El legendario Oleg Nikolaevitch Karavaychuk es el enigmático y sobrecogedor protagonista de esta película del director Andrés Duque. Movido por la música que el pianista compuso para una película de Kira Muratova, Duque es el primer extranjero en ganarse la confianza del siempre activo y excéntrico ruso de 89 años.
Algunos apuntes biográficos: Oleg Nikolaevitch Karavaychuk (1927), fue un niño prodigio que tocó el piano para Stalin, asistió al Conservatorio de Leningrado y a lo largo de su carrera ha escrito música principalmente para teatro y cine – por ejemplo, para Paradjanov y Muratova. En Rusia, es admirado por su música y su forma de tocar, pero también por su singular y excéntrica personalidad. A los 89 años, Karavaychuk sigue siendo una figura controvertida y desconcertante
en la cultura rusa.
La hermosa película que Andrés Duque le ha dedicado es un regalo para el espectador, un regalo de un viejo artista que alejado de toda convención social, quiere reconciliarse con el mundo y nos transporta lejos de la realidad a través de sus palabras, sus gestos y su interpretación al piano, a un mundo donde las perturbadoras disonancias son portadoras de una liberadora belleza.
Dirección: Andrés Duque.
Año: España, 2016.
Producción: Marta Andreu, Tània Balló, Serrana Torres.
Distribución: Márgenes.
Estreno: 7 de octubre de 2016.