La comedia musical ‘Polvo serán’, la película más ambiciosa a nivel de producción de Carlos Marques-Marcet (‘10.000 KM’, ‘Los días que vendrán’), ha inaugurado la 69ª edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci). En el filme, el director, guionista y montador pone una vez más el foco sobre la condición humana y propone un viaje emocional en forma de tragicomedia musical sobre las consecuencias de elegir poner fin a la propia vida.
Rodada en Barcelona, los Alpes italianos y Suiza, ‘Polvo serán’ es una producción de la compañía Lastor Media de Tono Folguera y Ariadna Dot, junto a la suiza Alina Film de Eugenia Mumenthaler y David Epiney, y la italiana Kino Produzioni de Giovanni Pompili. El filme cuenta con la colaboración del ICAA, ICEC y MEDIA – Europa Creativa, más el apoyo de RTVE, Movistar Plus+, Direzione Generale Cinema e Audiovisivo del Ministero della Cultura DGCA – MIC, IDM Film Fund & Commission Südtirol Alto Adige y Eurimages. La película será distribuida en cines españoles por Wanda Vision y Elastica Films. “Esta es la cuarta película que producimos con Carlos y sin duda es la más ambiciosa de todas, de presupuesto, de producción, aquí hay una coproducción de tres países y, de hecho, hay más de 20 fondos financieros en esta película”, ha afirmado Ariadna Dot, quien asegura que todo el proceso ha sido muy orgánico.
“Carlos nos habló de que tenía esta idea, al principio elaboró un documento de unas 90 páginas con los detalles de la historia, ahí había de todo, llegó la semana del COVID cuando nos encerraron, y fue cuando nos lo envió, el tema era la muerte, me acuerdo que no estaba yo muy contenta, lloré mucho, pero a partir de ahí hubo un proceso de ir destilando las ideas, teniendo muy claro que íbamos a acompañar a Carlos, y que con él vamos a estar todo el rato”, ha apuntado para explicar que lo primero fue tener un guion que estuviera ya muy avanzado, muy definido para empezar ya a financiarlo “porque es verdad que cuando es una coproducción todo es un poco más largo, de hecho, desde que tuvimos el guion para financiar hasta que empezamos a rodar, el tiempo fue más largo, pero es verdad que para nuestra sorpresa, una vez que empezó a salir, salió todo de manera fluida”.
Giovanni Pompili ha indicado que “soy coproductor italiano, y es mi segunda película con la compañía Lastor Media, y no es la última porque ya estamos con otra en camino; ha sido un trabajo de verdad súper intenso, de proximidad, a nivel de intercambio, de discusión creativa, no solo productiva, hemos sido un equipo de productores que hemos trabajado muy en cercanía con el director y con el equipo artístico”. Sostiene que para él como italiano, “ha sido un privilegio poder trabajar con talentos españoles, porque sí, el cine italiano ha tenido una buena época, pero creo que ahora la época es del cine español y trabajar con los talentos que han escrito esta película para mí es un privilegio”.
En ‘Polvos serán’, el argumento presenta a una mujer, interpretada por Ángela Molina, que decide viajar a Suiza junto a su marido para poner fin a su vida. Es una historia de muerte, pero también de amor incondicional, en la que han colaborado la cantante María Arnal y la compañía de danza La Veronal.
Marques-Marcet se planteó investigar sobre el final de la vida tras conocer la existencia de una clínica en Suiza destinada a ayudar a los que deseaban voluntariamente dejar de vivir. “Esto nos llevó a pensar cómo abordar la muerte; algo que es tan difícil, porque es decidir cómo hablar de algo que es el final de uno mismo. Creo que habría que empezar antes a hablar de la muerte. Cuando antes mejor, ¿no?”, ha cuestionado en la presentación.
La actriz Ángela Molina se enfrentó a la responsabilidad de interpretar a una mujer que decide abandonar a sus hijos antes de tiempo y, además, acepta que su marido también tome esa decisión. “Me amo a mí misma en esta historia; cuando toma esa decisión, se crea un dilema en mí y un desarrollo bestial, porque yo también tengo hijos y sé que, en un sentido, pueden sentirse desamparados”, ha dicho y sobre la decisión de morir voluntariamente, la intérprete ha declarado que “pienso que es para todos el mismo viaje, y hay tantas muertes como personas. Creo que cada uno tiene que asumir la responsabilidad de esa relación que ha de establecer con la idea real de que tenemos que hacer un camino que se acerca a nuestra propia dignidad y si cabe hacerlo como deseamos y con una sonrisa de agradecimiento, porque la vida y el amor son más grandes que la muerte”.
El director ha coincidido con Ángela Molina en que amor y muerte están muy ligados, por lo que se planteó además investigar los límites entre el amor y la dependencia en el guion que ha coescrito con Clara Roquet y Coral Cruz. “Dependemos de otras personas, y a veces esa dependencia puede llegar a ser muy tóxica. Yo no tengo una respuesta, pero me interesaba mucho encontrar ese límite. El amor no es siempre incondicional, pero no por eso deja de ser una experiencia interesante”, ha agregado.
El actor chileno Alfredo Castro, que interpreta al marido de Ángela Molina, y que ha tomado un vuelo de 18 horas solo para estar en esta presentación, ha apuntado que “personalmente, creo que es una película sobre el amor más que sobre la muerte; principalmente, el de un amor sin barrera, que supera a los hijos y supera el amor a la vida” y ha añadido que, en su opinión, el filme aborda también otros temas como la migración, la homosexualidad o la eutanasia, lo que “me ha obligado a transitar por lugares de la actuación desconocidos para mi hasta el momento”.
En ‘Polvo serán’, que ganó el premio a mejor película de la sección Platform en el Festival de Toronto, Marques-Marcet une al lenguaje fílmico el musical y el de la danza. María Arnal firma la música, mientras que la compañía La Veronal, dirigida por Marcos Morau, participa en una escena clave para el director: “tienen una forma de acercarse a lo oscuro, a lo inefable, pero también con un humor extraño, absurdo, que creo que son los únicos que podían darle ese tono”.