La Comisión Europea ha propuesto una actualización de la normativa que afecta al sector audiovisual dentro del territorio de la Unión Europea desde hace casi 30 años. Las modificaciones forman parte de la estrategia de Mercado Único Digital para Europa que la Comisión quiere seguir y que persigue actualizar las políticas en consonancia con el nuevo entorno digital. Está previsto que a finales de este 2016 se anuncien las 16 iniciativas que conforman el Mercado Único Digital.
Así, la Comisión ha optado por tocar algunos puntos que afectan a la protección de los menores frente a los contenidos audiovisuales, a la emisión de publicidad y a los reguladores.
En el comunicado de la Comisión Europea de ayer se detalla el siguiente punto:
- Mayor flexibilidad para las empresas de radiodifusión televisiva: los espectadores molestos por el exceso de anuncios televisivos pueden acceder a ofertas online sin anuncios que no existían hace una década. La reglamentación audiovisual revisada responde a esta situación y a otras realidades nuevas. La Directiva revisada ofrece a las empresas de radiodifusión una mayor flexibilidad en cuanto al momento para ofrecer anuncios publicitarios: se mantiene el límite general del 20 por ciento del tiempo de emisión entre las 7 horas y las 23 horas, pero en lugar de los doce minutos por hora actuales, las empresas de radiodifusión podrán elegir con mayor libertad el momento de ofrecer la publicidad a lo largo del día. Las empresas de radiodifusión televisiva y los proveedores a la carta también disfrutarán de una mayor flexibilidad para utilizar el emplazamiento de productos y el patrocinio, manteniendo informado al espectador.
La Comisión Europea espera que esta medida reporte más ingresos a las compañías audiovisuales, «principalmente a las empresas de radiodifusión televisiva», con el fin de que tengan un mejor y mayor músculo financiero para seguir produciendo contenidos originales. En los últimos tiempos los broadcasters públicos han visto reducidos sus presupuestos, lo que ha conllevado una rebaja en la producción propia y arriesgada, y lo mismo ha sucedido en los operadores privados, que si bien siguen con grandes facturaciones por publicidad, están observando la migración de las campañas y de los usuarios a nuevas plataformas digitales. En muchos casos, se trata de plataformas de origen extranjero, como es el caso de Netflix, presente en 190 países de todo el mundo.
Precisamente para estos servicios online la Comisión Europea ha comentado otra iniciativa:
- Plataformas responsables de intercambio de vídeos: las plataformas que organicen y marquen una gran cantidad de vídeos tendrán que proteger a los menores de contenidos nocivos (como pornografía o violencia) y proteger a todos los ciudadanos de la incitación al odio. Entre las medidas pormenorizadas hay instrumentos para que los usuarios notifiquen y marquen contenidos nocivos y sistemas de verificación de la edad o de control parental. Para asegurarse de que las medidas tienen futuro y son eficaces, la Comisión invitará a todas las plataformas de intercambio de vídeos a trabajar en la alianza para proteger mejor a los menores online, con miras a elaborar un código de conducta para el sector. Antes que ser sencillamente autorreguladores, los reguladores audiovisuales nacionales tendrán la facultad de aplicar normas, que, dependiendo de la legislación nacional, podrán también dar lugar a multas.
Otro punto que ha tocado la institución con sede en Bruselas ha sido el de los reguladores:
- Una función más activa de los reguladores audiovisuales: la Directiva garantizará a partir de ahora que las autoridades reguladoras sean verdaderamente independientes de los gobiernos y del sector y puedan desempeñar su papel de forma óptima: garantizar que los medios audiovisuales actúan en interés de los espectadores. La función del Grupo de Reguladores Europeo para los Servicios de Medios Audiovisuales (ERGA), compuesto por veintiocho reguladores audiovisuales nacionales, se establecerá en la legislación de la UE. El grupo evaluará los códigos de conducta correguladores y asesorará a la Comisión Europea.