española, donde estaban las multinacionales y las empresas españolas más importantes de distribución en vídeo. También trabajé como consultor con Elías Querejeta y para Prime Films. Estuve trabajando con Elías en torno a tres años y es él el que me anima para dar el paso para montar Tesela”.
A451: No se puede tener mejor padrino en producción…
J.A.F.: “Así es, un padrino excelente. Mi primera experiencia real con el mundo de la producción audiovisual fue hacer la producción ejecutiva de una película de Eduardo Mignogna ‘El faro del sur’, donde trabajé también en el guión para repasar los diálogos del personaje de Ingrid Rubio. La película tuvo la suerte de ganar el Goya a la mejor película Iberoamericana de 1997. Esto fue lo que me decidió a montar una productora como Tesela”.
A451. ¿Y en Tesela el punto de inflexión fue ‘El Bola’?
J.A.F.: “Es que el punto de inflexión llega muy pronto, porque solo habíamos producido una película entes de ‘El Bola’. Fue un impulso espectacular. Era un proyecto en el que habíamos trabajado antes con Achero Mañas. Me llega en 1998 el guion, que tenía lo que era ‘El Bola’ y muchas más cosas, que es lo que suele pasar con los directores noveles, que quieren contar muchas cosas. Le dije que había que pulir ese guion, pero él pensaba que estaba para rodar ya. Se marcha porque tiene otro productor interesado, pero unos meses después me llama y me dice que no se entiende con ese nuevo productor. Yo le dije que estaba interesado pero si trabajábamos el guion, porque la idea me gustaba mucho.”
A451: ¿Cuánto tiempo pasó?
J.A.F.: “Rodamos la película a principios del año 2000, fue a San Sebastián pero no conseguí que fuera a Sección Oficial y pensé que a lo mejor tenían razón y tenía más sentido que estuviese en Zabaltegi, que entonces tenía más difusión que ahora. Sin embargo, yo sigo creyendo que en Sección Oficial igual habíamos ganado. Solo nos llevamos el premio de la Oficina Católica de Cine. Aquel año llevamos dos películas a San Sebastián, ‘El Bola’ y ‘El factor Pilgrim’, esta dirigida por Santi Amodeo y Alberto Rodríguez, que logró el Premio Especial del Jurado”.
A451. ¿Y cuándo llega la explosión de ‘El Bola’?
J.A.F.: “La película tuvo un recorrido muy bueno en salas, empezó muy bien, con muy buenas cifras y críticas. Llevábamos como unos cien millones de pesetas, que para una película así estaba muy bien. Cuando se anuncian las nominaciones a laos Goya tiene un nuevo tirón en los cines y cuando ganamos los premios fue increíble, fue multiplicar por 6,5 la recaudación. Fue espectacular.”
A451: Ahora eso no pasa…
J.A.F.: “No, no pasa. Por ejemplo, ‘La isla mínima’ antes de los Goya ya había tenido un recorrido exitoso en taquilla y los premios luego vinieron bien pero no al nivel de ‘El Bola’”.
A451: Además de dar la alternativa a un nuevo director, una constante en tu carrera, también aparecían nuevos rostros para el cine español, otra constante en muchas de tus películas…
J.A.F.: “Juanjo Ballesta salió de un casting que organizó Eva Leira, que entonces no se dedicaba a la dirección de casting, Eva se encargaba entonces de la figuración. Yo creo que ‘El Bola’ fue su primer trabajo de reparto y fue excepcional. Puede que viésemos a más de 2.000 niños. Juanjo (Ballesta) apareció muy rápido, lo teníamos claro todos, pero fue más complicado encontrar al amigo de ‘El Bola’. Fue una experiencia muy bonita, Achero hizo un gran trabajo. Hace poco volví a verla en un canal de cine español y me sigue pareciendo una gran película, ha envejecido muy bien”.
A451: Otros momentos importantes en tu carrera como productor es entrar en contacto con Alberto Rodríguez y Daniel Sánchez Arévalo, otros dos directores habituales en tus películas…
J.A.F.: “Alberto Rodríguez es simultáneo a Achero Mañas, en su caso con ‘El factor Pilgrim’. Era una película codirigida con Santi Amodeo. Con Daniel Sánchez Arévalo fue un poco más tarde.
A451: ¿Cómo los conoces?
J.A.F.: “En el caso de Alberto, veo un corto que hicieron con el apoyo de Canal Plus que se titulaba ‘Bancos’. Me gustó mucho, estaba también Álex O’Dogherty como protagonista. Contactamos con ellos, Alberto Rodríguez y Santi Amodeo, y de ahí salió ‘El factor Pilgrim’. Después hicimos la primera película de Alberto en solitario que era ‘El traje’, que rodamos en 2001. También hicimos ‘Astronautas’ de Santi Amodeo en 2002 y ‘Siete vírgenes’ de Alberto Rodríguez, que para mí es también una gran película, otra vez con Juanjo Ballesta y en la que aparece por primera vez Jesús Carroza. Después vendría ‘AzulOscuroCasiNegro’ de Daniel Sánchez Arévalo, que estuvo casi un año en los cines.”
A451: ¿Y cómo llegas a Daniel Sánchez Arévalo?
J.A.F.: “Daniel había ganado el Notodofilmfest con un corto de tres minutos titulado ‘Express’. En ese corto estaba como protagonista Ana Wagener, que es amiga mía y me llamó para hablarme del talento Daniel. Curiosamente, también Achero Mañas, que era ese año presidente del jurado de Notodofilmfest, me llama para decirme lo mismo, que tenía que conocer a Daniel Sánchez Arévalo. Entonces contacto con él, pero no tenía ningún proyecto de largometraje. Tenía una carrera importante como cortometrajista, con cortos que el mismo se producía con gente muy cercana, con pocos medios y con Antonio de la Torre casi siempre como protagonista… Quedamos en hacer algo pero sin prisa, sería el año 2004. Daniel había escrito una novela que tenía que ver con ‘AzulOscuro…’ pero que no era exactamente. Me la mandó para ver si de ahí podría salir una película. Me gustó mucho y empezamos a ver si podía salir de ahí un guion para un largometraje”.
A451: Una nueva alternativa a un director y también el descubrimiento para el gran público de varios actores hoy ya consagrados como Antonio de la Torre, Raúl Arévalo y Quim Gutiérrez…
J.A.F.: “Creo que en ‘AzulOscuroCasiNegro’ hay momentos brillantes y es cierto ahí estaban Antonio de la Torre, Raúl Arévalo y Quim Gutiérrez. Antonio de la Torre no tenía claro lo de dedicarse a la interpretación, pensaba que no podía dedicarse profesionalmente a esto. Tenía su puesto seguro como periodista de Canal Sur y no lo veía claro. Entonces quizá un periodista vivía mejor que un actor, incluso hoy también si no trabaja con frecuencia, aunque el periodismo está como está, pero los actores muchas veces lo pasan mal porque no les llaman, además están muy expuestos a todo. Es una profesión muy difícil”.
A451: Es que es muy relevante la lista de actores que han dado a conocer tus películas: Antonio de la Torre, Juanjo Ballesta, Nieve de Medina, Jesús Carroza, Raúl Arévalo, Quim Gutiérrez…
J.A.F.: “Y Adriana Ugarte en ‘Cabeza de perro’… Hay un montón, es cierto y muchos han repetido y les ha ido muy bien”
A451: ¿También técnicos?
J.A.F.: “Claro, por ejemplo el director de fotografía Álex Catalán; la directora de producción Manuela Ocón, que había hecho ya algo antes en producción pero no como directora de producción; Fernando García en vestuario; Yolanda Piña en maquillaje y peluquería…”
A451: Muchos de ellos han sido premiados por tus películas…
J.A.F.: “Afortunadamente muchos de ellos han ganado Goyas con mis películas y con las de otros, lo que significa que siguen trabajando”.
A451: ¿Por qué crees que en España no se valora la figura del productor creativo?
J.A.F.: “No sé lo que pasa en otros países, quizá es una figura más reconocible, aquí está más tapada por directores, actores e incluso por guionistas. Yo creo que hay muchos prejuicios con los productores, que solo nos importa el dinero, que hacemos trampas…”
A451: La mayoría de la gente no sabe qué hace exactamente un productor de cine…
J.A.F.: “Es que es complicado, si yo te tengo que contestar qué es un productor de cine, te puedo contar mi experiencia, lo que soy yo, lo que yo hago, pero hay muchos perfiles, no es un concepto unívoco. No es como un maestro, porque hay muchos tipos de productor en España”.
A451: Claro, porque en ocasiones incluso tú has participado en los guiones…
J.A.F.: “Sobre todo al principio de mi carrera me gustaba colaborar, pero nunca los he firmado, por una razón muy simple, porque creo que hay ser muy respetuoso con el trabajo de los guionistas, es un tema de pudor también”.
A451: Mójate, ¿cuál es tu producción favorita?
J.A.F.: “Todas, no puedo elegir, porque todas me han dado alegrías, es muy tópico, pero son como los hijos, no se puede elegir. Pienso en ‘Roma’, ‘La isla mínima’, ‘Primos’… es un mosaico y cada una de esas teselas cumple su función, crean una imagen coherente.”
A451. ¿Qué era más difícil producir cuando empezaste o ahora?
J.A.F.: “Sin duda, ahora. Yo te hablo de producir cine, no series. Antes había unos caminos muy claros en la producción cinematográfica y, por ejemplo, la situación de Televisión Española no era la de ahora. Mi sistema era el mismo, trabajaba fundamentalmente con TVE y Canal Plus, era muy fiel en los socios. Después tenía un acuerdo estable con la distribuidora Alta Films. Al final había un camino y un esquema que funcionaba, no para hacerte rico pero si lo hacías bien, si analizabas el proyecto, lo financiabas bien y no hacías locuras con el presupuesto, las cuentas salían. Con aquello que no tenías en cuenta previamente como las ventas internacionales y el vídeo, si cerrabas el 85 por ciento de la financiación del proyecto antes, al final podías perder un poco o ganar un poco. Como te digo el camino era más claro que ahora, estrenabas en salas de cine, televisión de pago, vídeo en alquiler y venta, televisión en abierto… Era un recorrido ideal para películas de presupuesto medio”.
A451: ¿Para películas más baratas?
J.A.F.: “Nunca he hecho películas baratas, por ejemplo ‘El Bola’ no era barata, era una película de ocho semanas de rodaje y con 35.000 metros de negativo para rodar que para una ópera prima era una cifra inusual”.
A451: Volvamos al presente, ¿son entonces la plataformas una bendición o una maldición?
J.A.F.: “Ahora hacer cine es más complicado, pero las plataformas son una bendición, sin duda, yo no podría haber hecho una serie como ‘La Peste’, por ejemplo”.
A451: Tus presupuestos también han ido creciendo paulatinamente, has hecho producciones más ambiciosas con el paso de los años…
J.A.F.: “Es normal, los proyectos han ido creciendo a la par de la carrera de algunos directores. Pero también últimamente hemos estado barajando con Alberto Rodríguez un proyecto muy pequeño, no como ‘Modelo 77’ que es muy ambiciosa”.
A451: Por cierto, la pandemia echó por tierra muchos de vuestros planes, ¿no es así?
J.A.F.: “La pandemia nos ha afectado mucho. Creo que lo último que rodamos fue la segunda temporada de ‘La Peste’, porque el año pasado no rodamos lo que teníamos previsto. Le dimos mil vueltas a la posibilidad de producir algo y no fue posible, no hubo manera, todos los caminos que se intentaban se acababan cerrando. Es duro, porque tienes una estructura que mantener y ahora todo se ha comprimido para el próximo año”.
A451: Y viene una nueva generación en Atípica con tu hijo Alberto…
J.A.F.: “Ha sido una casualidad, además yo no me pienso retirar. No veía que ninguno de mis hijos quisiera seguir mis pasos, he sido muy respetuoso con lo que ellos querían, alguno había pasado en algún momento de su vida profesional por la productora pero nada más, cuando encontraban otra cosa, se iban. Ahora, en el año 2019, Alberto me dijo que a lo mejor quería trabajar en Atípica. No me hice ilusiones, él viene de Disney y en septiembre de 2019 se incorporó. Pero creo que estamos todavía a prueba, le tiene que gustar esto y decidirá si quiere seguir adelante próximamente. Tengo cinco hijos, dos hijas y tres hijos. Solo uno quiere seguir estos pasos. Luego está Tania, que trabaja en HBO, antes estaba en Netflix. Alberto y Tania son los dos que tienen relación con el audiovisual, los otros no, uno es consultor, otro economista del Banco de España… nada que ver con esto, iba a decir afortunadamente (ríe)”.
A451: ¿Cuántas personas forman el equipo estable de Atípica Films?
J.A.F.: “Somos once ahora mismo.”
A451: ¿Cuántas producciones hay que hacer anualmente para mantener una estructura así?
J.A.F.: “Pues depende del tamaño de la producción o producciones. Si es un muy importante, con una vale, si son más pequeñas pues tienes que hacer dos o tres al año.”
A451. ¿Cómo es un día en la vida de José Antonio Félez?
J.A.F.: “Me levanto muy temprano, como a las 6:00 de la mañana, soy un hombre diurno, me gusta madrugar. Desayuno, hago un poco deporte y a trabajar. Unos días termino a las 20:00 otros a las 19:30 o antes. Y me voy a casa y procuro ver una película y leer algo que no tenga que ver con el cine.”
A451: ¿Y cuándo hay un rodaje?
J.A.F.: “Antes me gustaba más estar en rodaje, ahora con la pandemia lo que haces allí es estorbar. Antes pasaba mucho tiempo en los rodajes, me gustaba mucho, pero cada vez me da más pereza. Son muy aburridos los rodajes, la verdad. Cuando son directores noveles a lo mejor es más importante tu presencia, porque pueden tener más dudas”
A451: Ya que no has elegido una película ¿con qué secuencia o secuencias te quedarías por su complejidad o por algo especial?
J.A.F.: “Hay una en ‘Primos’, no por difícil, sino por el pobre Antonio de la Torre, que se tenía que tirar a un puerto, en Cantabria. Era primavera pero hacía mucho frío, de hecho el 7 de junio en el hotel en el que estábamos tuvieron que poner la calefacción. Además el agua estaba muy abajo porque la marea estaba baja, fue uno de esos momentos en lo que entiendes lo que significa la profesión de actor. La gente ve solo la parte buena. Creo que eso lo rodamos a principio de mayo, con un tiempo muy malo. Ya habíamos rodado todo lo que se podría rodar en interiores”.
“Como escenas difíciles por ejemplo en ‘La Peste’ la secuencia del Auto de Fe, fue muy complicada. También varias secuencias de ‘Grupo 7’, con una persecución que sigue un dron… Todas las películas tienen su dificultad esa es la realidad”.
A451: ¿Esperas seguir descubriendo nuevos talentos?
J.A.F.: “Espero que sí. Ahora hay proyectos que me hacen mucha ilusión. La idea cuando empecé era precisamente esa, hacer largometrajes de directores noveles y acompañarles en su camino si salía bien”.
A451: ¿Sigues leyendo muchos guiones?
J.A.F.: “Muchísimos, pero nunca he producido un guion que me haya llegado acabado sin más. Siempre he producido películas en las que se ha trabajado previamente, no un guion, lo normal era que llegase una idea, una sinopsis, si nos gustaba se hacía un tratamiento, si nos gustaba ya nos metíamos con el guion. De cuatro líneas sale una película y esa es la parte maravillosa de este trabajo. Hacer una película es como el trabajo de un arquitecto. Primeros haces un boceto en un papel, luego los planos, luego eliges los materiales, el equipo… Es como hacer un puzle gigante en el que también tienes que construir tú las piezas. Esta es una profesión tan difícil como apasionante, yo, que hecho otras cosas en la vida, lo puedo decir. De una producción a otra surgen nuevos retos y las cosas cambian y siempre hay que adaptarse porque si no, estás fuera. Para mí es de las mejores profesiones”.
A451: Hablando de cambios, ¿cómo valoras los cambios normativos que se avecinan para el sector?
J.A.F.: “Yo simplemente espero que los cambios sean equilibrados. El audiovisual es un todo y contentar a todos este sector tan heterogéneo será difícil. Con la Ley de Comunicación Audiovisual lo que deseo es que no se legisle contra nadie.”
A451: ¿Cómo te comunicaron la concesión de la Medalla de Oro de EGEDA?
J.A.F.: “Me llamó Enrique Cerezo, con el que tengo muy buena relación. Para mí es un honor y me sorprendió mucho. Esta vez voy a escribir el discurso y lo voy a leer, porque una de las cosas que me horrorizan cuando tengo que agradecer un premio es olvidarme de alguien, me bloqueo, lo paso fatal”.
A451: ¿Qué tienes previsto para el año 2022?
J.A.F.: “Además de la película ‘Modelo 77’ de Alberto Rodríguez, y ‘Las de la última fila’, una ficción original de Netflix de Daniel Sánchez Arévalo, estamos también con otra serie de Netflix que es ‘La chica de nieve’, adaptación de la novela homónima de Javier Castillo, que empieza a rodarse el 31 de enero. También estamos desarrollando un proyecto de Rafael Cobos que se titula ‘El hijo zurdo’, para Movistar+ y tenemos previsto un largometraje titulado ‘Enemigos’, que dirigirá David Valero, eso es lo más inmediato.”