Juan Miguel del Castillo (‘Techo y comida’) rodó entre mayó y junio de 2021 su segundo largometraje: ‘La maniobra de la tortuga’, un thriller policiaco con tintes sociales basado en la novela homónima de Benito Olmo. La película se rodó en Cádiz, Jerez de la Frontera, Sevilla y San Fernando.
El pasado 13 de mayo el filme llegó a los cines españoles con escasa suerte, por otro lado, algo habitual en estos tiempos tan difíciles para los exhibidores. ‘La maniobra de la tortuga’ debutó de la mano de A Contracorriente Films en la undécima plaza del ranking de taquilla, con un total 35.215 euros, 5.573 espectadores y un rendimiento por copia de 359 euros en su primer fin de semana, tras estrenarse en cerca de un centenar de pantallas.
Basada en una de las novelas sobre el inspector Bianquetti, se trata de una producción de Áralan Films, A Contracorriente Films y La maniobra de la tortuga, A.I.E., coproducida por Aleph Media (Argentina), con la participación de RTVE, Canal Sur, Movistar+, cuenta con el apoyo del ICAA y la AAIICC y la financiación de Triodos Bank, Crea SGR y con el patrocinio de la Diputación de Cádiz. Las ventas internacionales corren a cargo de Latido Films.
El segundo largo de Juan Miguel del Castillo ha sido producido por Marta Velasco, Gonzalo Bendala, Adolfo Blanco, Fernando Riera y Manuel Monzón. El guion está firmado por el propio director, junto con José Rodríguez (‘Adiós’, ‘La Peste’). Con un presupuesto de algo más de 2,3 millones de euros, la película recibió casi un millón de euros en las ayudas generales del ICAA del año 2020.
‘La maniobra de la tortuga’ está protagonizada por Fred Tatien, en su primer papel protagonista, al que acompaña Natalia de Molina, que repite con Juan Miguel del Castillo después de la gran experiencia en ‘Techo y Comida’. Completan el reparto Ignacio Mateos, Mona Martínez, Carlos Manuel Díaz y Gerardo de Pablos.
La productora Marta Velasco comenzó en la industria del cine en el año 2000, hasta fundar junto a Gonzalo Bendala su propia compañía, Áralan Films, en el año 2004. El primer largometraje de la compañía, ‘Los Niños Salvajes’ de Patricia Ferreira (2012), logró la Biznaga de Oro del Festival de Málaga y fue nominada a tres premios Goya. ‘Asesinos Inocentes’ de Gonzalo Bendala (2015) fue su segunda película como productora y en ella ejerció también de directora de producción, labor por la que fue galardonada en los Premios Asecan del cine andaluz 2016.
Ha participado también en producciones como ‘Oro’ de Agustín Díaz Yanes; ‘Cuando los ángeles duermen’ de Gonzalo Bendala; ‘Quién te cantará’ de Carlos Vermut; ‘Intemperie’ de Benito Zambrano o el biopic sobre Céline Dion ‘Aline’ de Valérie Lemercier. En 2019 fue distinguida con el Premio Asecan Josefina Molina y con el Premio Luz del Festival de Cine Iberoamericano de Huelva. Recientemente ha producido largometrajes como el mencionado ‘La maniobra de la tortuga’ de Juan Miguel del Castillo y ‘Como Dios manda’ de la debutante Paz Jiménez. Marta Velasco es además vicepresidenta de ANCINE (Asociación de Productoras Cinematográficas de Andalucía), pertenece a la junta directiva de AECINE (Asociación Estatal de Cine) y es la presidenta constituyente de la Academia de Cine de Andalucía. La productora de Aralan Films ha contado a Audiovisual451 el largo proceso vivido con ‘La maniobra de la tortuga’, una película de la que se siente profundamente orgullosa.
Audiovisual451: ¿Cuál es la impresión tras el primer fin de semana en los cines?
Marta Velasco: “Bueno, la taquilla está como está, siempre se espera más porque una película es como tú niño, con el que has estado mucho tiempo, pero creo que el problema ahora no es la película sino que la gente no va al cine. En ese sentido, estamos muy tranquilos y orgullosos de la película que hemos hecho. Tenemos que seguir trabajando con los cines y con los distribuidores para que la gente regrese a las salas, eso es lo importante”.
A451: Bueno, también puedes estar orgullosa de la estructura de producción de la película, no falta nada, es muy completa…
M.V.: “Es un cumplido en estos tiempos que corren. La realidad es que llevo muchos años con esta película, Juan Miguel del Castillo leyó el libro de Benito Olmo y me llamó en verano de 2016 para decirme que le gustaría que esta fuese su segunda película y si estaría interesada en producirla. Nos habíamos conocido en el circuito de festivales, él con ‘Techo y comida’ y yo con ‘Asesinos inocentes’ y nos hicimos amigos. Después de leer también el libro le digo que vamos adelante. Como a Juan Miguel, lo que más me atrajo de la novela no fue el hecho de que fuera un thriller que transcurre en Cádiz, sino toda la parte de la sub-trama de cine social sobre violencia de género”.
A451: ¿Cómo comienzas a levantar la producción?
M.V.: “A partir de ahí, hablo con A Contracorriente que era además la distribuidora de ‘Techo y comida’ y me constaba que también querían estar en la siguiente película de Juan Miguel del Castillo. Les gusta la historia y se suman. Nos pilla entonces toda la crisis política de esos años, con varias elecciones, que hizo que se retrasara parte de la financiación porque se paralizaron las ayudas. En ese panorama, los primeros que apostaron por la película fueron la Junta de Andalucía y Canal Sur. Y conforme íbamos desarrollando el filme, como también la historia tiene un trasfondo social con Latinoamérica, apostamos por buscar una coproducción. Yo ya conocía a Fernando Riera de Aleph Media y A Contracorriente ya había trabaja antes con él. Decidimos entonces intentar la coproducción con Argentina para tener una mayor expansión por Latinoamérica. Ya después entrarían Movistar+ Plus, RTVE y el ICAA”.
A451: Por cierto, unas ayudas estatales que se resistieron al principio ¿no es así?
M.V.: “Nos quedamos dos veces a las puertas de las ayudas del ICAA, una en selectivas y otra en generales. Por fin, en 2020 conseguimos entrar en las ayudas generales, en la tercera ocasión que presentábamos la película. Pero cuando ya teníamos todo esto, llega la pandemia, una locura. Estábamos con el casting de la película y se declara el estado de alarma. Decidimos seguir adelante en remoto. Los casting finales de algunos personajes los hicimos vía zoom, con el propio director, también trabajamos más el guion durante el confinamiento”.
A451. ¿Cómo afecta todo esto a los planes de producción más allá del retraso?
M.V.: “Tuvimos que replantearnos todo, también narrativamente, además de la parte creativa y de producción. Una parte del presupuesto debía ir a las medidas Covid, por lo que de tener previstas ocho semanas de rodaje, tuvimos que rodar en seis semanas y media. Hemos peleado mucho para sacar la película adelante, mucha gente me decía que abandonase, que no tenía sentido tanto esfuerzo. Recuerda que empezamos en 2016 y hemos estrenado ahora, pero yo les respondía a todos que pensaba que era una película necesaria y además que tenía un compromiso con Juan Miguel del Castillo para hacer su segunda película, yo no podía abandonar y hacerle eso como productora. Decidimos retrasar un año el rodaje porque teníamos todo tan ajustado que no queríamos que cualquier obstáculo, un incremento de la incidencia de la pandemia, una nueva ola… echara todo abajo”.
A451: Y el rodaje se inicia hace ahora un año…
M.V.: “En mayo de 2021 dimos motor y terminamos en el mes de junio. Tuvimos la suerte de que cuando empezamos a rodar, las cosas estaban más calmadas y cuando terminamos empezó una nueva ola, pero lo salvamos bien. En ese último día de rodaje no he llorado más de alegría en un set, Juan Miguel y yo nos miramos y nos dijimos: ‘lo hemos conseguido’”.
A451: Nada que ver con la postproducción…
M.V.: “La postproducción fue normal, empezamos justo después de acabar y en septiembre teníamos ya el corte final”.
A451: ¿Cómo fue la confección del reparto? al margen de Natalia de Molina, claro, que ya había trabajado en la primera película del director…
M.V.: “Claro, con Natalia de Molina estaba muy claro. Las directoras de casting Ana Sainz y Patricia Miranda son maravillosas y ellas son las artífices de este magnífico reparto en estas condiciones tan complicadas. En el libro, el Inspector Bianquetti es un personaje alto y corpulento y las directoras de casting nos hablaron de Fred Tatien, con el que ya habían trabajado en ‘La enfermedad del domingo’. Buscábamos un policía duro pero que mostrara sus sentimientos y ellas lo tenían claro con él. Hicimos muchas pruebas a Fred y Juan Miguel también lo vio claro muy pronto, creo que ha sido un acierto. También fue un acierto, por ejemplo, cambiar de género al personaje de Mona Martínez, que en la novela es un hombre, fue otra decisión de dirección de casting para hacer más claro el mensaje de la película”.
A451: ¿Y fue difícil acceder a los derechos de la novela?
M.V.: “No, la verdad es que fue muy sencillo conseguir los derechos. Benito Olmo tenía muchas ganas de que se hiciera esta adaptación. Le gustó mucho el planteamiento de Juan Miguel. Después ha estado implicado en el proceso y nos ha acompañado incluso en rodaje”.
A451: Creo que precisamente esa mirada social es lo diferencial de la historia…
M.V.: “Así es, el componente social es tan importante o más que el thriller. Lo que queríamos era no hacer un thriller más, queríamos distinguirlo y esa trama social era la clave. Al final todo en la historia nos lleva a la violencia de género”.
A451: ¿No da un poco de miedo como productora tratar temas tan delicados en una película?
M.V.: “Sí, tratar estos temas tan delicados siempre da cierto respeto. Juan Miguel y el coguionista, José Rodríguez, se documentaron mucho, también hablamos con el autor de la novela, porque para mí era muy importante que él diera el visto bueno a la adaptación. Era una responsabilidad enorme tratar un tema tan serio como el de la violencia de género de una manera respetuosa y honesta, sin caer en el ridículo. Y a Benito Olmo le gustó mucho la adaptación que hicimos. Para mí era un doble triunfo. Sinceramente, creo que la película va a tener una gran vida en plataformas”.
A451: ¿Cómo fue la experiencia de estrenar en el pasado Festival de Málaga?
M.V.: “Cuando nos confirmaron la presencia en el Festival de Málaga fue una alegría inmensa, porque para nosotros Málaga es nuestra casa, era la plataforma perfecta para esta película. Juan Miguel había triunfado allí con ‘Techo y comida’ y yo con ‘Los niños salvajes’ y con otras producciones. La acogida en Málaga fue muy buena, hemos cosechado allí muy buenas críticas, gustó mucho, la verdad. A veces, cuando tardas tanto en materializar una película, corres el riesgo de que se quede antigua. ‘La maniobra de la Tortuga’ ha estado en el momento correcto, pero quizá su concepto se diluye un poco ahora porque desgraciadamente se ha normalizado en cierto modo la violencia de género, está muy presente en los medios. Esta triste normalización hace que la temática de la película se normalice también, esa es mi teoría. Ahora la película se va a ver en los screenings del mercado de Cannes, esperamos que vaya muy bien allí”.
A451: ¿Qué será lo próximo de Aralan Films?
M.V.: “Estamos con la primera película que dirige la actriz Paz Vega, también con la nueva película de Yolanda Centeno titulada ‘Tras el verano’ y con la siguiente película de Gonzalo Bendala. Además, junto a la Terraza y Los Ilusos, participamos en la nueva película de Jonás Trueba: ‘El segundo premio’, que está preparación y se rodará en Granada”.