La Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia asegura que un 65 por ciento de los hogares españoles con hijos menores o que se hacen cargo habitualmente de menores conocen las herramientas que bloquean o filtran los contenidos audiovisuales, el llamado control parental. Sin embargo, alerta de que apenas son utilizadas.
Según los datos del último Panel de Hogares de la CNMC del segundo trimestre de 2017, en las tabletas y los ordenadores su uso fue del 20 por ciento, y, en aún menor medida, en los móviles y televisores. «Estas cifras son un tanto preocupantes» asegura Competencia.
La preocupación por la exposición de menores a contenidos audiovisuales que perjudiquen a su desarrollo físico y mental continúa siendo alta, y se mantiene entre el 80 y 90 por ciento en muchos casos, unos niveles similares a la anterior oleada de 2016.
Los contenidos violentos y aquellos que puedan generar miedo o angustia son los que más preocupan a los hogares donde hay niños de hasta 6 años. En los hogares con menores de 7 a 11 años lo que más preocupa son también los contenidos violentos y además los que muestran conductas peligrosas que puedan ser imitadas por los niños. Los hogares en los que los menores son de edades comprendidas entre los 12 y 15 años se declaran más preocupados por los contenidos que muestran conductas peligrosas que los adolescentes puedan imitar y los que contienen expresiones verbales violentas, ofensivas, groseras, intolerantes o discriminatorias. Los hogares con jóvenes entre 16 y 17 años mostraron mayor preocupación por los contenidos relacionados con alcohol, tabaco y/o drogas y también por las conductas que puedan ser imitadas por estos menores.
En cuanto a las horas en las que probablemente haya menores (de hasta 12 años) viendo la televisión solos, en general estas coinciden con el horario de protección reforzada al menor de las televisiones. Una excepción es el horario de sobremesa en los fines de semana y festivos (entre las 16 y las 18 horas) en el que en uno de cada cinco hogares con menores estos probablemente ven la televisión sin supervisión adulta y, sin embargo, el horario de protección reforzada sólo es de 9 a 12 horas.
El horario de protección reforzada al menor establece tres franjas horarias tomando como referencia el horario peninsular: entre las 8 y las 9 horas y entre las 17 y las 20 horas en el caso de los días laborables y entre las 9 y las 12 horas los sábados, domingos y fiestas de ámbito estatal. Los contenidos calificados como recomendados para mayores de 13 años deberán emitirse fuera de esas franjas, manteniendo a lo largo de la emisión del programa que los incluye el indicativo visual de su calificación por edades según está recogido en el artículo 7.2 de la Ley General de Comunicación Audiovisual (LGCA).
Finalmente, el 77 por ciento de los hogares con hijos menores o que habitualmente se encargan de menores declararon conocer que los programas que se emiten por televisión cuentan con una calificación por edades. De estos, casi 7 de cada 10 aseguró informarse sobre la calificación por edades a través de la señalización visual en la pantalla de televisión. Las webs de los canales de televisión, las guías de programación, el teletexto, periódicos y revistas apenas fueron utilizadas por los hogares para este fin.
Metodología
Estos resultados forman parte del Panel de Hogares CNMC, una encuesta a hogares e individuos de periodicidad semestral. La CNMC busca recopilar información directamente de los ciudadanos a través de encuestas y análisis de las facturas de los servicios. El estudio es de naturaleza multisectorial y recoge datos relativos a los mercados de telecomunicaciones, audiovisual, energía, postal y transporte entre otros. La encuesta de esta quinta oleada se llevó a cabo en el segundo trimestre de 2017 e incluyó a 4.937 hogares y 8.839 individuos. Esta herramienta aporta una información amplia y diversa, y permite a la CNMC conocer mejor el punto de vista de los consumidores.