Seth MacFarlane vuelve en calidad de guionista, director y protagonista doblador (en la versión versión original) de ‘Ted 2′, la secuela de Universal y Media Rights Capital de la comedia para adultos más taquillera de toda la historia del cine.
El actor Mark Wahlberg regresa a su papel, así como los guionistas Alec Sulkin y Wellesley Wild. Seth MacFarlane produce esta comedia junto a Scott Stuber, de Bluegrass Films, John Jacobs y Jason Clark.
Ha llegado la hora de legalizar a Ted.
Desde que los dejamos hace unos años, los dos siguen viviendo en Boston. John acaba de divorciarse y Ted se ha casado con Tami-Lynn, una chica barriobajera que encaja con sus gustos. Aparecen los típicos problemas de convivencia entre la pareja y deciden tener un bebé para salvar la relación. Sus esperanzas se van al traste cuando el estado de Massachusetts decide que Ted no es una persona, sino una «propiedad», y por lo tanto, no puede ser padre adoptivo. Echan a Ted de su trabajo en la tienda de ultramarinos y le informan de que su matrimonio ha sido anulado.
Enfadado y desalentado, decide canalizar su frustración demandando al estado de Massachusetts para que se le reconozcan sus derechos, y pide ayuda a su mejor amigo. Reclutan a una aficionada a la maría (con fines medicinales) llamada Samantha L. Jackson para presentar el caso ante el juez.
Desafortunadamente, Ted pierde y solo les queda ir a Nueva York e intentar convencer al legendario defensor de los derechos civiles, Patrick Meighan, para que acepte el caso y presente una apelación. Si ganan, habrán demostrado que Ted no es solo un osito de peluche al que le va la cerveza y los porros, sino una persona con los mismos derechos que otros estadounidenses a los que les van la cerveza y los porros.
Los productores aprovecharon varios decorados naturales, famosos entre los bostonianos y los turistas, como el Boston Common y sus barcas-cisne, el paseo Seaport y el muelle de Boston. También se rodó en la Aduana Marriott de la plaza McKinley, que hace las veces de tribunal, un edificio construido en 1834 y reconvertido en hotel.
Justo más allá del puente Tobin que cruza el río Mystic se encuentra la antigua zona industrial de Chelsea. Era un barrio de trabajadores, pero se ha ido aburguesando en los últimos años y se ha convertido en una curiosa mezcla de almacenes y residencias. ¿Qué mejor lugar para el primer piso de Tami-Lynn y Ted?
La iglesia Union United Methodist, una de las congregaciones afroamericanas más antiguas del país, sirve de decorado para la boda de Tami-Lynn y Ted. The Eagle Bar, donde Ted y John van regularmente a tomarse una copa, tampoco está lejos. El convite de la boda se rodó en el Club Milton-Hoosic, de Milton, Massachusetts, donde Ted y John aprovecharon para cantar su famoso tema «Thunder Buddies» (Amigos del alma).
También se filmó en la biblioteca pública Woburn. El edificio Converse Memorial, donde está la biblioteca pública Malden, abrió sus puertas en 1885. Diseñado por Henry H. Richardson, la construcción fue costeada por Converse (el mismo que da su nombre a las zapatillas) y su esposa en memoria de su hijo mayor, Frank, cajero en el banco Malden, que falleció trágicamente durante el primer atraco a un banco en Estados Unidos en 1863.
Aquí es donde Samantha, John y Ted se documentan para defender el caso, se fuman unos cuantos porros y rinden un pequeño homenaje a El club de los cinco en una secuencia cantada y bailada. Una de las paradas en el viaje de Boston a Nueva York es en el restaurante Mill Pond, de Wareham, ambientado en los años cincuenta del siglo pasado.
Uno de los decorados preferidos de los actores y el equipo fue la «mansión Tom Brady», que se rodó en una residencia privada de Norfolk. «Tom Brady es un icono», dice Scott Stuber. «Mark y él están entre los hijos favoritos de Boston. Cuando rodamos, los vecinos no podían creérselo, era como un sueño hecho realidad: Tom y Mark juntos en el césped delante de la casa». Pero dispusieron de muy poco tiempo, sigue explicando el productor: «Solo teníamos tres horas para rodar la escena. Estaba en pleno entrenamiento y tuvo la gentileza de hacernos el favor. Por suerte, todo resultó genial a la primera y Tom volvió al entrenamiento en Foxborough».
Alguno de los mayores decorados y secuencias más complicadas se rodaron en las granjas Appleton, de Hamilton e Ipswich. Fundadas en 1638 mediante una concesión a Samuel Appleton, las dos granjas ocupan aproximadamente cuatrocientas hectáreas y están entre las más antiguas que siguen funcionando en el país. Actualmente pertenecen a la novena generación de la familia Appleton.
El diseñador de producción Stephen Lineweaver necesitaba la localización perfecta para que el coche, conducido por Ted, se saliera de la carretera y acabará en un pajar. Cuando salen del pajar, Ted, Samantha y John descubren que están rodeados por hectáreas de maravillosas plantas de marihuana. Desgraciadamente, los camellos los ven y les persiguen en coche por los campos.
El equipo visitó unos 300 pajares antes de decidir que sería más fácil levantarlo desde cero. «Al principio pensamos usar un pajar auténtico», recuerda el diseñador de producción. «Pero nos dimos cuenta de que no era factible. El coche debe elevarse y recorrer unos 30 metros en el aire hasta chocar contra el pajar. Necesitábamos un risco o algo parecido desde el que saliera el coche. Lo difícil fue encontrarlo en el este de Massachusetts porque no hay muchas granjas con colinas y precipicios. Por fin hallamos el sitio perfecto, con la colina y los árboles exactamente donde debían estar, y lo bastante alejado de todo como para cultivar maría. Solo quedaba construir el pajar y compramos uno prefabricado, era lo más sencillo».
A continuación, el departamento artístico envejeció el edificio de madera quitándole la pintura, sacando algunos tablones e incluso usando un hacha en algunos puntos, hasta que el pajar parecía haber sido construido hacía cien años. Pero crear los campos de maría fue más complicado. «¿Cómo se conduce en un campo de maría sin plantas?», pregunta Stephen Lineweaver.
Se usó una combinación de miles de plantas de bambú mezcladas con plantas de maría falsas con hojas y capullos hechos de seda y musgo. «Las plantas falsas eran asombrosas; tenían capullos enormes, las hojas parecían totalmente naturales», dice Mark Wahlberg. ¿Y qué se hace con maría falsa? Engañar a un amigo, claro. «Eran muy realistas, así que cogí unas cuantas, las metí en una bolsa de plástico y se las llevé a un amigo», dice el actor, riendo. «Le llamé diciéndole que le traía maría. Estaba como loco cuando vio las plantas. Las miró, las tocó e incluso las olió. No se dio cuenta hasta que llegó a su casa y se las enseñó a su novia».
Para rodar la persecución a través de los campos de maría, se crearon dos gigantescas plataformas giratorias (a las que se bautizó «tiovivos de maría») cubiertas de plantas que giraban continuamente y colocadas a cada lado del coche de los protagonistas. El vehículo no se mueve, pero las plataformas dan la impresión de que avanza entre la maría. El director de fotografía Michael Barrett colocó cámaras en los laterales y por encima del coche. «Posteriormente, el departamento de efectos visuales [encabezado por el supervisor Blair Clark] se encargó de añadir muchas más plantas», dice el diseñador de producción. «La cantidad de gente que trabajó en esta escena y lo mucho que nos costó es algo asombroso».
En un plató de Woburn se rodaron los interiores del despacho de Samantha y los pisos de John, y de Tami-Lynn y Ted.
A continuación, los actores y el equipo se trasladaron a Nueva York para rodar exteriores en la Biblioteca Pública de la ciudad, el parque Bryant, Midtown West y el Comic-Con de Nueva York en el Centro Javits. Los interiores del Comic-Con se rodaron posteriormente en los estudios FOX de Los Ángeles, en un enorme plató de 2.500 metros cuadrados.
«El Comic-Con fue una oportunidad para hacer cosas geniales», dice Stephen Lineweaver. «Como lo importante era el tamaño, alquilamos el mayor plató que encontramos. Luego quedaba lo más complicado, encontrar a los vendedores, a todas las marcas y a las empresas que compiten entre sí para rellenar el decorado y hacer creer que era de verdad».
Gracias a la coordinación de los miembros del departamento de diseño, se consiguió atraer a vendedores auténticos con sus carísimas casetas y pantallas de vídeo, e instalarlo todo en tres días; sin duda, una auténtica hazaña. Curiosamente, el diseño no se ajustó al guión, sino que el rodaje se ajustó al diseño, tal como explica el productor Jason Clark: «Hasta que no instalaron todas las casetas, no pudimos decidir dónde rodaríamos y cuáles eran las mejores tomas. Había cosas como un ‘Bumblebee’ de seis metros de Transformers, una caseta de dos plantas de Black Sails y otra asombrosa caseta de Godzilla».
Posiblemente, la joya de la corona del Comic-Con de ‘Ted 2’ era una réplica de la nave Enterprise, de Star Trek. En una escena clave, uno de los personajes sufre un grave percance con la nave. «Fabricar el Enterprise no fue fácil», reconoce el diseñador de producción. «Seth trajo un pequeño modelo exacto de la nave que no llegaba a los 30 centímetros, pero el modelo que se ve en el Comic-Con mide seis metros de largo».
El director artístico Bryan Felty llevó el modelo de Seth MacFarlane a un diseñador que se ocupó de reproducirlo digitalmente para que un experto en modelismo gigante lo construyera. Jason Clark dice, riendo: «En la película, todos estamos locos por estas cosas; nos lo pasamos muy bien con el Enterprise».
Seth MacFarlane se quedó asombrado al ver la nave. «Creo que más o menos es del mismo tamaño que la nave usada en la serie. Era un modelo de buen tamaño alrededor del que movían la cámara, y este era igual de grande», dice el guionista y director. «Encima, lo construyeron en poquísimo tiempo. Tengo un pequeño modelo del Enterprise que le di al diseñador de producción, lo escanearon y sacaron uno cien veces mayor. Era genial».
Scott Stuber dice que recrear un evento tan conocido como el Comic-Con, lleno de personajes y marcas famosas, siempre es complicado: «Estábamos rodeados de excelentes colaboradores que nos ayudaron a crear algo real y mágico a la vez. Las personas que hayan visitado la feria no podrán decir lo contrario, sea el Comic-Con de San Diego o el de Nueva York».
Dirección: Seth MacFarlane.
Año: Estados Unidos, 2015.
Reparto: Mark Wahlberg, Seth MacFarlane, Amanda Seyfried, Giovanni Ribisi, John Slattery, Jessica Barth y Morgan Freeman.
Producción: Scott Stuber, Seth MacFarlane, John Jacobs, Jason Clark.
Distribución: Universal Pictures.
Estreno: 31 de julio de 2015.