En unos pocos años, a raíz de la puesta en marcha de una nueva Ley de Cine en el año 2010, el sector audiovisual de la República Dominicana ha dado un salto cualitativo y cuantitativo que convierte a la Isla en un lugar muy a tener en cuenta en el panorama cinematográfico latinoamericano. Además de impulsar la producción propia y el consumo del cine local, Dominicana también es ahora un lugar atractivo para coproducir en condiciones ventajosas.
El cine de República Dominicana está más vivo que nunca como se puede apreciar estos días en Madrid con motivo de la IV edición Todo Cine – Todo Dominicana, del 28 de septiembre al 3 de octubre, la muestra de cine dominicano en España. En el evento se presentan trece películas, trece cortos y tres documentales y se llevará a cabo la segunda edición del mercado cinematográfico, que tiene como objetivo reunir a productores, distribuidores, exhibidores y agentes de ventas de España y República Dominicana, para la presentación de proyectos y películas que estén en fase de búsqueda de coproductores, financiación y distribución.
Atrás quedan rodajes como ‘El Padrino 2’, ‘Miami Vice’, ‘El buen pastor’… Ahora es el turno también de coproducciones con otros países iberoamericanos. Recientemente se filmó en República Dominicana el nuevo filme de Agustí Villaronga ‘El rey de La Habana’, coproducida por Pandora Cinema y Tusitala (España) y Esencia Films (República Dominicana) y distribuida por Filmax tanto nacional, como internacionalmente. La película cuenta además con la participación de TVE, Canal+, Televisió de Catalunya, Ibermedia, ICEC e ICAA y se basa en la novela homónima del escritor cubano Pedro Juan Gutiérrez.
Otra coproducción que cuenta con una pequeña participación española es ‘Falling’, segundo largometraje producido y dirigido por Ana Rodríguez Rossell, tras ‘Buscando a Eimish’, que está protagonizado por la actriz española Emma Suárez. Además, actualmente se rueda en Galicia ‘Sol y Luna’, una coproducción de República Dominicana y España, del cineasta español afincado en la isla del Caribe, José Enrique Pintor, que cuenta con un equipo mixto de actores y técnicos de ambos países. Tras su paso por varias localidades de Galicia, el filme saltará el charco para concluir en Santo Domingo y Punta Cana.
Otros ejemplos de coproducciones internacionales de República Dominicana con otros países son ‘El hombre que cuida’, una coproducción con Brasil, dirigida por Alejandro Andújar, y ‘Dólares de arena’, una coproducción con México y Argentina, dirigida por los directores dominicanos Laura Amelia Guzmán e Israel Cárdenas, rodada en la República Dominicana y protagonizada por Geraldine Chaplin, entre otras.
Con la nueva normativa, los productores cinematográficos podrán beneficiarse de un crédito fiscal transferible equivalente al 25 por ciento de todos los gastos que incurran en la República Dominicana que estén directamente relacionados con las etapas de preproducción, producción y postproducción de sus películas.
El crédito podrá ser transferido a favor de uno o varios contribuyentes dominicanos. Además, podrán contar con la disponibilidad de facilidades para soluciones de monetización por adelantado. El crédito fiscal no podrá transferirse por menos del 60 por ciento de su valor.
Además del crédito fiscal transferible, los bienes y servicios que estén directamente relacionados con las etapas de preproducción, producción y postproducción están exentos del pago del Impuesto sobre la Transferencia de Bienes y Servicios Industrializados (ITBIS) que es un impuesto indirecto tipo valor añadido (IVA).
No hay tope de presupuesto pero la inversión mínima debe de ser de 500.000 dólares. La retención fiscal a extranjeros está fijada en el 27 por ciento y el crédito puede utilizarse para la producción de largometrajes de ficción y documentales, series de televisión, mini-series y vídeos musicales.
Como los gastos deberán de ser incurridos por un contribuyente dominicano, los productores extranjeros deberán contratar los servicios de una agencia de producción local, que esté debidamente inscrita en el Sistema de Información y Registro Cinematográfico (SIRECINE), o constituir una compañía en la República Dominicana, obtener un registro mercantil y registro nacional de contribuyente (RNC), e inscribirse en SIRECINE.
Los productores extranjeros deberán dirigir a la Directora General de Cine de la República Dominicana, solicitando el Permiso Único de Rodaje (PUR) y expresando su intención de aplicar al Crédito Fiscal Transferible. Las producciones extranjeras deberán contar con una participación mínima de dominicanos, de conformidad a la siguiente proporción 10 por ciento de Junio de 2011 a 2014; 20 por ciento de Junio de 2014 a 2016 y 25 por ciento a partir del sexto año, es decir, de Junio de 2016 a 2021.
«A pesar de que República Dominicana tiene una Ley de cine muy eficiente, basada en los estímulos fiscales, hasta hace muy poco era una cinematografía que no existía. Con esta nueva Ley hacen más de quince títulos nacionales anuales más otras producciones extranjeras que ruedan allí. Trabajan con un sistema de producción más norteamericano que el nuestro y espero les dure mucho tiempo, ya que se está creando un sector de interés cultural y económico que antes no existía y que el gobierno dominicano ha sabido potenciar gracias a la inversión privada. No estaría mal que nuestras autoridades culturales y económicas se dieran cuenta que mientras aquí no suceda, estamos perdiendo no sólo cultural, sino económicamente una industria que podría tener gran influencia en la economía de este país», comenta la productora Luisa Matienzo, tras su experiencia con ‘El Rey de La Habana’.
Los incentivos fiscales de República Dominicana tienen que competir con otras suculentas ofertas de la región como las de Colombia o Puerto Rico, por poner solo algunos ejemplos. “Puerto Rico tiene una gran normativa de incentivos fiscales, pero fuera de dos grandes empresas no pueden absorber todo. Hemos visto como muchos editores, directores de arte y directores se están radicando en República Dominicana. Nosotros hasta la fecha hemos pagado todos nuestros créditos fiscales, una cantidad que asciende a 1.000 millones de pesos dominicanos (más de 22 millones de dólares) desde el año 2011 hasta la fecha. Otra de las ventajas que ofrece República Dominicana es la ubicación. El incentivo fiscal de Colombia es magnífico, pero es más complicado llegar allí y desplazarse por el país. En República Dominicana el desplazamiento más largo puede ser de cinco horas y cruzas el país en cuatro. Contamos con siete aeropuertos internacionales y la mayoría de la población habla inglés”, asegura la directora general de cine de República Dominicana Yvette Marichal.
Actualmente, República Dominicana cuenta con cinco equipos completos de producción listos para trabajar simultáneamente en otros tantos proyectos audiovisuales. La isla dispone 800 técnicos acreditados en todas la áreas del audiovisual de los cuales 535 están asociados a Adocine (Asociación Dominicana de Profesionales de la Industria del Cine). Además de la Ley de Cine, República Dominicana cuenta con el fondo de apoyo al cine nacional, Fonprocine, que actualmente cuenta con líneas para guión, desarrollo y producción, a la espera de instrumentar otra para promoción.
Desde que entrase en vigor la Ley hace ahora cinco años la industria cinematográfica de República Dominicana ha pasado de producir dos películas anualmente a una veintena y la cuota de mercado del cine dominicano ha saltado hasta el 33 por ciento.
El presupuesto medio de estas producciones locales ha pasado en el último lustro de 300.000 euros a 1,1 millones de euros, con películas que incluso se van por encima de los 3 millones de euros. “Cuando los presupuestos son de esta envergadura exigimos para apoyarlos que vengan con un acuerdo de distribución y la razón es muy sencilla: somos solo diez millones de habitantes y contamos con cuatro millones de espectadores anuales (y 36.000 butacas) es imposible rentabilizar una película así en nuestro propio mercado. Lo que buscamos es que los presupuestos se adapten a la realidad local o bien que hagan un esfuerzo para distribuir internacionalmente la película”, explica Marichal.
Para ello, las autoridades de la isla del Caribe pretenden internacionalizar su cine a través de iniciativas como Todo Cine – Todo Dominicana, la muestra de cine dominicano en España, e impulsando las coproducciones con otros países. En este sentido, República Dominicana cuenta con un acuerdo de coproducción bilateral con España que permite, en vez de tener que pagar un 27 por ciento de la retención fiscal habitual para extranjeros, aplicar el mismo 10 por ciento que deben pagar los dominicanos. “Esto facilita mucho que podamos trabajar con España… hasta ahora la coproducción funcionaba de tal modo que el dinero español se gastaba en España y el Dominicano en la República Dominicana y todo el mundo feliz… Ahora, si no contamos con los servicios necesarios, no tenemos problema que el dinero que aporta República Dominicana se use en el exterior, lo que no pagamos son los impuestos”, apunta la directora general de cine de República Dominicana.
Hasta el momento, en lo que se refiere a los rodajes internacionales ha crecido de manera relevante sobre todo la producción de documentales y Reality Shows. Por tercer, año consecutivo se ha rodado allí el reality ‘Survivor Turquía’, en la zona costera de Las Terrenas y poblados aledaños, en un rodaje que durará unos tres meses en el país del Caribe. En general estos rodajes internacionales han elegido República Dominicana únicamente como plató de rodaje, sin acceder a los beneficios fiscales que ofrece la Isla. “Todavía estamos esperando las grandes producciones de Hollywood para consolidar más nuestra propuesta”, comenta la responsable de cine de República Dominicana.
Asimismo, durante la estancia en Madrid, Yvette Marichal ha firmado con EGEDA un acuerdo para que el cuarto Foro EGEDA-FIPCA del Audiovisual Iberoamericano vuelva a celebrarse el próximo mes de noviembre en Santo Domingo.