La UNIC es la asociación que forman exhibidores de 36 países europeos, entre los que se encuentra España a través de FECE (Federación de Cines de España). Una organización que representa más de 33.000 pantallas de cine y una taquilla que ronda los 6.400 millones de euros de taquilla sólo en la Unión Europea. Con sede en Bruselas celebrará en CineEurope (Barcelona, 20-23 de junio) su convención anual.
Audiovisual451 entrevista a su presidente, el inglés Phil Clapp, sobre el reto de que los ciudadanos sigan yendo al cine y sobre los avances tecnológicos, entre otros temas. Aunque rehúsa hablar de asuntos como el inevitable cierre de salas o el desinfle del 3D, Clapp se menciona sobre la situación del sector en España.
Audiovisual45: ¿Qué pueden hacer los cines para atraer a las audiencias más jóvenes?
Phil Clapp: «Los jóvenes europeos siguen yendo mucho al cine, las cifras que manejamos son optimistas, especialmente en mercados emergentes como Europa Central y del Este, sin embargo, ha habido cambios demográficos en ciertos territorios que sin duda han conviertido en un reto el hecho de que los jóvenes vayan al cine.
Los mercados más maduros dentro de Europa Occidental están abordando esta cuestión a través de diferentes iniciativas, quizá el mejor ejemplo esté en Francia con la promoción ‘4 Euro’, que empezó en 2014 y por la que la mayoría de los cines franceses ofrecen entradas a cuatro euros a los menores de 14 años.
Las iniciativas de film literacy, que despierta el interés de los jóvenes por la lectura a través del cine, son otra opción, permiten a los niños y a los jóvenes desarrollar un pensamiento crítico, lo mismo sucede con la propuesta de media literacy, ambas iniciativas convierten a los más jóvenes en fieles asistentes a las salas de cine. En Reino Unido, la organización benéfica Into Film, que cuenta con el apoyo de la industria, invita a los niños y a los más jóvenes a montar sus propios clubes de cine, a hacer sus propias películas y a, por supuesto, vivir la experiencia de la gran pantalla.»
AV451: ¿Por qué los miembros de UNIC consideran que iniciativas como The Screening Room son peligrosas para la industria del cine?
P.C.: «El modelo de The Screening Room, tal y como se ha planteado, parece ofrecer pocos beneficios a los circuitos cinematográficos y a sus socios distribuidores, y representa muchos riesgos potenciales.
A la vez que es un asunto de cada circuito acordar los términos sobre el estreno de las películas con los distribuidores, el estreno exclusivo en salas de una película inédita ayuda a crear unos niveles muy elevados de conciencia entre la audiencia y, en última instancia, beneficia la explotación de la película en todas las plataformas, incluido el Vídeo Bajo Demanda. Más allá, estamos muy pendientes de que este modelo suponga la proliferación de copias ilegales de gran calidad en Internet mientras la película está en los cines y sigue su camino comercial. El riesgo aquí no es sólo para los exhibidores, sino que afecta a toda el ecosistema de la industria del cine.
En los últimos diez años ha quedado claro que iniciativas disruptivas parecidas a The Screening Room no siempre producen grandes beneficios ni son éxitos comerciales, la industria de la música es un buen ejemplo. Los circuitos de cine europeos lucharán para seguir ofreciendo experiencias excluvias y de gran calidad a un precio asequible para todas las edades y todos los gustos.»
AV451: Últimamente en España algunos circuitos de salas han cambiado de propietario y han sido comprados por grandes compañías extranjeras. ¿Es una tendencia también en otros países? ¿Cómo se siente UNIC frente a estos movimientos? Parece que el sector de la exhibición se está concentrando.
P.C.: «Lo que ha pasado en España es parte de una tendencia general hacia la consolidación en toda Europa y en más territorios, todo ello basado en las economías de escala y en el deseo de coger músculo de mercado. Entre los ejemplos más recientes tenemos la adquisición de Cinema City por parte de Cineworld a principios de 2014, y la expansión de Vue International por Polonia, Dinamarca, los Países Bálticos y Alemania, además de Italia hace poco.
También hemos sido testigos de desarrollos parecidos a nivel nacional, por ejemplo, Cinema Park y Formula Kino, las dos cadenas de cines más grandes de Rusia, han anunciado en marzo de este año sus planes para fusionarse.
Tenemos la intuición de que vamos a vivir unos tiempos interesantes en los próximos meses y años, dado que muchos exhibidores están a la carrera para conseguir las 10.000 pantallas. En paralelo a estos movimientos empresariales, continúan existiendo muchos operadores pequeños que mantienen su éxito, complementados por una producción local de cine dinámica. Esto también contribuye a la adaptación y a la resistencia del sector.»
AV451: La tecnología para las salas de cine sigue desarrollándose, por ejemplo, ahora se habla de la proyección láser. ¿Crees que estos avances atraerán más público a las salas? ¿En qué tecnologías crees que deberían invertir los exhibidores?
P.C.: «Ofrecer a los espectadores una experiencia única imposible de replicar en casa es el gran atractivo de venta para nuestro sector. En los últimos tiempos, la industria cinematográfica ha acelerado la inversión en este campo tecnológico. Por ejemplo, han surgido los llamados Premium Large Formats, que presentan pantallas más anchas y más largas, desde el suelo hasta el techo, y se han instalado en salas de todo el mundo. Los sistemas de sonido inmersivo se han incorporado a las salas a un ritmo que seguramente nadie en la industria había previsto. Además, los proyectores láser, que aún están en su fase de desarrollo, parecen tener la capacidad de mejorar la calidad de imagen con un coste eficiente para los operadores.
Estas nuevas tecnologías han tenido muy buena acogida entre cineastas de todo el mundo y han causado una impresión positiva en aquellas personas que ya han tenido la suerte de experimentarlas. Con una gama de colores más amplia, la proyección en alto rango dinámico, desde 48 a 120 fotogramas por segundo, entre otras tecnologías, ha sido descrita por los expertos como una innovación disruptiva en lo que a calidad de imagen se refiere y se está situando como la tecnología que podría redefinir la experiencia de la gran pantalla en un futuro cercano.
La innovación contínua y los cambios son un elemento central del negocio del cine y desde UNIC intentamos asesorar a nuestros socios para que identifiquen las tecnologías que van a cambiar las reglas del juego. No podemos aconsejarles a la hora de tomar decisiones de negocio, dejamos eso es su mano, pero sí les ayudamos a evaluar las nuevas tendencias entre los espectadores y a asegurarse de que la inversión que vayan a realizar les traerá un retorno palpable, tanto para ellos como para todo el sector de la exhibición cinematográfica.»
AV451: ¿Qué puede contarnos sobre nuevos contenidos en salas de cine? En los últimos tiempos se puede ver ópera, ballet, conciertos de música en directo, campeonatos de videojuegos… ¿Es una tendencia al alza?
P.C.: «A medida que la gestión del contenido y la programación de las salas se centre más y más en el consumidor, los largometrajes y los eventos ayudarán a traer más gente a las salas, incluso a traer públicos más diversos.
La transición digital ha dado a los exhibidores la oportunidad de diversificar su oferta y a ir más allá de la proyección de películas, hasta el punto de que ahora son capaces de incluir un buen abanico de contenidos, desde conciertos a competiciones online de videojuegos. Los circuitos de cine están invirtiendo constantemente en mejoras relacionadas con la calidad de la imagen y del sonido para hacer la experiencia más inmersiva y diferenciarse de manera notable del entretenimiento en el hogar.
El uso de las salas para otros contenidos ha tenido resultados positivos en Europa en los últimos años y representa una pequeña pero creciente cuota del total de la taquilla. Es interesante ver cómo los gustos y las preferencias varían de un país a otro, se nota, por ejemplo, en la proyección de eventos deportivos.
Sin embargo, el desarrollo más interesante debe partir precisamente de ahí, del estudio de la audiencia y del uso inteligente de los datos que se pueden recopilar a través de la asistencia a salas, de las redes sociales y de las aplicaciones móviles, esto puede ayudar a los cines a conectar y fidelizar la audiencia, siguiendo sus patrones de consumo y construyendo una dimensión social del simple hecho de ir al cine.»
AV451: ¿Es UNIC optimista sobre el futuro del cine en España?
P.C.: «La decisión del gobierno de aumentar más del doble el IVA en las entradas de cine, desde el 8 hasta el 21 por ciento, ha tenido consecuencias dramáticas en el sector cinematográfico de España, que ya tenía bastante con la transición digital y los altos niveles de piratería.
Desde UNIC entendemos las dificultades económicas que ha estado sufriendo España, pero tocar precisamente una pieza clave de la economía local de esa manera nos parece contraproducente y cortoplacista y además pone en riesgo muchos puestos de trabajo, justo cuando no se debería destruir empleo. Además, se pone en riesgo toda la industria cinematográfica de España y a la vez se priva a los ciudadanos de un recurso cultural y creativo único. Por no decir que anima a que aumenten las descargas ilegales de contenido.
Todos estos elementos han tenido un impacto desastroso en la venta de entradas y en la taquilla en España durante los últimos diez años. Pero el sector viene mostrando síntomas de recuperación desde 2014, con buenas cifras también en 2015, sobre todo impulsada por películas nacionales. Aun así, la taquilla es todavía menor que antes del incremento del IVA.
Otro instrumento detrás de esta mejora es la Fiesta del Cine, lanzada en 2009. Con los años, los organizadores han innovado y utilizado nuevas tecnologías para mejorar el alcance de la oferta. El gobierno español debería cumplir su parte para ayudar a reavivar el sector, devolviendo el IVA reducido a las entradas de cine.»
AV451: ¿Qué pueden hacer los exhibidores para luchar contra la piratería?
P.C.: «Está claro que se necesita hacer más para promover el consumo responsable online y aumentar la conciencia de lo que supone el uso correcto de los contenidos con copyright. Los exhibidores seguirán trabajando con sus socios distribuidores para plantar cara a las grabaciones ilegales en las salas y a promocionar esta conciencia de la que hablaba a través de varias campañas.
Sin embargo, hay una clara necesidad de que los políticos que redactan las leyes aseguren que las continuas violaciones de copyright se pueden prevenir, que las plataformas online contribuyen a combatir la piratería, y que las normas de la Unión Europea sobre copyright se implementan de manera más efectiva en los estados miembro.
Si la tendencia actual de piratería prevalece, Europa pone en riesgo su diversidad cultural y su industria de medios profesionales independiente.»
AV451: ¿Qué se puede hacer para aumentar la proyección y la venta de entradas para películas producidas en Europa?
P.C.: «El cine digital ya ha cumplido su promesa de cambiar profundamente la economía y el modelo operativo del sector, llevándonos hacia una mayor diversidad de la oferta cinematográfica en Europa, caracterizada por una mayor flexibilidad en la programación que permite a los operadores responder al gusto cada vez más fragmentado de la audiencia. El número de películas europeas estrenadas en cines asociados a UNIC ha crecido de manera considerable en los últimos años.
Dado el papel cultural y económico que muchos gobiernos europeos atribuyen al cine, hay bastante dinero público apoyando la creación y la distribución de películas por toda Europa, una tendencia específica de Europa de la que se benefician tanto grandes como pequeños circuitos de salas.
UNIC también apoya la red Europa Cinemas, dedicada a atraer espectadores hacia películas europeas no nacionales, de este modo se reconoce el papel crucial de las salas a la hora de contribuir a que el talento local llegue a una audiencia internacional más amplia. Europa Cinemas es única y es una de las banderas del apoyo a la cultura europea.
Con más de 1.900 películas producidas en Europa cada año, los circuitos de cine siguen haciendo hincapié en la necesidad de estrategias más centradas en la audiencia dentro de las leyes europeas, argumentando que los fondos dedicados al cine deberían apoyar el desarrollo de obras que se hagan con el público amante del cine en mente.»
El último informe anual de UNIC publicado corresponde a 2014-2015.
