Corría septiembre de 2018 cuando Bambú Producciones anunciaba la adquisición de los derechos de ‘En el corredor de la muerte’, el libro de Nacho Carretero (‘Fariña’) sobre la historia de Pablo Ibar, el español condenado a muerte en Miami.
Medio año después y a las puertas de NATPE 2019, Movistar+ ha anunciado la puesta en marcha de la producción de la serie de la mano de la compañía de Ramón Campos y Teresa Fernández-Valdés. ‘En el corredor de la muerte’ se convierte así en la tercera colaboración de la plataforma y la productora, después de ‘Velvet Colección’ e ‘Instinto’, pendiente de estreno.
Miguel Ángel Silvestre encarnará a Pablo Ibar, que acaba de ser declarado culpable de un triple asesinato que tuvo lugar en Florida en 1994. En el que ha sido el cuarto juicio para Ibar, el jurado alcanzó el veredicto unánime de los seis cargos que pesaban en su contra. Ahora Ibar tendrá que esperar hasta el 25 de febrero para conocer su condena.
«Queremos mostrar a todo el mundo la verdad sobre el caso de Pablo, para que los espectadores puedan sacar sus propias conclusiones sobre la sentencia» asegura Ramón Campos, productor ejecutivo de la serie.
‘En el corredor de la muerte’ es una serie creada por Ramón Campos, Gema R. Neira y Diego Sotelo (Bambú Producciones), y basada en el libro de Nacho Carretero, que ya trabajaron juntos anteriormente en la ficción ‘Fariña’. La serie constará de 4 episodios de 50 minutos y estará dirigida por Carlos Marques Marcet. ‘En el corredor de la muerte’ iniciará su grabación en las próximas semanas.
Sinopsis de ‘En el corredor de la muerte’
27 de enero de 1994. Los cuerpos de un hombre y dos modelos de 25 años, aparecen acribillados a tiros en casa del dueño de un club nocturno. La policía encuentra una cámara instalada en el salón de la víctima que ha grabado el asesinato. Esas imágenes son la pista principal de la policía… Por eso, se decide distribuir lo más valiosos que hay en ellas: el rostro borroso de uno de los asaltantes. Tres semanas más tarde, en una comisaría de otro distrito, un agente cree reconocer a uno de los asesinos: es Pablo Ibar, un hombre de nacionalidad española al que acababan de detener junto a unos amigos por un robo menor. Pablo asegura que es inocente. Ninguna de las pruebas halladas en el lugar del crimen lo inculpan… Pero de nada sirve. Pablo es condenado y enviado al corredor de la muerte.