En noviembre del pasado año Nathalie Martínez, productora, directora de animación y fundadora del estudio valenciano Wise Blue Studios, se convirtió en la primera mujer en presidir Diboos, la federación de productores de animación y VFX, desde su creación hace 17 años.
Martínez sustituyó en el cargo a Nico Matji, que estuvo al frente de Diboos desde 2019. La Junta para los próximos cuatro años mantiene a los dos vicepresidentes: Gonzalo Carrión (AEPA/El Ranchito), que ostenta a su vez la presidencia de AEPA; e Iván Agenjo (Proanimats/Peekaboo), presidente de ProAnimats. Nico Matji (AEPA/Lightbox) se mantiene en la Junta en el cargo de secretario y se incorpora Mikel Mas (ProAnimats/Cornelius Films) como tesorero. Las vocalías se repartirán entre Guillermo Velasco (AEPA/Big Bang Box), Jose Luis Farias (AEPA/Paramotion), Mar Gaya (ProAnimats/Brutal Media) y Carlos Biern (ProAnimats/DeAPlaneta).
La presidenta de los productores de animación ha contestado las preguntas de Audiovisual451 en San Cristóbal de La Laguna, la localidad tinerfeña sede de una nueva edición de los Premios Quirino de la animación americana que se entregan el sábado 11 de mayo en el Teatro Leal de la ciudad tinerfeña.
A451: ¿Cómo han sido estos primeros meses al frente de Diboos?
Nathalie Martínez: “Antes ya había en las juntas presididas por Nico Matji y Carlos Biern, pero es muy distinto estar en la Junta que ser presidenta de Diboos, muy distinto. Ahora siento mucho el peso de la responsabilidad. La mayoría de las decisiones son colegiadas se hablan en la Junta y tenemos unas directrices que seguimos, pero cuando te enfrentas en una reunión a la inmediatez de tomar una decisión o a apoyar o no apoyar una iniciativa, siempre en ese momento pienso en no equivocarme. Igualmente, cuando te mueves entre instituciones y tienes una representatividad esperas estar a la altura del cargo”.
A451: ¿Es entonces un compromiso que quieres que pase cuanto antes?
N.M: “Siento el peso de todo un sector en mi espalda, pero eso no significa que no me parezca un trabajo apasionante. Yo soy muy apasionada del movimiento asociativo, creo mucho en la fuerza de la unión y que se pueden hacer cosas importantes. Tengo muchas cosas pensadas para estos cuatro años en los que voy a estar inicialmente y espero poder llevarlas a cabo. Esto es un trabajo a tiempo completo no remunerado y encima tú sigues desarrollando tu labor profesional, no tienes una excedencia. Lo tienes que compaginar y tener muy claro cuándo llevas un sombrero y cuándo otro”.
A451: ¿Por qué es apasionante?
N.M: “Ahora estamos en un momento apasionante e incierto, porque hay muchos frentes abiertos, está la Ley del Cine, la irrupción de la inteligencia artificial, que va a ser algo disruptivo y hay que ver todavía cómo la integramos en nuestro sector. Como te digo se están moviendo tantas piezas alrededor que a mí me parece un momento de gran responsabilidad, pero también apasionante”.
A451: ¿Qué te gustaría cerrar en estos cuatro años como presidenta de Diboos?
N.M: “Yo creo que hay un objetivo clarísimo, que de alguna manera es heredado, pero que tengo el firme propósito de zanjarlo y estoy poniendo mucho empeño en ello. Se trata de que la animación deje de ser el hermano pequeño del sector audiovisual español. Somos punta de lanza en innovación, tecnología, en internacionalización y somos la puerta de entrada de los niños a la cultura. Siempre decimos que la animación no es solo cosa de niños, pero también es cosa de niños, es decir, somos el primer producto audiovisual con el que un niño se convierte en espectador audiovisual. Tenemos que tener muy claro dos cosas, por un lado, tenemos una responsabilidad con la infancia y además somos garantes o protectores de la cultura española. En la formación del ciudadano audiovisual del futuro de este país, creo que la animación representa un papel clave”.
A451: ¿Cómo se puede llevar a cabo esto?
N.M: «No podemos olvidar que esto es una industria de innovación, también de creación de empleo… Como te digo, mi objetivo es que la animación ocupe el sitio que merece, no sé si como una agencia estratégica de la animación española, como llevamos hablando desde hace mucho tiempo, o como una línea de financiación específica para animación. Cuando nos reunimos con el resto de asociaciones del sector audiovisual nos fortalecemos, porque tenemos muchas cosas en común, pero también tenemos grandes diferencias y esas diferencias hacen que la animación no encaje en un sistema que está pensado fundamentalmente para la imagen real. Hemos conseguido ciertas cuotas, pero las cuotas son un primer paso para a conseguir una independencia en las convocatorias de ayudas o en la participación de televisiones… Hay que desgajar la animación de la imagen real porque esas diferencias nos hacen incompatibles. Por ejemplo, los largos periodos de producción, el volumen de las contrataciones, los elevados presupuestos, la gran capacidad exportadora de marca España, de nuestra cultura, de nuestro talento… Nosotros somos un sector, si quieres, privilegiado, también a caballo entre el audiovisual y los videojuegos, que ya se han planteado como sector estratégico. Creo que nosotros somos el nexo de unión de de eso. Tengo muchas esperanzas y estoy trabajando mucho en machacar a quienes pueden tomar las decisiones con esta idea de que la animación es también un sector estratégico».
A451: De hecho, habéis mantenido reuniones recientemente con diversas instituciones, hace poco estuvisteis en La Moncloa para hablar sobre VFX ¿no es así?
N.M: “No solo hemos hablado sobre VFX, también sobre animación, en la oficina de asuntos culturales de Moncloa con Manuela Villa, que es la Directora del Departamento de Asuntos Culturales del Gabinete de la Presidencia del Gobierno. Tengo que decir que conocerla me ha sorprendido muy gratamente porque he visto que es una persona muy profesional, muy implicada, que escucha mucho, que no olvida lo que escucha y que además cumple con lo que dice, que en la época en la que vivimos es mucho decir. Si te dice que va a hacer el seguimiento de un asunto lo hace. Creo que es muy interesante el trabajo que esta mujer puede desarrollar desde esa oficina, porque puede hacer la coordinación con los distintos ministerios, Cultura, Industria, Economía, Transformación Digital…. Ahora también con el Spanish Audiovisual Hub. Muchas veces notamos esa falta de coordinación entre ministerios y creemos que se puede solucionar creando una mesa de coordinación que podría perfectamente coordinarse desde el departamento que dirige Manuela Villa. Esa es una de nuestras aspiraciones, ya veremos si podemos concretarlo”.
“También estamos ahora en un momento clave, por ejemplo, en el tema de los incentivos fiscales, es un gran melón que abrir porque hay que mejorarlos. Se ha dado un gran empujón, por ejemplo ahora en Canarias, pero nos estamos quedando atrás porque los porcentajes son más bajos que en el resto de nuestros países vecinos. Hay que facilitar la burocracia, simplificar esos procesos»
A451: Por otro lado, la inteligencia artificial nos va a cambiar la vida y la animación tiene mucho que decir en este sentido porque es un sector que la ha utilizado desde hace muchísimos años, los videojuegos son un claro ejemplo ¿Cuál es loa opinión de Diboos al respecto?
N.M: «La semana pasado en unas jornadas sobre IA celebradas en Madrid yo dije que la animación 3D ya utiliza desde hace mucho tiempo formas primitivas de inteligencia artificial en forma de algoritmo, no es inteligencia artificial generativa, pero sí con ingesta datos y capacidad de procesamiento. Son herramientas que hemos ido adaptando y ahora estamos dando un salto más. Este cambio se ha popularizado, se ha democratizado. Estas inteligencias alternativas, utilitarias o artificiales tienen una mayor capacidad de análisis de datos y esa facilidad permite la creación de cosas nuevas. Se nos abre un mundo de preguntas para las que aún no tenemos respuesta. Nos vamos a tener que poner de acuerdo”.
A451: ¿Por dónde debe caminar el sector?
N.M: “Esto es un salto como en su día fue la irrupción de Maya, los programas de 3D, el Photoshop para la fotografía o Toon Boom ha sido para la animación tradicional. Ya no animamos con papel cebolla, que no se nos olvide, industrialmente ya no se utiliza porque hay herramientas más potentes que facilitan la eliminación de procesos tediosos complejos que no aportan nada creativo, nada artístico al proceso. Siempre digo lo mismo, hay que poner la creatividad humana al servicio de la obra, la inteligencia y la creatividad humana es la clave. El humano puede hacer algo que una máquina no puede hacer, que es tener la idea. Estoy deseando ver hasta dónde podemos llegar con la inteligencia artificial, hay que ver también el potencial positivo que tienen estas cosas, siempre y cuando tengamos claro esto, que el humano tiene que seguir estando en el centro, que es quien tiene la idea, quien supervisa el proceso, quien toma la decisión final y aprueba ese resultado, en función de sus gustos, preferencias… La inteligencia artificial sigue siendo una herramienta, una llave inglesa no decide atornillar el tornillo”.
A451: Precisamente vuestro socio en Diboos, Gonzalo Carrión, dijo en las jornadas de IA de Madrid una cosa que me llamó la atención, que no creía que la Inteligencia Artificial fuera a suponer pérdida de empleo en el sector de VFX, porque todos los contenidos cada vez tienen más efectos y van a seguir aumentando…
N.M: “Estoy de acuerdo, va a haber mucho más empleo, pero va a ser diferente, la gente va a tener que adaptarse, los skills de los artistas y de los equipos van a tener que cambiar y se van a tener que adaptar, pero eso ha pasado siempre. Tú antes no podías plantearte trabajar en animación si no sabías dibujar, pero desde la aparición del 3D hay gente que son grandísimos animadores pero que son incapaces de hacerte un monigote con un lápiz. Pero entienden la dinámica del movimiento, del acting… y con esa herramienta son capaces de producir animación y nadie discute que sean animadores. Con la visión y la idea, creo que con las nuevas herramientas se va a diversificar más el tipo de producciones. A más recursos de este tipo, habrá más humanos para supervisar esos procesos, coincido con la opinión de Gonzalo”
A451: ¿Y en qué punto está la Ley del Cine que estaba para aprobarse antes del adelanto electoral?
N.M: «Pienso que el ministro Urtasun tiene el firme objetivo de que salga adelante este año y prueba de ello es que recién nombrado, creo que no llevaba ni tres días en el cargo, lo primero que hizo fue reunirse con las asociaciones de productores. Fue mi primera reunión institucional como presidenta de Diboos. Su intención era coordinarnos a las asociaciones para ver si podíamos llegar a un acuerdo con las enmiendas de la Ley, de manera que pudiéramos retomar el proceso donde se dejó en la tramitación parlamentaria para no tener que volver a empezar de cero, ese es el objetivo”.
A451: ¿Qué pasará si no se llega a un acuerdo previo?
N.M: “Si no llegamos a un acuerdo, pues probablemente nos toque volver a empezar de cero y se prorrogue la aprobación de la Ley, aunque los primeros interesados en que no sea así son las asociaciones. Estamos trabajando en aquellas partes de la Ley donde todavía hay escollos. No es ningún misterio si te digo que el principal escollo está de nuevo en la definición de productor independiente. Estamos más cerca de una definición común pero todavía hay algunos puntos que hay que limar. Tengo la esperanza de que lo conseguiremos, veremos…»
A451: ¿Hay consenso sobre la definición?
N.M: “LO que no queremos es que vuelva a pasar lo que ocurrió con la Ley de Comunicación audiovisual que poco antes de su aprobación se modificó esa definición. Después de eso hubo un compromiso de que en la Ley del Cine, que tiene un talante más cultural, se tenía que priorizar la otra definición para compensar de alguna manera. Desde PAP, la plataforma de productores independientes donde están las principales asocioaciones vamos de la mano en este asunto. Es imprescindible que se aplique nuestra definición de productor independiente en la nueva Ley del Cine, primar la excepción cultural, que es la excusa perfecta para aprobar esa definición. Estamos definiendo la misma cosa en dos leyes de manera distinta y esto podría parecer que genera una falta de garantía jurídica, pero no es así, porque en la Ley del Cine se puede aplicar la excepción cultural y eso es lo que hace que esas dos definiciones puedan convivir. Nos jugamos mucho en esto”
N.M: ¿Cómo ves el sector de animación español actualmente desde un punto de vista creativo y empresarial?
N.M: “Has hecho un buen planteamiento en la pregunta, porque es la gran dicotomía. El talento español brilla más que funciona el tejido empresarial y eso es algo que debería estar retroalimentándose de una manera mucho más efectiva. El talento debería contagiar a la parte empresarial para que esa parte empresarial se fortaleciera y consiguiera impulsar más el talento. Por desgracia no es así, el talento es obvio que está consiguiendo cotas de prestigio como hacía años que no teníamos, también se están exportando más películas y series, sin embargo, seguimos teniendo un sector precario en cuanto a la consolidación de los estudios y eso es algo que es parte de mis objetivos como Diboos, conseguir consolidar el tejido industrial. Esto nos va a dar la posibilidad de auparnos en un andamio en el que vamos a poder llegar cada vez más lejos. Hila, un poco con lo que te comentaba antes, ese alineamiento de las instituciones con nosotros, que comprendan que nuestra idiosincrasia es muy diferente, que nosotros no montamos equipo para un rodaje y cerramos y en el siguiente rodaje necesitamos perfiles distintos, no, la animación no funciona así».
A451: ¿Cómo funciona entonces?
N.M: “Nosotros montamos un equipo para un proyecto y, aunque haya algunos perfiles distintos, la mayoría de la gente es del mismo perfil y cuando tú montas estudios para un proyecto que empieza y acaba, luego tienes que volver a montarlo. Es un trabajo ingente porque estamos haciendo unos equipos con un volumen brutal, con unas especializaciones muy difíciles de encontrar y nos supone un esfuerzo muy grande. Durante todo ese tiempo que trabajan con nosotros se les forma y cuando ya están formados, les tienes que dejar ir. Eso es un desgaste y una inversión de los estudios en formación e innovación, que estamos dejando ir por el desagüe. Las instituciones tienen que entender esa idiosincrasia, que no puede haber tantos picos. Ahí los incentivos fiscales pueden ayudar muchísimo porque te dan un respiro cuando haces un service, mientras desarrollas tus propias IPs. Por eso para mí es tan importante que tengamos esa oficina estratégica de la animación, esa línea única de la animación, donde todo esto se contemple porque hace falta una visión holística del sector. Tampoco podemos olvidar esa pata de la formación, nos falta gente para trabajar. Hay una fuga de talento brutal en el sector de la animación español porque las empresas no pueden tener una garantía de financiación constante para mantener sus estructuras y perder dinero cada vez que montan y desmontan los equipos para cada proyecto. Todo lo que sacamos de beneficio lo invertimos en sostener una estructura vacía y no podemos reinvertir en lo realmente interesante, que es en generar más IPs. Sería importante hacer circular las IPs entre el sector de animación y el de videojuegos, para aprovechar esa potencia que tienen ahora los videojuegos para lanzar las IPs a nivel internacional con muchísima más fuerza. Tampoco podemos perder de vista el sector del juguete, las licencias… la verdad es que la animación tiene todo ese potencial que ahora mismo no estamos aprovechando empresarialmente y se genera esta situación un poco bipolar. Cuanto más estamos brillando a nivel de prestigio, las empresas estamos siempre navegando en un mundo de cierta precariedad empresarial. Y todo lo que conseguimos con muchísimo esfuerzo, proque la mayoría de las cosas las hacemos a pulmón”
A451: Esta falta de consolidación del tejido se observa muy bien en las candidaturas a los Goya, donde hay años con varios largometrajes y otros con apenas uno…
N.M: “Exacto, pero porque ese año en el que hay una película, hay cinco más en producción y las empresas están trabajando y ganando dinero y el año que ves cinco nominadas, igual no hay ninguna más en producción y estamos todas las empresas ‘caninas’, porque no encontramos trabajo o estamos buscando serie o no tenemos película en producción. Hay que buscar una solución a esto, existen mecanismos que podemos poner en marcha, pero requieren de esa coordinación entre instituciones, empresas y asociaciones. Mi intención es hacer una labor, si quieres didáctica, para que entiendan como funcionamos, que una película puede tener 2.000 planos y que cada plano puede tener 1.000 fotogramas, no sé, 2.000 fotogramas, y cada uno de esos fotogramas para que se pueda producir necesita no sé cuántos días. Manuela Villa viene este año a Tenerife a los Premios Quirino por invitación de Diboos, en coordinación con la organización de los galardones, para que conozca el sector desde dentro, que sepa como funcionamos, vamos a visitar un estudio con ella, es fundamental que lo vea, no solo que se lo cuentes. Que vean también en Tenerife 30 países trabajando conjuntamente”.