‘Los años nuevos’, la nueva serie de Rodrigo Sorogoyen concebida como una obra cinematográfica, llega hoy Movistar Plus+. Tras su estreno en cines seleccionados, la plataforma tiene ya disponibles los primeros cinco episodios. Los cinco restantes podrán verse el jueves 12 de diciembre. La producción muestra el recorrido vital de una pareja, interpretada por Iria del Río y Francesco Carril, a lo largo de una década que gira en torno a un mismo momento: el cambio de año.
Fran Araújo, productor ejecutivo de la plataforma de Telefónica, ha resaltado que en el proceso de producción “nuestra expectativa se cumplía con creces, todo estaba cada vez mejor de lo que te podías imaginar, yo tenía reticencias con tantos capítulos y ahora quiero diez más, porque estableces un vínculo de vida con los protagonistas y eso yo creo que es un éxito absoluto; más allá de ello de ello, creo que los números van a ser buenos, pero creo que el éxito es eso”.
La serie, una producción original de Movistar Plus+ en colaboración con Caballo Films y en asociación con ARTE France, estuvo incluida entre las Proyecciones Especiales de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) de este año. Antes, celebró su premiere mundial en la 81ª edición del certamen del Festival Internacional de Cine de Venecia. También ha sido la primera serie española en participar en el Tokyo International Film Festival. Con ‘Los años nuevos’, Rodrigo Sorogoyen, autor de obras como ‘Que Dios nos perdone’ y ‘As bestas’ (esta última le valió nueve premios Goya, incluyendo mejor película, dirección y guion original), regresa al formato de serie, donde ya firmó ‘Antidisturbios’, también con Movistar Plus+.
Desde la producción, Fran Araújo ha asegurado que “nuestra expectativa era tener una obra como la que ellos han ejecutado, al margen de los resultados, que confío mucho en ellos, para nosotros en general es muy difícil de conseguir y esta obra lo consigue, es hacer algo que sea importante, que sea inolvidable, que sea única y desde el guion hasta ahora, fuimos viendo que nuestra expectativa se cumplía con creces, que todo estaba cada vez mejor de lo que te podías imaginar” y añade que “en el mundo en el que vivimos en el que existirán unas 50 series al año en España pero cientos en el mundo, conseguir tener una obra como esta que tiene tantos momentos inolvidables y que dentro de 15 años yo voy a seguir recordando, cumple mis expectativas y las de Movistar Plus+”.
Ha asegurado que “nuestra experiencia nos dice que cuando logras tener una obra de esta magnitud, los resultados siempre acompañan” y recordó ‘Antidisturbios’. “La lógica te dice que si tus protagonistas son unos antidisturbios y son unos bestias y ves que en 40 minutos dan de hostias a gente, esos personajes a los que tu deberías admirar podrían hacer que te alejes, porque es la manera más absurda de empezar una serie, pero cuando yo lo leía en papel yo decía yo me voy a quedar hasta el final”, y ahora “cuando llegas a personajes como el que encarnan Francesco e Iria solo quieres quedarte”.
Sobre el tema de haber estrenado de manera limitada la serie en cines, ha apuntado que fue algo que surgió en el proceso “y luego cuando la presentamos en Venecia fue muy claro; a mí me pasó que la habíamos visto muchísimas veces en montaje, pero yo salí al final del quinto capítulo ahí con una emoción desbordante, pensando ¿cómo me ha podido pasar esto? y, finalmente, yo creo que la sala de cine genera ese sentido de inmersión”.
Rodaje cronológico
Nacho Lavilla, productor de Caballo Films, ha hablado de los retos de la producción y afirma que el mayor era tratar la serie, que fue rodada cronológicamente, como si fueran diez películas independientes. “La suerte de rodarla de esa manera fue bastante buscada, empezamos a rodar de tal forma que el bloque de Europa, el capítulo de Berlín y Lyon, nos quedara lo más centrado en el invierno y en el fin de año, para que eso se transmitiera, porque también teníamos menos capacidad de producir fuera de España por motivos económicos, nos teníamos que apoyar en otras productoras porque no era nuestro territorio”, ha explicado.
Ha precisado que se logró estirar el presupuesto y contaron con 18 semanas para rodar los 10 capítulos. “No teníamos demasiada influencia en esos territorios fuera de España y ordenamos un poco todo el rodaje para que coincidieran ahí los meses de frío y de ambiente navideño, y luego intentamos ser generosos con la manera de diseñar, desindustrializar un poco, buscar en la artesanía, no todos los capítulos necesitaban lo mismo, no repartimos el plan de rodaje de manera equitativa, ya se hacía ese trabajo desde guion era fácil ver que cada capítulo tenía unas necesidades distintas, ese fue el reto mayor, pero fue bastante bien”, ha manifestado.
Al respecto, Rodrigo Sorogoyen ha advertido que en España, “podíamos controlar de alguna manera las luces de Navidad pero en Berlín y en Lyon íbamos con lo puesto” y lo de desindustrializar, “en Berlín nos costó bastante, por la manera de producir de ellos, nos llamó muchísimo la atención que en Alemania les costó muchísimo improvisar, no entendían que se podían hacer cosas que no estaban en el plan inicial porque de no hacerlo nos quedábamos sin rodaje”. Satisfecho con lo que se ha hecho, hace hincapié en que siendo serie de televisión, ha sido concebida como una obra cinematográfica y “hemos puesto mucho amor en la serie, hemos trabajado muchísimo el guion durante cerca de tres años”.
Sostiene que “desde el principio teníamos claro que queríamos que cada capítulo funcionara muy bien, como unidad, como pequeñas películas que tuvieran no tanto un tono distinto, pero sí subtonos o subgéneros particulares, que cada capítulo tuviera un color lo suficientemente diferente para que fuera especial y así afrontamos tanto el qué, como el cómo; en el fondo son diez momentos de los dos personajes en Nochevieja o en Navidades, entonces había mucho riesgo de que se parecieran bastante pero intentamos siempre desde lo verosímil, hacer diez peliculitas muy distintas, a la vez que ir avanzando en la trama, en la evolución de esta pareja, que fuera interesante, creíble”.
Sorogoyen, que también es productor ejecutivo, dirige cuatro de los diez episodios que conforman ‘Los años nuevos’. Los otros seis capítulos están dirigidos por Sandra Romero y David Martín de los Santos, mientras que Marina Rodríguez Colás y Antonio Rojano participan en el guion, junto con Sara Cano y Paula Fabra. Además, el músico y escritor Nacho Vegas aporta su sello personal a la banda sonora con un tema original inspirado por la trama que cierra la serie.
El cineasta madrileño ha señalado que sólo tiene buenas palabras para Sandra Romero y David Martín de los Santos “porque entendieron muy bien el tono, me siguieron, yo intentando dar la mayor libertad posible, evidentemente les dije cómo tenía que ir la serie, cómo tenía que ser el tono, fue muy sencillo hacerlo, yo hasta que no lo vi, no lo creí pero una vez que empiezas a verlo sabes que estamos todos en el mismo barco, trabajaron mucho en la preproducción, a priori, mucho con los guionistas, mucho con los actores, la serie se vende como de Rodrigo Sorogoyen, pero es una serie muy común”.
Otro tema que ha resaltado es el montaje de sonido, de lo que afirma que “estamos muy contentos y muy orgullosos con el resultado final, es verdad que desde que concebí la serie yo dije, tiene que haber la música de nuestra generación, que esté reflejada de manera natural, orgánica, verosímil este catálogo musical y como estaba desde el inicio, empezamos a trabajarlo en guion, y el hecho de que sonara un tema ejético o no, ya estaba escrito, luego había que trabajarlo mucho en montaje y hubo un esfuerzo mayor que fue el de conseguir esas canciones, era algo casi obligatorio”.
La química entre los protagonistas
Iria del Río (‘El bus de la vida’, ‘El Inmortal’, ‘El increíble finde menguante’, ‘Antidisturbios’) ha aseverado que Rodrigo Sorogoyen “tiene una especie de compromiso con la verosimilitud muy bestia y para él es muy importante que las cosas tengan sentido y coherencia, y ese compromiso con intentar generar algo que parezca real, fue para Francesco y para mí una oportunidad para atravesar e ir a fondo, lo cual como actor es un regalo inabarcable; había tres directores, tres energías muy diferentes, pero ha sido un trabajo muy rico y tuvimos la suerte de que hemos conectado, hay algo de la química humana que nos ha sucedido a mí y a Francesco, me siento muy a gusto a su lado, nos hemos conocido en tiempo récord, pero la química ha sido muy importante para aproximarnos como lo hemos hecho, en ese nivel de intimidad”.
Con respecto a las escenas de sexo en esta serie, ha anotado que ha sido fundamental que primero se hablaran entre los dos protagonistas. “Hicimos todo un proceso de entender qué se quería contar en cada escena, porque cada una cuenta un estado de la pareja diferente, el diseño de las escenas empezó por la palabra, por poner palabras, si estamos hablando de que esas dos personas hacen el amor por primera vez, definir esto qué significa, cómo queremos contarlo; luego decidimos ponerlo en pie a nivel coreográfico, qué movimientos, cómo se traduce todo esto que hemos hablado en movimientos y ha sido un gran trabajo porque había que ir al detalle, o por lo menos empezar en el detalle para luego estar libres de alguna manera, esto lo hicimos Francesco y yo, junto con el equipo de dirección”, agrega.
Ha destacado que “decidimos no contar con equipo de intimidad teniendo siempre la posibilidad de dejar la puerta abierta a que si en cualquier momento, cualquiera de los dos lo precisaba, pudiera pedirlo. Yo ya había trabajado con Rodrigo en otras producciones y también me sentía con la suficiente confianza para poner límites pero a Francesco no lo conocía, fuimos construyendo la relación con mucho tacto, con escucha y además teníamos un equipo en set eminentemente femenino, y muy respetuoso, por lo que fue un marco muy seguro”.
Para Francesco Carril (‘Tenéis que venir a verla’, ‘Un amor’, ‘La reconquista’, ‘Galgos’), “ahora que empezamos a pensar en lo que hemos hecho, que empezamos a soltarlo un poco también, me doy cuenta que ese grado de intimidad que se puede ver en la serie, esa relación que hemos generado, que hemos construido, viene mucho de la forma de trabajar que yo me encontré con Rodrigo, es una persona que empieza a compartir con uno muchas cosas de la serie que no solo tienen que ver con el propio trabajo de actor, sino con ciertas decisiones estéticas, de arte, de guion, con las personas que van a conformar el equipo” y es un hecho de que cuando uno como actor se siente parte, que no ocurre muy a menudo, “hay un pistoletazo de salida de decir este es un espacio en el que podemos ponerlo todo aquí y compartirlo todo” y añade que “muchas veces parece una obviedad que dos personas conecten a cámara, pero con nosotros ha ocurrido de una manera muy natural, no hemos tenido que hacer un esfuerzo”.
Movistar Plus+ International se ocupa de las ventas internacionales de ‘Los años nuevos’.
