Las tendencias de diseño gráfico cambian año a año, y más aún para los diseñadores de páginas web. Este año, la tendencia recae sobre lo emocional, la interacción didáctica y la velocidad de carga.
Esta década parece ser, además, la época del minimalismo, en el que menos es más y la fluidez en las transiciones y movimientos, con apariencia de naturalidad y que despierten sensación de calma, dejando de lado los colores ruidosos y los estilos agresivos, será la tendencia más importante en este 2020.
Para lograr esto, claro está, necesitarás más que un buen manejo de las herramientas de diseño, sino conocimientos sobre programación, al menos básico, o al menos, contar con una forma de convertir tus diseños de XD, InDesign o Photoshop a HTML, para que así puedas obtener resultados óptimos y funcionales que además generen una excelente experiencia al usuario.
El diseño gráfico y la importancia del formato en la web
Los diseñadores gráficos suelen tener una o varias aplicaciones predilectas para crear increíbles obras maestras. Y esto no aplica solamente al diseño de posts para Instagram, sino para videos, objetos en 3D y, por supuesto, páginas web.
Este último es una de las áreas que, si bien no es la más compleja, si es una de las que presenta más problemas de compatibilidad. Es decir, cuando creas un archivo en Photoshop, este se guarda por defecto en el formato PSD. Este formato es editable de Photoshop y solo puede ser leído por ese programa.
Para que sea compatible con sitios web, tienes dos opciones, convertirlo en una imagen en formato JPGE o PNG, o convertir el diseño a HTML. Este último es el formato más reconocido por los navegadores y es 100 % compatible con WordPress, por lo que una vez tengas el código, el resto será pan comido.
Un servicio que no sale barato, pero si rentable
Cuando contratas un programador (a menos que tú mismo lo hagas), éste no cobrará un precio bajo por sus servicios. Traducir diseños completos o páginas web completas a cualquier lenguaje de programación lleva tiempo y exige esfuerzo y constancia.
Por este motivo, no esperes que un servicio de buena calidad te salga barato. Sin embargo, si contratas a un profesional que haga un trabajo de buena calidad, la diferencia se notará en seguida. Verás cómo tu diseño cobra vida frente a ti, pasando de ser un simple boceto en PSD a una página web completa y funcional.
Hoy en día, existen herramientas (por lo general pagas) que te pueden ofrecer un servicio completo y bien ejecutado para construir tus páginas web desde cero a partir de un diseño que les envíes. Si tu diseño ofrece una experiencia visual e interactiva agradable, ten por seguridad que los clientes o visitantes que tu página logre atraer volverán a visitarla.
Eso sí, procura también ofrecer contenidos de calidad que acompañen el diseño y pronto podrás obtener los resultados que quieres lograr con la página web; bien sea satisfacer a un cliente, atraer a otros o simplemente monetizar un blog, todo lo que necesitas, aparte de creatividad, es constancia e investigación.