La crítica norteamericana ha sido unánime con ‘The Killing’. Todos coinciden en que esta serie es el mejor thriller producido para la televisión desde que David Lynch revolucionara la pequeña pantalla al principio de los 90 con ‘Twin Peaks’. ‘The Killing’ nos mete en la atmósfera gris y desolada de la húmeda Seattle, el escenario perfecto para la investigación de homicidios.
‘The Killing’ se muda en noviembre a FOX, donde se emitirá en primicia su cuarta y última temporada. Será todos los domingos a medianoche en formato de doble episodio, a partir del 2 de noviembre.
Los nuevos episodios arrancan justo después del impactante final de la tercera temporada, que ha obligado que Sarah Linden (Mireille Enos, ‘Guerra Mundial Z’) se enfrente a uno de los momentos más duros de su vida. Además, a ella y a Holden (Joel Kinnaman, ‘Dinero fácil’) les asignarán un nuevo caso: el asesinato salvaje de toda una familia, en la que sólo ha sobrevivido el hijo, Kyle (Tyler Ross, ‘Zombieland’), que automáticamente se convierte en uno de los principales sospechosos.
El origen de ‘The Killing’ es resultado de la adaptación que la cadena norteamericana AMC (‘The Walking Dead’, ‘Mad Men’) y la guionista Veena Sud (‘Caso abierto’) han realizado de la serie danesa ‘Forbrydelsen’ (estrenada también como ‘The Killing’ fuera de Escandinavia), emitida en España por AXN. La versión estadounidense no sólo no traiciona al drama original, sino que lo enriquece asumiendo riesgos propios, como la introducción de otras variantes o el propio estreno esta nueva temporada, en la que se propone una trama inédita en televisión.