La Junta Directiva de la Academia de Cine acaba de aprobar la adhesión al Estatuto para la Producción Verde, que recoge una serie de pautas para reducir el impacto medioambiental de la producción audiovisual y propone soluciones sostenibles ante las necesidades habituales en un rodaje.
Se trata de una iniciativa de European Producers Club (EPC), asociación que integran más de 100 productores de Europa.
En este texto, se establece una serie de criterios para ser «productores verdes» y se incide en la urgencia de adoptar medidas ante las consecuencias medioambientales que tiene un rodaje.
Los departamentos técnicos de transporte (usar coches eléctricos o híbridos), localizaciones (valorar en la elección la accesibilidad en transporte público y la conservación de la naturaleza), eléctricos (utilización de energías renovables y limitación del uso de generadores), diseño de producción y construcción de escenografías (utilización de materiales reciclables y evitar el uso de plásticos), vestuario (evitar las prendas de un solo uso), maquillaje y peluquería (materiales respetuosos con el medio ambiente), cátering (mayoritariamente regional) y efectos especiales (producirlos digitalmente) son los que reciben más directrices en el Estatuto.
Estatuto para la Producción Verde
«Me parece muy positivo que los profesionales del cine en España tomemos la iniciativa de crear un nuevo estándar sostenible en Europa para esta industria que permita crear un nuevo modelo de producción que respete el medio ambiente», ha celebrado Álvaro Longoria, presidente de la EPC y miembro de la Academia de Cine española, que también ha incidido en la importancia de «ayudar, a través de nuestras historias, a concienciar a todos de que necesitamos un nuevo modelo sostenible en todos los estamentos de la economía».