La Unión de Televisiones Comerciales Asociadas ha llevado a cabo su decisión de recurrir la sentencia del Tribunal Supremo que indica que nueve canales de TDT tienen que cesar sus emisiones por haber sido autorizados sin el concurso previo que marca la ley. El Gobierno de Rajoy decidió acatar la sentencia tras varios meses de negociaciones con las privadas y se marca el 1 de enero de 2014 como fecha máxima para ejecutar la sentencia, aunque hay rumores de presiones para que se realice en este mismo año.
Desde que se conociera la decisión del Consejo de Ministros el pasado 22 de marzo los responsables de las televisiones privadas han declarado en numerosas ocasiones que esta situación está llevando al panorama televisivo a una «situación de inseguridad jurídica sin precedentes». Y es que, tras varios millones de euros invertidos en la puesta en marcha de nuevos canales, todo el trabajo puede irse por el desagüe debido a la sentencia. El Gobierno ha admitido la sentencia del Supremo, lo que ha endurecido gravemente la relación con la televisión, que sigue siendo el medio de comunicación principal en España.
Si la sentencia se ejecuta, Atresmedia perdería tres canales, Mediaset España dos, y Veo TV y Net TV otros dos cada uno.
La decisión de acudir a los tribunales ha sido tomado por «unanimidad», según ha informado UTECA.
Como recoge Europa Press, desde que se supo la decisión del Gobierno, varios directivos de las televisiones se han pronunciado en esta dirección. Así, durante la Junta de Accionistas de Mediaset España en abril, el consejero delegado del grupo, Paolo Vasile, se quejó de que el Ejecutivo «mantenga en vilo a todo el sector», mientras que el presidente de la compañía, Alejandro Echevarría, pidió al Gobierno «un mínimo de responsabilidad frente a los operadores de televisión, que acatando lo establecido en las reglas de planteamiento han venido acometiendo importantes inversiones para poner en marcha nuevos canales de televisión».
Por su parte, el consejero delegado de Atresmedia, Silvio González, se mostró la semana pasada «optimista» sobre la posibilidad de que las televisiones consigan alcanzar un acuerdo con el Gobierno y avanzó que esperan una decisión definitiva para junio o julio. Además, subrayó que la sentencia del Supremo «no cambia la situación» porque las televisiones tienen un acuerdo previo con el Gobierno, del momento en que se proyectó el apagón analógico, en el que se les garantizaba que iban a mantener todos sus canales.
