RTVE rueda hasta el próximo 16 de septiembre en exteriores naturales de la Comunidad de Madrid ‘El misterio del asesino inesperado’, TV movie protagonizada por los personajes de la comedia policiaca de La 1 ‘Los misterios de Laura’, que tuvo su estreno en julio de 2009.
El equipo
El capítulo especial es una producción de RTVE en colaboración con Veranda TV (Grupo Mediawan). El reparto incluye a algunos de los personajes originales de la serie, entre ellos María Pujalte (‘Merli. Sapere Aude’) que de nuevo da vida a la inspectora Laura Lebrel, junto a Oriol Tarrasón (‘Amar es para siempre’), Laura Pamplona (‘La que se avecina’), Beatriz Carvajal (‘La caza. Monteperdido’) y César Camino (‘Hospital Central’). Además cuenta también con Raul Mérida (‘Todo lo otro’), Joaquín Climent (‘Ana Tramel. El juego’), Carmen Conesa (‘Merlí. Sapere Aude’), Carlos Hipólito (‘Competencia oficial’) y Nadia Al Saidi (‘La caza. Monteperdido’), entre otros.
La dirección corre a cargo de Pablo Guerrero (‘Alba’, ‘El secreto de Puente Viejo’), con guion de Javier Holgado (‘Alba’, ‘El desorden que dejas’) y Carlos Vila (‘Alba’, ‘Pre4sunto culpable’), ambos creadores de ‘Los Misterios de Laura’.
Sinopsis
Se celebra el acto de fin de curso del grado de Criminología en una prestigiosa universidad privada, organizado por el rector Eugenio Ortiz. Este es un reputado teórico y antiguo asesor de la policía, que lleva más de 50 años enseñando a las nuevas generaciones de investigadores y agentes de la ley la forma de resolver crímenes.
Mientras se prepara para dar su discurso, se encierra en su despacho, donde se encara con alguien. Los gritos llaman la atención de más y más gente, que se van acercando a la puerta cerrada e intentan entrar cuando oyen que Ortiz empieza a pedir ayuda a gritos. Sin embargo, la puerta está cerrada por dentro, y mientras buscan la manera de echarla abajo, se oye un disparo. Sentado a su mesa, Ortiz está muerto con un tiro en el pecho. No hay arma del crimen a la vista. Puertas y ventanas están cerradas desde dentro. Y por supuesto, no hay ni rastro del asesino.
