UTECA, la Unión de Televisiones Comerciales, pone el foco en el análisis que han realizado la Asociación de Usuarios de Comunicación (AUC) y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre los contenidos disponibles en plataformas de compartición de vídeos y redes sociales.
En el último año, AUC ha examinado cerca de 4.000 vídeos, mientras que CNMC ha analizado 657. Las conclusiones son que «los menores tienen acceso a contenidos inadecuados para su edad, apenas señalizados», según destaca UTECA. La Unión, que lleva años denunciando los contenidos de plataformas como YouTube o Twitch, también señala que los niños españoles «padecen un agresivo bombardeo publicitario, a menudo a través de publicidad encubierta, no identificada como tal» cuando entran en plataformas de compartición de vídeos y redes sociales.
«Estamos ante una emergencia social, a la que tanto la AUC como la CNMC han puesto números, que obliga al Gobierno a actuar de forma rápida y contundente, para acabar con una impunidad que perjudica a los sectores más vulnerables de la sociedad», indica UTECA en comunicado de prensa. «No caben excusas, no cabe esperar a que Europa resuelva un problema generado por la no aplicación de la legislación audiovisual nacional a los gigantes internacionales que prestan servicio en España. El perjuicio es aquí y ahora, y la solución en forma de leyes que regulen, supervisen y puedan sancionar a estos nuevos operadores no debe demorarse más», añade la Unión.
Los datos
Las conclusiones indican que de los casi 4.000 vídeos analizados por la AUC, sólo un 1,1 % presenta algún tipo de señal o advertencia de edad, «una advertencia que es obligada para las televisiones», recuerda UTECA. Además, sólo un 5,5 % de los contenidos perjudiciales para el menor presenta algún tipo de señal o advertencia de edad.
En cuanto a la publicidad, el estudio de la AUC advierte de que en las plataformas y en las redes sociales un 34,3 % de los mensajes publicitarios y promocionales detectados son comunicaciones comerciales encubiertas, «práctica prohibida y sancionada por la legislación audiovisual», recuerda UTECA. Esa publicidad encubierta se detecta mayoritariamente entre los influencers, en un 84,6 % de los vídeos generados por los usuarios.
La Asociación de Usuarios de Comunicación ha destacado, además, la actuación de los influencers infantiles y juveniles, “que explotan la confianza y credulidad de los menores, incitándoles a la compra, generalmente de forma encubierta”. Especialmente relevante le resulta también a la AUC “el acceso de los menores a contenidos de estética que imponen cánones de belleza muy estrictos y excluyentes”.
En la misma línea, el análisis de la CNMC, realizado por los propios técnicos del organismo, constata que “en una gran parte de los contenidos que emiten estos agentes en las plataformas de intercambio de vídeo existen comunicaciones comerciales no identificadas o contenidos audiovisuales que pueden ser perjudiciales o inapropiados para los menores”.
El estudio de la CNMC señala que en los vídeos de YouTube y Twitch “lo más relevante, por su presencia en más de la mitad de los vídeos visionados, es la existencia de contenidos que pudieran vulnerar la normativa sobre protección de los menores y de comunicaciones comerciales”. En cuanto a Instagram TV, la CNMC alerta de que “también se ha apreciado una alta exposición de contenidos comerciales por parte de estos agentes sin la debida identificación de los mismos”. En este contexto, la CNMC pretende supervisar la actividad de los influencers por considerarles prestadores de servicios audiovisuales.