En un mundo en el que la tecnología ha cambiado la forma de hacer cine de animación y donde Pixar y DreamWorks han acaparado el mercado animado generado por ordenador, es bueno celebrar que hace 10 años un grupo de locos decidió volver a lo básico realizando filmes con muñecos que se movían al viejo estilo, fotograma a fotograma, y con articulaciones mecánicas a lo ‘King Kong’ más atávico.
El estudio nació en plan progre, en las altas latitudes de Portland (en Oregón, EEUU). Y detrás de su fundación está la pasión de Travis Knight. Se trata del retoño del dueño de Nike, el fundador del estudio. Podía haber sido un niño rico sin más pero su pasión por querer ser animador de muñecos le llevó a encauzar su fortuna (y la de su papá, que es el verdadero dueño del estudio) para poderse permitir el lujo de soñar con el lugar ideal en el que trabajar y hacer magia animada.
El comienzo no pudo ser más prometedor con un film de lujo, ‘Coraline’, donde a la magia del libro de Neil Gaiman se unió al genio del realizador de ‘Pesadilla antes de Navidad’, Henry Selick (que no Tim Burton) dando al mundo esa pequeña joya que debería de haber ganado el Oscar.
Ahora los estudios Laika celebran su primera década de vida y Ovedito ha sido el primero en querer sumarse a esta celebración de cumpleaños.
Porque el corazón de este estudio se desplazó en pleno a Los Angeles para montarse una fiesta en con la que celebrar sus primeros diez añitos y ya de paso promocionar ‘Kubo and the Two Strings’, su próximo estreno, una historia japonesa que esta vez dirige el propio Travis que se estrena así como realizador.
Pero más que los canapés o los famosos a Ovedito le interesaron sus héroes de la pantalla y pudo fotografiarse con sus amigos de ‘Coraline’, ‘ParaNorman’ y ‘Boxtrolls’, todos ellos mucho más que muñecos, y pasearse por unos decorados hechos a su medida.
Ahora solo queda esperar hasta agosto para disfrutar de ese ‘Kubo’ que promete acabar con las existencias de palomitas de los cines y para el que nuestro oso cinéfilo tiene ya reservada su butaca.
Copyright de las fotos: R&R Communications.