La decimosexta edición del Festival de Málaga. Cine Español ha sido presentada en Madrid en su espacio habitual, la sala de Fnac en la calle Preciados. El lugar ha sido el mismo pero las circunstancias han cambiado considerablemente en poco tiempo. Hace unos años la sala de los grandes almacenes madrileños se quedaba pequeña, pero este año había incluso sillas vacías, algo impensable no hace mucho. La crisis ha hecho mella en la prensa española y también ha pasado factura al presupuesto del certamen malagueño, una vez más.
Como en otras ocasiones Fernando Méndez-Leite, miembro del comité de selección del festival, ha sido el maestro de ceremonias del acto. Junto al director de ‘La Regenta’ han participado en la presentación Damián Caneda, Concejal de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Málaga, Juan Antonio Vigar, Director del Festival de Málaga y varios de los directores y productores de las películas que participan este año en la Sección Oficial de Largometrajes.
Entre ellos se encontraban Adolfo Blanco, productor ‘De ayer no termina nunca’, de Isabel Coixet, que abre el festival; Jorge Naranjo, director de ‘Casting’; Daniel Calparsoro, director de ‘Combustión’; Miguel Alcantud, director de ‘Diamantes negros’; Jesús Monllaó, director de ‘Hijo de Caín’; Jorge Algora, director de ‘Inevitable’; Mariano Barroso, director de ‘Todas las mujeres’ (fuera de concurso); Rodrigo Sorogoyen, director de ‘Stockholm’; Mariela Besuievsky, productora de ‘De 15 años y un día’, de Gracia Querejeta; el escritor Juan Eslava Galán, guionista de ‘La mula’, y Gabi Ochoa, director de ‘El amor no es lo que era’, que clausura la edición de 2013.
Méndez Leite definió la Sección Oficial de Largometrajes de este año como “una apuesta por la calidad, las novedades y el riesgo, donde caben películas de todo tipo”. Curiosamente, el comité de selección del festival de la Costa del Sol ha visionado un total de 107 películas y ha seleccionado 13 para la Sección Oficial. “Si nos fijamos solo en la programación del Festival de Málaga, se puede afirmar que el estado del cine español es estupendo, hemos visionado más de cien títulos para construir una programación de calidad en un momento tan complicado como el actual”, comentó el director del Festival. Además, Vigar señaló que este año no habían notado un descenso importante en la cifra de producción cinematográfica española: “creo que los datos oficiales hablan de un descenso de la producción de tan solo el 5 por ciento, lo que sí ha cambiado es la forma de producir, pero creativamente creo que el cine español vive un momento muy bueno”. Méndez-Leite apostilló al respecto: “películas se producen en España, pero hemos observado que son proyectos más modestos y con menos ambición formal. En definitiva, se trata de películas más pequeñas, más abarcables desde el punto de vista de la producción”.
Para Mariela Besuievsky (Tornasol Films) el problema fundamental tiene que ver con la transformación del sector, “se está destruyendo el tejido industrial del cine español tal y como lo conocimos y que tan buenos resultados ha dado, potenciando la marca del cine español en el exterior”. Para la productora uruguaya la clave es que no existe un nuevo modelo de producción definido que suplante el modelo clásico: “nuestra responsabilidad ahora es encontrar fuentes de financiación que nos permitan tener una cinematografía diversa como hasta ahora, pero debemos ser conscientes que los hábitos del consumidor también han cambiado”.
Juan Antonio Vigar se enfrenta a su primer festival como director aunque, en su opinión, el certamen es un proyecto que conoce en profundidad porque ha desempeñado diversas funciones de relevancia en la organización, en ediciones pasadas: “conozco el proyecto y mi modelo de festival es que debe ser útil, coherente y cercano. Útil para la ciudad y para la promoción del cine español, coherente en su programación con los tiempos que corren, aunque este año hemos creado una nueva sección (‘Málaga Premiere’) y cercano a toda la industria del cine, aspiramos a seguir siendo una referencia. Si conseguimos esto, habremos ganado futuro”. No hay nadie en el cine español que no valore la función del Festival, para Damián Caneda “el festival tiene que a mantenerse, la apuesta institucional no es coyuntural, Málaga debe ser la ciudad del cine soplen los vientos que soplen”.
