La industria audiovisual tiene hasta el 31 de agosto de 2026 para aprovechar la adenda del Plan España Hub Audiovisual de Europa

Tras el anuncio de que el sector audiovisual dispondrá de 1.500 millones de euros adicionales en instrumentos financieros en una nueva fase del Plan España Hub Audiovisual de Europa, que se dio a conocer en septiembre durante el Festival de Cine de San Sebastián, María Coronado, directora de Audiovisual de la Sociedad Española para la Transformación Tecnológica, Entidad Pública Empresarial (SETT), ha señalado ahora en Málaga que la industria tiene hasta el 31 de agosto de 2026 para aprovechar ese beneficio y ha delineado las líneas principales en las que se traza este plan.

La edición 28ª del Festival de Cine de Málaga acogió la mesa “Spain Audiovisual Hub: un modelo de éxito y nuevas líneas de financiación”, en el marco del MAFIZ, con la participación de Coronado y de Carla Redondo, directora general de Ordenación de los Servicios de Digitalización y Comunicación Audiovisual del Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, bajo la conducción del productor Luis Ángel Ramírez.

SETT Malaga 2025

María Coronado ha precisado que para esta “segunda temporada” hay disponibles 1.712 millones de euros, aunque realmente para la industria audiovisual son 1.500, porque 212 van a proyectos que tienen que ver con las lenguas cooficiales y la digitalización, pero además tendrán que ejercerse en los próximos 16 meses, con fecha límite del 31 de agosto de 2026. “Esto lo pone todo así en una especie de olla exprés de ver cómo podemos, entre todos y todas, beneficiarnos lo más posible, que la industria se beneficie lo más posible de este apoyo”.

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De hecho ha aclarado que el tiempo que transcurre desde la presentación de un proyecto en la web de la SETT hasta que se haya aceptado y acreditado con un notario es de tres a cuatro meses, algo importante a considerar con la fecha límite mencionada.

Ha resaltado que se trata de “una oportunidad maravillosa porque esto va mucho más a la parte estructural de la industria, va a reforzar las empresas desde el punto de vista del capital, que puedan ser más independientes, tener músculo financiero, que mantengan esas IPs por las que tanto están luchando”, y este apoyo va para lo que son los eslabones más débiles dentro de la cadena de producción, que sería la parte de desarrollo, la parte de ventas internacionales, “las zonas más delicadas y donde más problemas hay, pero esto va más allá del negocio tradicional de la industria audiovisual”.

La directora de la SETT ha expuesto que esta segunda línea de ayudas va a todo el ecosistema en el más amplio sentido de la palabra: productoras, distribuidoras, exhibidoras, toda la cadena de proveedores, OTT’s, realidad virtual, cualquier empresa que tangencialmente esté relacionada con la industria audiovisual, pero, además, tiene una peculiaridad que ha definido como muy positiva y también refuerza y enriquece la industria, y es que requiere de la colaboración público-privada, lo cual es esencial.

Ha trazado en tres líneas esta ayuda adicional: la primera es la de la cofinanciación, que es deuda, que viene a ser que, sobre unas necesidades que sean planteadas, la SETT puede dar hasta el 70 % y el 30 % tiene que venir por vía privada; esta línea tiene una duración máxima de 10 años con una carencia máxima de 3 años, pensada en ese medio y largo plazo, por lo que a los representantes de la industria les ha dicho que ya saben que si tienen un proyecto pueden contar con un 70 %, pero ahora tienen que convencer a un privado, y lo que va a hacer la SETT es ‘hacer match’ la oferta tanto de garantías como de condiciones económicas que os haga el privado.

La segunda línea, ha referido, es la de capital, o cuasi capital, que es más novedosa para la industria, “y en mi opinión es muy ventajosa, si bien requiere de una aproximación diferente, que es más desde una mentalidad empresarial y sobre unas necesidades determinadas, es decir, sobre una ronda de ampliación de capital, o el capital de una empresa nueva que se constituya, SETT puede aportar hasta un 49 % y el 51 % se tiene que levantar a través de inversores privados; estas líneas van hasta un máximo de 15 años. Lo normal es que, en cada caso, en el proceso de análisis, se pacte un escenario de salida, a partir del año 8, del año 10, dependiendo de cada caso, progresivamente impactando un escenario de salida, y también igualaríamos las condiciones que diera el privado”.

María Coronado ha insistido en que esta es una línea que es buena para la industria empresarial, es novedosa, porque hasta ahora siempre se ha hablado más de la financiación a proyecto, pero no de la capitalización de las empresas, pero “cuanto más fuertes seáis en el capital, más independientes vais a ser a la hora de negociar”.

La tercera línea, que también ha considerado muy novedosa y necesaria en la industria en España, además de ser el paso lógico de una industria que cada vez está más madura, más profesionalizada, va enfocada a fondos, es decir SETT lo que hará es ‘fondear’ fondos que inviertan únicamente en la industria audiovisual, como intermediarios financieros. “En el mundo aglosajón está mucho más presente, en Europa y en España es algo relativamente nuevo, pero creo que tiene mucho futuro y en este caso SETT aportará hasta un 49 % del fondo, del importe que vaya a establecer y el 51 % tiene que venir también vía inversores privados, un plazo máximo de 15 años, aunque lo lógico es que sean 10 años, cinco de inversión y cinco de desinversión.

Ha remarcado que es importante saber que en cualquiera de las tres líneas el importe mínimo que hace SETT es de medio millón de euros. “Por debajo de medio millón de euros no vamos a realizar operaciones y esto tiene que ver con que tenemos un plazo de tiempo muy justo y por cuestiones de operatividad y de eficiencia”, ha añadido.

La directora de la SETT ha concretado que el objetivo de esta nueva partida de ayudas requiere más desarrollar un plan empresarial que un proyecto en cuestión, “y esta es quizás la novedad, sobre todo hay empresas que dependen del volumen, que ya estáis diversificadas, que ya estáis muy familiarizadas con este lenguaje, pero desde el punto de vista de las productoras, generalmente estáis más enfocadas a ese proyecto, entonces aquí requiere mirar más allá, más ambiciosamente, más estratégicamente, dónde está vuestra empresa, dónde queréis llegar, qué necesitáis, y ahí es donde podemos acompañaros, a lo que se suma que tenéis que convencer a un tercero privado, que crea también en vuestro proyecto y apueste por él”.

Carla Redondo, directora general de Ordenación de los Servicios de Digitalización y Comunicación Audiovisual del Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, ha hecho una evaluación de lo que ha significado el Plan España Hub Audiovisual de Europa en el que se implicaron un total de 13 ministerios para establecer un diálogo con todo el sector, con el objetivo de promover el crecimiento de la industria un 30 % y atraer el talento para crear un ecosistema fuerte, además de atraer inversiones internacionales.

Ha asegurado que con todas las acciones que se han llevado a cabo, se ha creado un sector que se ha posicionado a nivel internacional, pero más allá de eso, la facturación de la industria del cine en España en 2021, era de 251 millones de euros y en 2024, se posicionó en 477 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 90 %.

Ha precisado que, en 2022, el número de entidades enfocadas a la producción de audiovisual y videojuegos se había incrementado en 641 y en 2023, España ya ocupaba la cuarta posición en producción de películas y series de la Unión Europea, a lo que se suma que se ha incrementado un 40,9 % la producción de largometrajes y España es el país de la Unión Europea donde más invierten las plataformas globales como Netflix, Disney o Amazon.

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