Víctor López, CEO de Ánima Kitchent, habla con Audiovisual451 en la recta final de la producción de ‘Cleo & Cuquín’. El ejecutivo, con una larga trayectoria en contenidos de animación, repasa la situación actual para los productores españoles: desde el impulso canario al reto del cambio en el consumo audiovisual.
Audiovisual451: Hace alrededor de un año nos decías que Canarias iba a cambiar la vida de los productores españoles de animación.
Víctor López: “Es verdad. Nos falta un último peldaño para confirmarlo: que los inversores canarios se sientan con la seguridad jurídica suficiente como para poner el dinero en las AIEs. Hoy en día están dispuestos a invertir pero las inspecciones tributarias que ha habido en el sector les echan un poco para atrás todavía. Creo que Canarias va a cambiar la forma de financiar los contenidos, la forma en la que vamos a los mercados internacionales. Para nosotros es una novedad plantearnos una coproducción en especia, es decir, tener otras compañías que producen una parte de un proyecto y nosotros capitalizar el incentivo canario como aportación a la producción, algo que los franceses y los canadienses vienen haciendo desde hace décadas. Esto va a ser un cambio de paradigma de la forma de financiar y producir los contenidos en España.
A451: ¿Qué les dirías a esos productores españoles que son escépticos sobre trasladarse o abrir filial en Canarias?
V.L.: “Para cualquier proyecto del perfil de ‘Cleo & Cuquín’, con una inversión considerable, creo que venir a Canarias conviene desde el punto de vista económico sin ninguna duda. Las AIEs desembolsan el dinero al final de la producción y tú, como productor, necesitas la capacidad financiera suficiente como para adelantar ese capital. También es cierto que abrir oficina en Canarias significa más viajes, la creación de un equipo nuevo, la duplicación de algunos medios técnicos, tienes que reforzar áreas como producción o gestoría… Pero si se ratifica en que las AIEs son una realidad, merece mucho la pena venir a Canarias a producir. Las conversaciones que hemos tenido con inversores locales han sido muy positivas y tenemos perspectivas muy buenas.
Hay que estar preparado para pasar más tiempo lejos de tu familia, quitarte horas de sueño, estar más tiempo metido en un avión… pero esto también forma parte de tener una empresa y de lo que tus socios te exigirían en cualquier negocio.”
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A451: Televisa, vuestro primer y principal socio para ‘Cleo & Cuquín’, está viviendo un huracán. ¿Os han temblado las piernas ante los cambios de ejecutivos, etc.?
V.L.: “Sí. No nos ha pillado por sorpresa, llevábamos muchos años cerca de Televisa y éramos conscientes de la situación, de cómo han sido los últimos años. Nos afectó en la medida en que los interlocutores con los que empezamos ya no están, eso supone que tienes que volver a ganarte la confianza dentro de la empresa. Pasamos por un periodo de incertidumbre, no es que hubiera dudas pero pasas de tener una forma de trabajar a empezar de cero, a tratar con ejecutivos que tienen nuevas ideas, otro enfoque, a la vez parece que Televisa va a reforzar su apuesta por los contenidos infantiles.
Somos optimistas, estamos tristes por los que ya no están, contentos por seguir con Televisa.”
A451: La relación con Ánima Studios sigue intacta.
V.L.: “Sí, Ánima Studios son nuestros socios, unos tipos extraordinarios, hemos tenido mucha suerte, nos vemos con regularidad, son profesionales que entienden la industria, nos apoyan siempre, nos dan lo que necesitamos, que es independencia creativa y de producción, también para crear modelos de negocio y viajar a mercados internacionales, confían plenamente en nosotros.”
A451: ¿Qué tiene ‘Cleo & Cuquín’ para competir en un mercado de contenidos saturado?
V.L.: “Sinceramente, no lo sé. El tiempo me ha enseñado que la fórmula del éxito no se puede prever. Hay una verdad en los negocios que dice que “rentabilidades pasadas no garantizan rentabilidades futuras”. Nunca saber si una producción va a gustar o no, depende de los niños, los padres, los abuelos, con ‘Cleo & Cuquín’ tenemos indicios buenos, como el éxito de los 21 clips musicales de YouTube, y esto nos permite ser moderadamente optimistas. Pero con la trayectoria que llevamos hemos aprendido a ser cautos, estar tranquilos con el trabajo que hemos hecho, dejar la serie en manos del público una vez que se estrene y esperar la reacción.
Como estrategia empresarial, creo que tenemos socios muy buenos que son los que te permiten crecer con cierta solidez, tenemos a Mattel como juguetero mundial, por primera vez trabajamos con ellos y es espectacular ver cómo funcionan. Por otro lado, Netflix ha comprado la serie para todo el mundo, eso es muy importante para nosotros. El posicionamiento que tenemos en YouTube es también relevante, nos da un plus dentro de ese mercado saturado al que te refieres. Por citar sólo a algunos.
Lo que está claro es que no hay nada escrito, no se pueden cerrar las puertas a nada, ni a la duración de los episodios, ni a crear marca con un solo contenido, o si no mira lo que ha conseguido ‘Frozen’ con una película, ¡una! El mercado está difícil, antes emitían en televisión y establecías una estrategia de licencias, pero hoy en día tienes YouTube, Netflix, y para todo hay que producir contenido, los niños están en todas partes y hay que hablarle de una manera en cada soporte. Esto afecta directamente al coste de producción, por eso hay que estar preparado para adaptarse a los cambios.
Creo que es muy importante incorporar a los equipos personas de 20 o 22 años porque están mucho más frescos que tú, entienden mucho mejor la industria actual. Hace quince años innovamos con ‘Pocoyó’, pero hoy en día nos cuesta más innovar y por eso necesitamos gente más joven que nosotros que nos expliquen cómo consumen los contenidos. Hay un elemento clave: el Big Data. Tenemos mucha información de los usuarios de nuestras producciones y tenemos que empezar a usarla para comprender a los consumidores. Hemos vivido en una ceguera permanente hasta ahora.”
A451: Teniendo Netflix los derechos para todo el mundo, ¿cómo va a ser el estreno de ‘Cleo & Cuquín’?
V.L.: “Primero en las televisiones y después en Netflix. Intentamos seguir una estrategia global de aplicación local. Tenemos una directrices genéricas de construcción de marca que diseñamos desde Madrid y que se aplican después en México, Estados Unidos, Francia, Italia, China… a partir de ahí buscamos la forma idónea de estrenar la serie, de la mano de socios locales.”
A451: Televisión Española ha confirmado su entrada en vuestra próxima serie de animación, ‘Flo y los atrevidos’, ¿en qué punto estáis?
V.L.: “Estamos negociando el contrato con Televisión Española, supimos que entraban el pasado mes de septiembre. Tenemos un hueco económico que cubrir y estamos yendo a mercados internacionales en busca de financiación y de socios. ‘Flo y los atrevidos’ se basa en los libros de Elsa Punset sobre inteligencia emocional para niños, ella es una persona excepcional, los libros son un éxito de ventas en muchos países y transformarlos en serie es un reto, porque los libros son más densos y la serie debe ser más ligera, se trata de explicar los sentimientos de los niños en cuestión de minutos, pero va a quedar muy bien. Contamos con la propia Elsa para la parte narrativa y esperamos poder empezar en 2018 la preproducción.”
A451: Tenéis muchísimos proyectos en desarrollo, pero ¿de cuáles puedes hablar?
V.L.: “De los proyectos propios podemos hablar de ‘Wargos’, que presenta a un grupo de chicos que quieren ser jugadores profesionales de eSports, estamos en fase de diseño, ajustando la estética al target que buscamos, hemos presentado una biblia y hay conversaciones avanzadas con algunas compañías para codesarrollo, coproducción. Es un proyecto muy divertido, hemos tardado en advertir la realidad de los eSports, es algo que no hace más que crecer entre los chicos y nos estaba pasando por debajo. Esperamos poder presentar en Kidscreen un teaser.
Además, tenemos proyectos con terceros, pero es pronto para avanzar algo sobre ellos.”
A451: ¿Estás entonces más contento con la situación de España?
V.L.: “No. Estoy contento con las AIEs y con la oportunidad de Canarias. Pero nos siguen faltando muchas cosas: la televisión pública no tiene presupuesto suficiente, las privadas no apuestan por contenidos infantiles españoles… Son problemas endémicos. Tenemos que salir al extranjero a buscas coproductores, vemos cómo los franceses, por ejemplo, se ríen cuando les hemos tenido que vender una propiedad como ‘Pirata & Capitano’. El esfuerzo de hacer un desarrollo y después tener que venderlo es muy doloroso, y sólo porque no tenemos acceso a la financiación. Clan no puede pagar lo que paga France Televisions o TF1, no es que no quiera, es que no puede. ¿Cómo puede ser que Canadá o Francia paguen más por un contenido español que la propia España?
No quiero ponerme triste, pero es que la base no cambia en España. Veo proyectos excelentes que no pueden salir adelante, hay que salir fuera, mira lo que ha pasado con ‘Yoko’, es una serie nacida en País Vasco que ha tenido que irse a Rusia. Vas a MIPCOM y ves publicidad de ‘Yoko’ como si fuera un contenido ruso. Es una pena. La industria de la animación requiere de un cierto cariño de lo público. Es una pena que se nos siga viendo como un grupo de pedigüeños.”
